Fundación Pilares: "Que la OMS catalogue la vejez como enfermedad es una aberración injustificable"

Continúan las crtíticas contra la sorprendente intención de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de incluir en enero de 2022 la vejez como enfermedad en la undécima edición de su Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE).

La Fundación Pilares, en cuanto entidad centrada en la atención a las personas mayores, recuerda que "no puede dejar pasar por alto la amenaza, tan  incomprensible como ajena a toda lógica científica y social, perpetrada por un organismo de prestigio reconocido como la OMS contra el concepto de vejez y contra la realidad cotidiana de quienes constituyen el colectivo de personas mayores".

"Ignoramos las razones que han movido a la OMS para embarcarse en una iniciativa que no se sostiene ni desde la ciencia médica, ni desde la biología, ni cuando se  contempla desde la óptica de las ciencias sociales o del comportamiento. Mucho menos desde la bioética. Nuestro énfasis no es tanto desarrollar unos argumentos en contra de la propuesta bastante evidentes, cuanto sumar nuestras protesta a las que están teniendo lugar en todo el mundo por parte de sociedades científicas y de toda suerte de organizaciones centradas en la persona mayor. Queremos contribuir con ello a frenar un despropósito que, de consolidarse, sólo puede generar daño y confusión", apuntan desde la Fundación Pilares.

"Por sorprendente que pueda parecerle a cualquier persona medianamente informada, la OMS tiene previsto introducir el término vejez en la próxima edición de su Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) como una más dentro de su catálogo", manifiestan en la Fundación desde donde consideran este propósito, si finalmente llega a hacerse realidad, como "una aberración conceptual, sin justificación posible y que en la práctica supone una forma más de discriminación por edad que añadir a las muchas de las que tradicionalmente viene siendo víctima este grupo etario. Una aberración que, por otra parte, se contrapone a la doctrina mantenida por la propia OMS a este respecto. Como ejemplo, entra en contradicción con las recomendaciones de su Informe mundial del envejecimiento y la salud, y sus propuestas contenidas en Década del  envejecimiento saludable el periodo 2020-2030 en el que nos encontramos"

La propia ONU pide "luchar contra el edadismo"

Por si lo anterior fuera poco, la ONU, de quien en definitiva depende la OMS, ha elaborado su Informe mundial sobre discriminación por edad que se hizo público el pasado 18 de marzo en el que se afirma sobre el edadismo que "se calcula que una de cada dos personas en el mundo tiene actitudes edadistas, lo que empobrece la salud física y mental de las personas mayores, además de reducir su calidad de vida, y cuesta cada año miles de millones de dólares a la sociedad". 

En el mismo informe, se pide "actuar con urgencia para luchar contra el edadismo y realizar evaluaciones e informes sobre este problema con miras a revelarlo como lo que es: una sigilosa pero devastadora desgracia para la sociedad".  

El propio Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, que ahora pretende introducir el término vejez en la próxima edición  de su Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) como una más dentro de su catálogo, declaraba hace apenas tres meses que "ahora que los países trabajan en la recuperación y reconstrucción con motivo de la pandemia, no podemos permitir que estereotipos, prejuicios y actitudes discriminatorias basados en la edad reduzcan las oportunidades para garantizar la salud, el bienestar y la dignidad de las personas en todas partes".

"La pandemia ha puesto de relieve las vulnerabilidad de las personas mayores, especialmente las más marginadas, las cuales suelen enfrentarse a actitudes discriminatorias, que se superponen a diferentes obstáculos, por ser pobres, vivir con discapacidades, ser mujeres que viven solas o pertenecer a grupos minoritarios", ha declarado Natalia Kanem, Directora Ejecutiva del Fondo de Población de las Naciones Unidas, antes de pedir que "hagamos que esta crisis marque un punto de inflexión en la forma en que vemos, tratamos y respondemos a las personas mayores", algo que también choca frontalmente con la intención de incluir la vejez en el catálogo de enfermedades como una más. 

Natalia Kanem, directora ejecutiva del Fondo de Población de la ONU

Hasta en la 69ª Asamblea Mundial de la Salud se lanzó un Plan de Acción Multisectorial, en el que se llamó a “combatir los estereotipos que definen actualmente lo que es ser mayor”.

"Envejecer es un proceso, no una enfermedad"

Organizaciones de personas mayores de todo el mundo y de profesionales relacionados con el proceso de envejecimiento, como geriatras, gerontólogos y expertos de todo el mundo han calificado de "inaceptable" la pretensión de la Organización y han llegado a exigir el cese del Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebrejesus.

"Es urgente e ineludible la destitución del Director General de la OMS, que ha demostrado su profunda incompetencia en el manejo conceptual de los procesos cronológicos de la vida", demanda Eduardo Rodriguez Rovira, presidente de Honor de la Confederación Española de Asociaciones de Mayores (CEOMA) y de la Fundación Edad&Vida.

De hecho, el propio Eduardo Rovira participó en un programa de radio en el que coincidió con representantes de mayores de países como Chile, Ecuador, Argentina... "y de ahí surgió la idea de solicitar la destitución del director general, Tedros Adhanom Ghebrejesus, su cese inmediato, porque es inadmisible que una persona de su responsabilidad y su, se supone, profesionalidad, pueda decir eso".

Y es que como recuerda el geriatra doctor Juan Manuel Martínez Gómez, presidente de CEOMA, "el envejecimiento es un proceso natural en los seres vivos, 'no una enfermedad'". 

“La vejez nunca puede ser una enfermedad, sino que es la consecuencia del paso del tiempo sobre los seres vivos o la disminución de la capacidad de adaptación de los diferentes órganos y sistemas y eso hace que las edades cronológicas, biológicas y psicológicas sean diferentes en las personas mayores pero nunca una enfermedad", explica el doctor Martínez Gómez.

Efectivamente, es la propia OMS la que ha publicado documentos en los que textualmente proclama que "desde un punto de vista biológico, el envejecimiento es la consecuencia de la acumulación de una gran variedad de daños moleculares y celulares a lo largo del tiempo, lo que lleva a un descenso gradual de las capacidades físicas y mentales, un aumento del riesgo de enfermedad, y finalmente a la muerte". Es evidente que todos, antes o después, deberemos decir adiós a la vida, pero también lo es que la OMS habla de "un aumento del riesgo de enfermedad", lo que implícitamente desdice que el propio envejecimiento sea una enfermedad.

También es la misma OMS la que reconoce que "esos cambios (en el proceso del envejecimiento) no son lineales ni uniformes, y su vinculación con la edad de una persona en años es más bien relativa. Si bien algunos septuagenarios disfrutan de una excelente salud y se desenvuelven perfectamente, otros son frágiles y necesitan ayuda considerable".