El coronavirus vuelve a las residencias de mayores. Tras tres semanas de estabilidad, la incidencia ha aumentado desde los 43,5 casos por cada 100.000 hasta las 99,7 infecciones, según datos del Imserso del día 21 de noviembre.
De esta manera, a falta de conocer si esta tendencia se ha consolidado en la última semana, se podría decir que la transmisión en el resto de la sociedad podría estar llegando, de nuevo, a los centros sociosanitarios, pese al efecto de la tercera dosis –que limita en parte su expansión–.
Eso sí, por ahora, este incremento de las infecciones no ha hecho que aumente el número de muertes, que sigue siendo bajo comparado con otros periodos de la pandemia.
De 591 fallecimientos de residentes por todas las causas, únicamente nueve fueron con Covid, aunque la letalidad desde que se inyectaron las primeras vacunas se mantiene en el 10%, por lo que infectarse con coronavirus conlleva un riesgo alto para este segmento de población.
Pincha en la foto para ver más información. Fuente: Imserso.
Cataluña, donde más aumenta
Además, no todas las comunidades registran un aumento de casos. Destacan sobre todo Cataluña (39, repartidos en 12 centros), Aragón (36, en uno), Castilla y León (31, en cinco) y Andalucía (12, en tres).
En paralelo, hay regiones que no tuvieron ningún caso la semana del 15 de noviembre, como Canarias, Cantabria, Murcia, Melilla o La Rioja. En esta última autonomía, llevan 14 semanas sin ningún residente contagiado, y todo ello, pese a que la incidencia del territorio es de 200 casos por cada 100.000 habitantes.
Por esta razón, queda por ver si el alza de casos es puntual o si la variante delta va a volver a entrar masivamente en los centros sociosanitarios, como pasó en verano.
Una posibilidad, que quizá se vea limitada por el refuerzo de la vacuna que van a recibir los trabajadores y una parte de los familiares –muchos también son mayores–, así como las inyecciones que pusieron a los usuarios.
¿Qué pasará con ómicron?
Pero, ¿qué pasaría si la nueva mutación del virus, ómicron, se hace hegemónica en España como ha pasado en la provincia de Gauteng, en Sudáfrica? ¿Corren peligro los mayores de residencias?
Por ahora, todo son hipótesis. Ahora bien, con que una sola de todas las posibilidades que baraja la Organización Mundial de la Salud se confirme, la variante supondría un riesgo para los más vulnerables.
Y es que, se está estudiando si puede ser más transmisible o si elude la protección que ofrecen las vacunas frente a la infección. Dos posibilidades, que podrían derivar en macrobrotes que, por mucho que sean mayoritariamente de asintomáticos, generarán un pequeño porcentaje de hospitalizaciones, varios decesos y el cierre a cal y canto de las residencias, con el impacto que esto supone para las familias y los usuarios.
A pesar de todo, se desconoce si la tercera dosis ofrece a los muy mayores algo más de protección frente a ómicron o si la mutación, que la OMS y las farmacéuticas están analizando y sobre la cual darán información en unos días, implica síntomas igual de graves o si, por contra, el virus se ha atenuado.
Fuente: Our World in Data.
"De momento, sólo podemos hacer conjeturas. No hay evidencia científica para poder decir nada. Tardaremos unas semanas aún. Si se confirma que la variante es más contagiosa, como se sospecha, al tener más de 30 mutaciones en la proteína de la espícula, producirá más casos que delta, también en personas ya vacunadas", comenta el epidemiólogo y portavoz de la asociación de Salud Pública de Madrid (@amasap), Fernando García.
"Sea como fuere, se deberían reforzar las medidas para reducir la transmisión del SARS-CoV-2 en las residencias: completar la tercera dosis, vacunación completa de los trabajadores y de los visitantes, vigilancia epidemiológica estrecha, aislamiento de los casos, cuarentena de los contactos, mantenimiento de las medidas no farmacológicas –distancia de seguridad, mascarillas en interiores, ventilación adecuada, evitar espacios mal ventilados y aglomeraciones, higiene de manos e higiene respiratoria–. Y muchas de estas medidas se deberán aplicar también en los mayores que viven en sus domicilios", indica.
"Y a nivel mundial, no hay que olvidar que si queremos contener esta pandemia de un modo efectivo habrá que vacunar a toda la población, no sólo a la de los países ricos. No tiene sentido que en Europa esté vacunado el 70% de la población mientras que en África solo lo esté el 7%, una décima parte. Mientras haya una porción muy alta de la población sin vacunar, el virus seguirá mutando, y llegará un momento en que lo hagan resistente a las vacunas, y vuelta a empezar. Hay que romper ese círculo con medidas mundiales, para las que los países ricos tengan una responsabilidad mayor, pues tienen los recursos necesarios", comenta.
Coincide con García el investigador de la Universidad de Leicester de Reino Unido, Salvador Macip (@DrMacip). "No sabemos suficiente de esta variante para conocer si se comportará como las otras, o no, ni por lo que se refiere a que sea más infecciosa ni al escape de las vacunas. Habrá que esperar aún unas semanas", adelanta.
Explosión de casos activos en la provincia de Gauteng (Sudáfrica), donde ha habido una mayor afectación de ómicron. Se desconoce por ahora si es porque la variante es más contagiosa o por el tipo de brote. Fuente: Ministerio de Salud de la República de Sudáfrica.
"Hay demasiado revuelo. Todavía sabemos muy poco, sólo, que es una variante nueva y que tiene muchas mutaciones, pero eso no garantiza ni que vaya a transmitirse más ni que cause enfermedad más grave o que vaya a evadir la respuesta inmune", afirma la inmunóloga del CSIC, Matilde Cañelles (@CanellesMatilde).
"¿Que se extiende rápido? Tampoco lo sabemos. Se ha encontrado en otros países, pero simplemente es que quizá no se haya visto antes. Hay que estar vigilantes, pero tranquilos", recomienda.
Y respecto al aumento de casos observado en las residencias en la última semana con delta, explica: "La tercera dosis la acaban de poner hace poco. Así que yo estaría relativamente tranquila, porque la gente que ha tenido su dosis recientemente es raro que pase la enfermedad con gravedad. Aunque habrá que estar vigilantes, porque habrá mayores de 80 años que no podrán montar una respuesta ni con la tercera dosis, pero tampoco veo un escenario catastrófico", tranquiliza.
"No se ha hecho lo suficiente para que las nuevas variantes no entren en las residencias. No sé qué ocurrirá con ómicron, pero puedo asegurar que, mientras se siga permitiendo que la mayoría de las trabajadoras de las residencias estén en las condiciones precarias actuales y no exista un sistema de vigilancia epidemiológica y una seria investigación de brotes en cada residencia, seguirá entrando el virus en cualquiera de sus variantes", comenta por su parte la epidemióloga María Victoria Zunzunegui.
"Además, las vacunas no confieren una protección del 100%. Hay que cambiar el enfoque epidemiológico y actuar antes de que el virus invada las residencias, pero eso exige una inversión económica que ni las empresas ni las CCAA parecen dispuestas a hacer. Las personas mayores que residen en los centros sociosanitarios seguirán pagando un precio desproporcionado por la pandemia. Vamos siempre por detrás, ignorando los principio básicos de la epidemiología de enfermedades infecciosas y el control de brotes. Se elimina rápidamente el rastreo, la vigilancia, la detección de casos, el aislamiento, las cuarentenas, etc. En estas condiciones, la transmisión comunitaria es inevitable y de la comunidad, a las residencias desprotegidas, es fácil pasar", señala.
"En centros residenciales, la incidencia está por debajo de la media poblacional y de la de los grupos de más de 70 años no residentes. Con todo, la incidencia a siete días está por encima de la mitad de la IA a 14, lo que sugiere que, de momento, va al alza, aunque menos rápidamente que en población general", analiza el epidemiólogo e investigador de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (@GVAfisabio), Salvador Peiró.
"En principio, con las terceras dosis (si somos suficientemente rápidos administrándolas en mayores de 60 años) y el control de interiores (ventilación, mascarillas...) debería ser suficiente para mantener el control funcional de la transmisión y, sobre todo, para reducir aún más los casos de Covid grave. Pero vienen semanas de mucha reunión social y habrá que verlo. Si en las próximas dos semanas sube mucho, habrá que pensar en alguna restricción de cara a la navidad. En todo caso, la atención primaria va a sufrir bastante (entre PCR, rastreos, aislamientos y bajas, sus cargas de trabajo vuelven a ser muy altas y ahora con muchos menos refuerzos)", prosigue.
"Y sobre ómicron. No sabemos lo suficiente para especular demasiado, más allá de que tiene muchas mutaciones y no conocemos cómo funcionan conjuntamente. Es muy difícil que cualquier variante escape completamente a la protección que ofrecen las vacunas. Pueden reducir algo la efectividad. De hecho, ómicron ha despegado en un entorno muy poco vacunado y no sabemos cómo competirá contra la fantástica transmisibilidad de Delta. De momento, vamos encontrando casos importados, y porque los buscamos. Pero no parece haber transmisión comunitaria. En el caso de Valencia, se ha buscado expresamente en las muestras de aguas residuales de la semana pasada y no se ha encontrado nada (y probablemente ese sería el primer aviso). Así, si escapara a la protección habría que rediseñar las vacunas y volver a empezar. Pero ya digo que veo eso muy muy muy improbable", predice.
Y finaliza: "En este momento, toca cierta prudencia para ralentizar en lo posible la transmisión mientras tenemos tan poca información, es decir, control de viajeros, detección de casos importados, PCR específica, secuenciación de casos sospechosos, búsqueda en aguas residuales... pero poco más".
Cabe recordar que, de momento, se ha detectado un caso de ómicron en España.
Sobre el autor:
Pablo Recio
Pablo Recio es periodista especializado en salud y dependencia, es graduado en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid y comenzó su carrera profesional en el diario El Mundo cubriendo información cultural y económica.
Además, fue cofundador de la radio online Irradiando y cuenta con un máster en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid y otro en Periodismo por el CEU San Pablo/Unidad Editorial.