Investigadores del Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles de Sudáfrica ha publicado un estudio sobre la variante C.1.2. Esta nueva cepa que tiene entre 43 y 59 mutaciones en comparación con el virus originado en Wuhan, "ha mutado sustancialmente" con respecto a la C.1. La variante de la que procede se extendió a comienzos de año por Sudáfrica.
La C.1.2 se detectó por primera vez en mayo de 2021 en Mpumalanga y Gauteng, provincias de Sudáfrica, y desde entonces hasta el 13 de agosto la variante ha sido detectada en otras nuevas provincias sudafricanas, y en siete países: Inglaterra, China, la República Democrática del Congo, Mauricio, Nueva Zelanda, Portugal y Suiza.
Es la variante con más mutaciones hasta la fecha
Esta variante se ha extendido a tal velocidad, que muchos investigadores la comparan con la Delta y Beta. Ha pasado de representar el 0,2% de los casos, al 1,6% en junio, y el 2% en julio. Además, el estudio confirma que debido al retraso que pueden provocar las secuenciaciones (entre dos y cuatro semanas), la nueva cepa podría estar más extendida de lo que piensa, no solo por África, sino también a nivel mundial.
Esta variante es la que más mutaciones presenta hasta la fecha, pero a pesar de eso los investigadores del estudio explicaron a The Conversation que todavía es pronto para saber si esto quiere decir que serán más transmisibles o menos resistentes a las vacunas.
El 31 de agosto la Organización Mundial de la Salud rechazaba la propuesta de clasificarla como "variante de interés" o "variante de preocupación", ya que aún no se ha confirmado que cumple todos los criterios: la transmisibilidad, la severidad de la enfermedad, el escape inmune, así como riesgos para la salud pública global.
Creen que puede evadir parcialmente la respuesta inmune
La C.1.2 comparte mutaciones con algunas de las principales variantes de preocupación (Alfa, Beta, Delta y Gamma), y con las tres de interés (Kappa, Eta y Lambda). Además de eso, tiene tres adicionales, y los autores del estudio creen que es posible que "evada parcialmente la respuesta inmune", aunque siguen creyendo que las vacunas son las grandes protectoras frente a las muertes y hospitalizaciones.
El ratio de esta mutación es entre 1,7 y 1,8 veces más rápido que el resto de variantes, y por eso creen que la infección que provoca en las personas sería más larga.
El estudio concluye advirtiendo que la nueva cepa sigue creciendo, y hay que continuar vigilándola.