Los mayores se enfrentan a un importante roto en el bolsillo: la subida de la prima de sus seguros de salud. El precio de este tipo de pólizas está disparado. Su precio ha subido este año más de un 9%y encara el 2025 con subidas de dos dígitos, pese a que la inflación se está relajando.
Pero para el colectivo sénior las cifras pueden ser mucho más sangrantes. Los mayores van a sufrir un encarecimiento récord en sus seguros de salud, nunca visto hasta ahora. Pagan hasta tres veces más cada mes en sus pólizas de salud, solo por su edad. Cuando reciben la notificación de renovación de prima, las subidas serán en muchos casos del 20% o superiores. Todo un desafío para unas pensiones que no dan más de sí.
Y eso que, en el último momento, se ha parado el intento del Gobierno de penalizar fiscalmente este tipo pólizas con la aplicación de un impuesto que grava con el 8% la prima que paga cada asegurado. Pese a que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz justificaba que “pagarán los que más tienen”, la realidad es que los mayores habrían sido los principales perjudicados, al ser el quienes más prima pagan por estos seguros. Por el momento, el colectivo sénior ha parado el golpe.
Subidas de precio récord
En 2023 las primas de este ramo del seguro subieron un 8,4% en España, la mayor subida de Europa, según datos de Eurostat. Este año, el precio medio de un seguro de salud completo ha aumentado un 9,5% en lo que va de año respecto al mismo periodo de 2023, según el indice de precios de este negocio del comprador Rastreator (@Rastreator).
Y en 2025 las subidas podrían ser muy superiores, de doble dígito. “Los seguros de salud renuevan buena parte de sus pólizas a final de año y, en la campaña actual, las compañías están aplicando subidas medias de sus precios que están por encima del 10%”, aseguran desde el comparador. Las aseguradoras justifican estas fuertes subidas en que quieren compensar el aumento de sus costes y la frecuencia con la que los asegurados hacen uso de su cobertura.
Por tercer año consecutivo, se prevé que los costes médicos globales aumenten a un ritmo de dos dígitos, según revela una encuesta realizada por la consultora WTW (@WTWcorporate). Los encuestados identificaron como principales factores el mayor uso de servicios de salud, el incremento de los costes farmacéuticos y el avance de nuevas tecnologías médicas. En concreto, las aseguradoras proyectan un aumento del 10,4% en los costes médicos para 2025.
Los mayores de 65 pagan un 122% más
La edad del asegurado es el factor que más influye en el precio que debe pagar por la prima de su póliza cada año. Con una cuota mensual media de 145 euros al mes, los mayores de 65 años pagan un 122% más que los jóvenes por un seguro completo. "A partir de los 60 o los 65 años, el número de compañías que ofrece una cobertura médica disminuye notablemente, por lo que hay menos oferta y por tanto un incremento en la prima. Uno de los principales motivos es que el riesgo que tendría que soportar una aseguradora es mayor que el de cubrir a un asegurado de menor edad", señala el comparador Rastreator.
El precio medio de un seguro completo para los más jóvenes es el más bajo, siendo los de 18 a 24 años los que pagan una media de 35 euros mensuales seguido de los de 25 a 34 años, con una media de 47 euros al mes, los de 35 a 44 años, cuyo precio asciende a 64 euros al mes, los de 45 a 54 años, con un coste de 78 euros mensuales, los de 55 a 64 años, pagando 96 euros al mes y, por último, a los que les supondrá un mayor desembolso, como hemos dicho, los mayores de 65 años, con una cuota media mensual de 145 euros al mes, teniendo que pagar un 122% más que los jóvenes.
"Aun así, debido al aumento de la esperanza de vida y al envejecimiento de la población en España, cada vez es más frecuente que las aseguradoras ofrezcan productos específicos para este sector de la población, haciendo que sea algo más sencillo para los más mayores poder contratar un seguro de salud," concluye al respecto Rastreator.
Precios desorbitados e incertidumbre
“A partir de los 65 años, el precio de contratación de un mismo seguro médico puede subir entre un 10% a un 40% dependiendo de la compañía”, aseguran a 65YMÁS fuentes del comparador Selectra. Se refieren a precios de contratación, más elevados a mayor edad, por el mayor riesgo. El problema es que las renovaciones también suben exponencialmente a los mayores.
“Un seguro de salud es anual prorrogable. Y cuando termina el año automáticamente se prorroga por otro, y así sucesivamente”, explica Joaquín Martínez-Aedo, abogado de Legalitas (@Legalitas_ES), especializado en seguros. “La compañía te puede subir la prima lo que quiera, si te avisa dos meses antes”.
“Las primas futuras son desconocidas y las aseguradoras pueden determinarla libremente en cada renovación”, denuncian desde la Organización de Consumidores y Usuarios, OCU (@consumidores). Es imposible saber cuánto subirá la póliza en el futuro. “No tenemos información sobre las primas a años futuros ya que las primas tienen subidas en función de IPS sanitario (los costes sanitarios) y la siniestralidad de la póliza o del sector”. También por la edad, nos explican desde Rastreator.
Los mayores, amenazados por el Gobierno
Pese a que en el último momento se cayó de las medidas incluidas en la reforma fiscal que acaba de aprobar el Congreso, el Gobierno pretendía retirar una bonificación para los seguros privados de salud, a los que se les empezaría a aplicar el Impuesto sobre Primas de Seguro (IPS), situado en el 8%. Un hachazo que, de haber salido adelante, sufrirían principalmente los mayores. El impuesto lo pagarían todos los asegurados, pero sobre todo los mayores de 65 años, que son quienes más pagan por su póliza de salud, hasta tres veces más. Y este impuesto grava la prima, lo que cada cliente paga cada mes o cada año, y no la póliza en sí misma o su contratación.
La coalición de gobierno PSOE-Sumar proponía “eliminar la exención a las primas de seguros privados sanitarios que tiene un claro sesgo regresivo beneficiando fundamentalmente a las personas y familias de renta alta”. Finalmente, la propuesta caía en el ultimo momento de la negociación. Los diputados rechazaban la medida, que quedaba fuera del paquete fiscal tras una agónica negociación para que viera la luz la reforma fiscal. "Si esta medida se llevase a cabo se dispararían las primas de los clientes pudiendo subir más de un 20% el recibo al año, haciendo que muchos asegurados o empresas opten de nuevo por prescindir o reducir sus coberturas para evitar dicha subida, afectando al sector y a la sanidad negativamente”, dicen desde el comparador Rastreator.
Pero ni a los mayores, ni al sector asegurador, ni a todos los asegurados que penalizaría esta medida se les escapa que castigar los seguros de salud es una medida por la que apuesta Sumar y que podría volver a retomar más adelante. Si ha decaído es por los vetos cruzados di los diferentes grupos parlamentarios. Uno de los que más claros y contundentes ha sido es el PNV. Su grupo parlamentario, bajo ningún concepto, apoyaría un rejonazo al seguro privado. Hay que tener en cuenta el peso que tienen este tipo de pólizas en el País Vasco y la importancia en Euskadi de IMQ y Lagun Aro.
¿Cuántos mayores sufrirán subidas en sus primas?
En los últimos años, cada vez son más los españoles que cuentan con una póliza de salud. En concreto, “12,4 millones de personas con seguro de salud en España” asegura Mirenchu del Valle, presidenta de la patronal del sector asegurador, Unespa (@UNESPA). Pero, de estos más de 14 millones de personas con póliza de salud, ¿cuántos de ellos son mayores?. “Son personas de todas la edades, los hay jóvenes, de mediana edad y, sí, también hay muchos mayores asegurados. Para ser exactos, 2,3 millones de asegurados tienen más de 60 años”, añade Mirenchu del Valle. Y según los datos de la Memoria Social del Seguro 2023 de Unespa, son casi un millón (909.820), los mayores de 65 años que cuentan con seguro privado de salud.
Que las subidas de las primas afectará en mayor medida a los mayores, no es solo porque son ellos, los sénior, quienes más importe pagan por su seguro de salud, sino porque los mayores son los que más seguros tienen. 4,8 millones de mayores de 65 años tienen una póliza de autos; 5,67 millones han decidido cubrir su sepelio a través de un seguro de decesos; y 778.586 mayores de 65 cuentan con un seguro de vida. Los sénior con algún seguro contratado asciende al 93%. Como media, tienen contratados 2,55 seguros distintos, siendo los más comunes los relativos a hogar, vehículos y decesos. Son datos del IV Barómetro del Consumidor Sénior elaborado por el Centro de Investigación Ageingnomics de la Fundación Mapfre.
Más de 12 millones de personas, no solo de rentas altas
“Se trata de un sector con una especial incidencia sobre el bienestar de los consumidores, al afectar a un aspecto tan relevante como la prestación de servicios sanitarios y el tratamiento de enfermedades”, según la propia Comisión Nacional del Mercado de la Competencia, CNMC, con “una gran implantación entre la población española y notable relevancia económica”.
Según los datos de la patronal Unespa, en España hay 12,4 millones de personas con una póliza de salud, que se enfrentan a una fuerte subida de la prima por parte de su aseguradora y que, por el momento, se libran de una subida añadida y generalizada del 8%, que tendrían que hacer frente si hubiera prosperado el castigo a este ramo del seguro.
Unespa niega que se trate de un seguro ‘para ricos’. El organismo presidido por Mirenchu del Valle afirma que el seguro de salud se contrata “por personas de todos los niveles de renta. Al cierre de 2023, el seguro privado de salud contaba con 12,4 millones de asegurados distribuidos por toda España. Es decir, uno de cada cuatro ciudadanos decide voluntariamente contratar esta protección. Se trata de personas de muy diversos perfiles socioeconómicos que no consumen servicios sanitarios públicos o lo hacen de una manera mucho más reducida”, destaca la patronal en un comunicado.
Los seguros de salud, disparados
La contratación de los seguros privados de salud se ha disparado en los últimos años por diversos factores. En primer lugar, la pandemia impulso el sector privado ante una mayor concienciación por parte de la población de la importancia de la sanidad. En seguro lugar, por la situación de colapso y largas listas de espera en la sanidad pública. Además, también han impulsado las pólizas de salud los seguros de empresa o la comercialización del pólizas baratas, los llamados ‘seguros low cost’. “Ya uno de cada cuatro españoles tiene seguro médico privado, el sector ha crecido un 38% en 10 años”, asegura Gonzalo Martín-Vivaldi, director de operaciones y socio de la consultora EMO Insights, que elabora el estudio ‘Emociones en Seguros de Salud’.
El año pasado, los seguros de salud facturaron 11.338 millones de euros por primas, un 7,2% más. Unas cifras que, este año, siguen disparadas. Según los datos de la patronal del sector, Unespa (@UNESPA) y de ICEA, el servicio de análisis de la industria aseguradora en España (@icea_es), entre enero y septiembre las aseguradoras facturaron 9.108 millones de euros por primas de salud, lo que supone un crecimiento del 7,72%.
Presión para la sanidad pública
Como telón de fondo de estas cifras, la guerra que parece haber declarado el Gobierno al sector de los seguros de salud. Por un lado, con su intención -frustrada ya- de subir la carga impositiva de las pólizas sanitarias; y por otro con la crisis de Muface, y el mensaje lanzado por el Ministerio de Sanidad, cuya apuesta es acabar con este modelo y pasar los mutualistas a la sanidad pública.
Desde la Fundación IDIS, Instituto ara el Desarrollo e Integración de la Sanidad, nos explican que “el sector sanitario privado representa un elevado peso en el sector productivo español y es clave para la sostenibilidad y viabilidad del sistema sanitario”. Los doce millones de ciudadanos con seguro privado de salud permiten ahorrar entre 6.000 y 16.000 millones de euros al año al sistema Nacional de Salud (SNS) según el uso que hagan de su seguro, es decir, si consume recursos públicos y recursos privados, lo que se denomina uso mixto; o si utiliza exclusivamente el sistema privado. La patronal de la sanidad privada defiende ser “un agente clave dentro del Sistema Nacional de Salud porque complementa al sector público y establece sinergias con él”. Para la directora general de la Fundación IDIS, Marta Villanueva, la sanidad privada es una actividad complementaria para quien así lo desee, que crea “beneficios para los pacientes y sus familias”.
Castigar a los seguros privados, ya sea endureciendo la fiscalidad de las pólizas privadas de salud o eliminando Muface, no haría sino introducir más presión sobre el Sistema Nacional de Salud. Por eso, ambas ideas han caído como un jarro de agua fría sobre los sectores afectados, tanto el asegurador como el de la sanidad privada. En opinión de la patronal Unespa, castigar los seguros privados de salud “provocaría una caída en el número de personas que contratan este tipo de seguros y, por tanto, un incremento de la demanda asistencial del Servicio Público de Salud”.
Sobre el autor:
Beatriz Torija
Beatriz Torija es periodista y documentalista, especializada en información económica. Lleva 20 años contando la actualidad de la economía y los mercados financieros a través de la radio, la televisión y la prensa escrita. Además, cocina y fotografía.