El pasado martes de agosto tuvo lugar en La Bisbal d'Empordá (Girona) graniza la peor granizada en años, que terminaba con el fallecimiento de una niña de 20 meses tras recibir el impacto de una bola de hielo que, según expertos, estiman que pudo caer a una velocidad superior a los 200 km/h.
Como desgraciadamente se ha comprobado, la velocidad a la que pueden llegar a caer estas bolas de hielo es capaz de provocar heridas mortales, como la de esta bebé, que tuvo que ser trasladada de una traumatismo grave al Hospital Josep Trueta de Girona, donde finalmente falleció por la noche. La tormenta de granizo provocó también una serie de daños en edificios y cableados, además de heridos, según informaban los Bombers de la Generalitat en sus redes sociales, explicando que habían atendido 39 avisos por estas causas.
El accidente mortal tuvo lugar cuando la niña y su padre salieron al patio de su casa a ver la lluvia, fue entonces cuando recibió el impacto que le provocó una herida mortal.
En este sentido, José Miguel Viñas, meteorólogo de Meteored (@MeteoredES), explicaba en sus redes la velocidad que puede llegar a alcanzar una bola de granizo como estas. "Si, como parece a tenor de los vídeos y fotografías, han caído piedras de granizo de 10-12 cm, su velocidad al impactar contra el suelo o el agua de las piscinas puede haber superado los 200 km/h (60 m/s = 216 km/h)".
Verdadero riesgo de muerte
Podemos llegar a pensar que la velocidad depende principalmente de la altura a la que caigan estas bolas, sin embargo, el tamaño también es importante, ya que "para un rango creciente de tamaños los granizos alcanzan diferentes velocidades terminales de caída. A partir de ciertos calibres ya no aumenta la velocidad terminal".
Teniendo esto en cuenta, el impacto sobre una persona puede llegar a provocar un daño considerable, habiendo un verdadero "riesgo de muerte". "No es una exageración. El cráneo es duro, pero un impacto a esa velocidad puede fracturarlo y causar una lesión cerebral", añadía.
En las imágenes y vídeos difundidos, se puede observar el gran tamaño que han alcanzado estas bolas de hielo, y la siguiente pregunta más recurrente ha sido: ¿cómo han llegado a formarse? Viñas también daba explicación a esto: "Este tipo de piedras de hielo gigantes se forman por agregación de granizos de menor tamaño, que chocan violentamente entre ellos y terminan formando un aglomerado".