Un estudio realizado en Austria publicado en el portal de preprintsMedrxiv, en el que se ha entrevistado a varios cientos de mayores de 60 a 85 años, concluye que las restricciones duras del Covid de 2020 afectaron más a las personas que sufrían soledad no deseada antes de la pandemia.
Así, según la encuesta, durante los cierres, este sentimiento de soledad llegó a un pico del 10%, que después, en verano de 2020, cuando había menos limitaciones, disminuyó al 5%.
Y los que más experimentaron esta sensación fueron las personas mayores que no vivían con alguien y que no podían comunicar este sentimiento a otros.
"Después de casi dos años, la pandemia sigue representando una grave amenaza para la salud mundial. Para romper olas de tasas exponenciales de infección y para evitar sobrecargar la atención hospitalaria, muchos gobiernos respondieron repetidamente con una serie de políticas de contención y cierre. Al restringir los contactos sociales, las intervenciones de salud pueden dar lugar a efectos secundarios psicosociales negativos entre los adultos mayores, como como un aumento de la soledad, que puede definirse como una discrepancia entre lo deseado y las relaciones sociales existentes", explican los investigadores que han realizado el estudio.
"Los adultos mayores ya se enfrentan a un mayor riesgo de soledad, debido a la pérdida de parejas y compañeros o por problemas de salud, y se ha considerado durante mucho tiempo perjudicial para la salud física y mental de este colectivo. Por lo tanto, la soledad inducida por las restricciones pandémicas es un tema de preocupación actual", justifican.
Y recomiendan: "Las estrictas restricciones de Covid-19 conducen a la soledad situacional, particularmente entre aquellos que vivían solos. Se deben hacer esfuerzos para permitir que los mayores que no viven con nadie puedan tener un contacto personal seguro durante los períodos de encierro".
Sobre el autor:
Pablo Recio
Pablo Recio es periodista especializado en salud y dependencia, es graduado en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid y comenzó su carrera profesional en el diario El Mundo cubriendo información cultural y económica.
Además, fue cofundador de la radio online Irradiando y cuenta con un máster en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid y otro en Periodismo por el CEU San Pablo/Unidad Editorial.