El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un Real Decreto por el que el uso de mascarillas dejará de ser obligatorio en espacios interiores a partir de este miércoles, tras ser publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
En rueda de prensa, la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha celebrado la medida, que "ha sido posible gracias a un trabajo conjunto y un esfuerzo colegiado en el que ha tenido que ver mucho la estrategia de vacunación".
"Es un día muy especial para el Gobierno y el conjunto de los españoles en la lucha contra el virus. Estamos avanzando en la normalidad. Mañana podremos desprendernos en interiores de las mascarillas y mostrar nuestros rostros y nuestras sonrisas", ha aplaudido.
Por su parte, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha detallado los lugares en los que la mascarilla en interiores aún será obligatoria, que son el transporte público, así como en el interior de los centros, de los servicios y de los establecimientos sanitarios, lo que incluye las farmacias, los hospitales, los centros de salud y los centros de transfusión de sangre.
En cuanto a las residencias de mayores, según ha aclarado la ministra, será obligatoria para los trabajadores y visitantes, pero no para los residentes, porque "se entiende que es su vivienda". "Pensemos en las residencias, como se entiende que es la vivienda de esta personas no será obligatoria para las personas mayores que viven en ella, sí lo serán para los trabajadores y, en el caso de las visitas, cuando estén de visita y compartan zonas comunes", ha subrayado.
La ministra también ha puntualizado que "se aconseja un uso responsable de la mascarilla" en población vulnerable como mayores de 60 años, personas inmunodeprimidas, embarazadas, profesorado vulnerable, eventos multitudinarios y reuniones familiares con personas que tengan factores de riesgo.
Darias ha resaltado que se trata de "un día importante en el que se siguen superando etapas" de la pandemia, que comenzó hace ya más de dos años. "Es un paso más en la evolución de la pandemia. La COVID-19 sigue entre nosotros, pero evoluciona de manera positiva y los indicadores marcan un nivel bajo con carácter general, estable en la mayoría del territorio. Seguimos avanzando desde la prudencia pero también desde la progresividad", ha apuntado.
La ministra ha insistido en que es el "momento oportuno" para tomar esta medida "muy meditada": "Nos encontramos en un contexto epidemiológico favorable que permite la flexibilización del uso de las mascarillas. Está motivada por la altísima cobertura vacunal de nuestro país, que ha cambiado las características de la pandemia. Y la gravedad de la enfermedad ha descendido de manera importante por el impacto positivo de las vacunas".
Además, ha defendido la retirada de las mascarillas sin esperar a ver el impacto de la Semana Santa en la evolución de la pandemia. "Hace un año teníamos un 21 por ciento de ocupación de UCI y hoy es del 4 por ciento. Ha podido haber alguna oscilación en la incidencia pero no se ha producido un elevado incremento en la ocupación hospitalaria. Es una medida de acuerdo con las personas expertas de la Ponencia de Alertas y contó con la práctica unanimidad de los miembros del Consejo Interterritorial".
¿Dónde habrá que seguir llevando mascarilla?
En cualquier caso, los españoles aún no se desprenderán del todo de la mascarilla, ya que seguirá siendo obligatoria en determinados ambientes, "en razón de la vulnerabilidad" de las personas que los suelen ocupar.
Por ejemplo, habrá que seguir llevándola en centros, servicios y establecimientos sanitarios, como hospitales, centros de salud, centros de transfusión de sangre o farmacias. En los hospitales, sin embargo, las personas ingresadas estarán exentas de llevarla cuando estén en su habitación.
La mascarilla en interiores también se deberá llevar en centros sociosanitarios como residencias de mayores, aunque no será obligatoria para los mayores pero sí para los trabajadores y los familiares que realicen visitas.
Igualmente, la mascarilla aún será obligatoria en transporte aéreo, ferrocarril, cable, autobuses y cualquier tipo de medio público. En los barcos, se deberá llevar cuando "no se pueda mantener la distancia de 1,5 metros".
"En ningún caso" en los colegios
Darias ha sido tajante para afirmar que la mascarilla "no se usará en ningún caso en ambientes escolares". "Ya no era obligatoria en recreos y ahora tampoco lo será en todos los ámbitos de los centros educativos", ha sostenido.
En el entorno laboral, de la misma forma, "no resultará obligatoria con carácter general". Darias ha puntualizado, no obstante, que los responsables de prevención de riesgos laborales de las empresas podrán acordar su uso "en función de la evaluación de riesgo del puesto de trabajo".
Tampoco será obligatoria ni en interiores ni en exteriores en partidos de fútbol o baloncesto, aunque la ministra ha aconsejado un "uso responsable" en este tipo de eventos masivos.
Pese a esta retirada "con carácter general" de la mascarilla, Darias ha recomendado un "uso responsable" en población vulnerable como mayores de 60 años, personas inmunocomprometidas, con alguna enfermedad de riesgo importante, embarazadas o profesorado con algún factor de vulnerabilidad. También es recomendable en eventos multitudinarios, aglomeraciones y en reuniones privadas cuando haya presentes personas vulnerables.
Sobre el autor:
Raúl Arias
Raúl Arias es periodista especializado en Política, Economía y Sociedad. Licenciado en la Universidad Complutense de Madrid, ha trabajado en diferentes medios de tirada nacional, siempre pegado a la actualidad.