La Ley de Familias, promovida por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 –que dirige Ione Belarra–, incluiría, según han publicado varios medios de comunicación, un permiso de hasta cinco días laborables al año para trabajadores que cuiden de sus familiares hasta segundo grado –padres, parejas, hermanos, abuelos– y convivientes. Hasta ahora, existía la posibilidad de pedir dos días por enfermedad grave o accidente de un pariente hasta segundo grado, añaden.
Esta medida se incluía dentro de una nueva Ley que se iba a aprobar este martes en Consejo de Ministros, con el objetivo de facilitar la conciliación y de velar por una corresponsabilidad de los cuidados entre hombres y mujeres. Sin embargo, según han afirmado desde el ala morada del Gobierno, el Ejecutivo habría decidido retrasar la tramitación de la misma.
Con todo, cabe recordar que la aprobación de este permiso responde a la transposición de uno de los puntos de la Directiva europea relativa a la conciliación de la vida familiar y la vida profesional de los progenitores y los cuidadores (2019), creada para hacer frente al "aumento constante de las necesidades en el cuidado de familiares debido al envejecimiento de la población y, por tanto, al consiguiente aumento de la prevalencia de las deficiencias relacionadas con la edad". La Directiva permite asimismo "decidir –a los Estados– que pueda tomarse en períodos de uno o varios días laborables".
Cabe reseñar que, en junio de 2022, el Ministerio de Trabajo y Economía Social ya puso sobre la mesa esta medida en una consulta pública previa a la elaboración de un anteproyecto de Ley, mediante el cual se pretendía transponer el texto de la Unión Europea.
Anteriormente, en febrero, la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, llegó a proponer que, en vez de cinco días, fuesen siete o nueve –para personas que vivan en otra CCAA–. Unos permisos que debían servir, dijo por aquel entonces, para "quedarse en casa cuidando a los hijos cuando han pasado una mala noche vomitando o con fiebre, pedir el día para llevar al médico a tus padres o estar con tu pareja si está enferma". Este diario se ha puesto en contacto con ambos ministerios para conocer más sobre este punto de la nueva Ley, pero no ha recibido una respuesta. Por tanto, habrá que esperar al Consejo de Ministros en el que se acabe aprobando –cuando se vuelva a llevar– para conocer todos los detalles y matices.
No soluciona el problema de la conciliación
Ahora bien, lo que parece claro, según afirman las agrupaciones de familiares consultadas por 65YMÁS, es que, en base a lo que se ha sabido hasta ahora, este permiso sería sólo un "parche" e insuficiente para muchos familiares que tengan que hacerse cargo, por ejemplo, de varias personas dependientes sin el apoyo suficiente por parte de la administración autonómica y municipal –acompañamiento, horas necesarias de ayuda a domicilio, etc.–.
"Llegamos tarde" en la aplicación de la Directiva europea, señala la fundadora del Club Malasmadres (@malasmadres) y de la asociación Yo no renuncio, Laura Baena (@LauraBaenaFdez), quien además critica que no se haya querido ir más allá de lo que estipula la legislación comunitaria, como propuso en un primer momento la ministra Belarra.
"A la conciliación le cuesta abrirse paso desde un planteamiento más transversal que toque las estructuras y cambie el sistema. No se está hablando de cómo se va a revisar el modelo laboral, que es lo importante. Realmente, debemos trabajar por un cambio de modelo en el cual exista flexibilidad, se pueda trabajar por objetivos y, cuando un hijo o hija enferme, sea posible teletrabajar o adoptar alguna medida que no nos lleve a pedir un día sin sueldo o de vacaciones o, incluso, a abandonar el empleo, como ocurrió en la pandemia", pide Baena.
"Es positivo que la conciliación esté en el debate y en medidas incluidas en la Ley de Familias, pero quedan muchos retos y, más que medidas concretas, tipo parche, necesitamos un Plan Nacional de Conciliación en el que entren en juego, no sólo permisos, sino también la revisión del modelo laboral, la flexibilidad de los horarios y la corresponsabilidad. Esta última debe implicar no sólo al Gobierno, sino a empresas, a familias y a Educación. Nos queda mucho. La conciliación no se soluciona con un permiso de cinco días por cuidado. Y eso, lo saben también en el Gobierno. Por eso, desde la asociación Yo no renuncio estamos trabajando, en paralelo, en la mesa de cuidados del Ministerio de Igualdad y en una Ley de Gestión del Tiempo con el Ministerio de Trabajo", puntualiza.
"Aun así, lo que nos falta es que la conciliación entre de manera transversal en todas estas leyes, para que no nos quedemos en unos permisos mínimos, determinados por la Unión Europea, muy poco ambiciosos. Necesitamos un mayor compromiso político para que haya unos presupuestos que impacten en el día a día de las familias. Así, poco se va a solucionar, pero seguimos; y es importante que la conciliación entre en el debate", afirma.
"Los mayores necesitan cuidados los 365 días del año, no cinco"
Y en el caso concreto de los familiares de personas mayores con dependencia, el permiso por sí sólo tampoco soluciona todos sus problemas, argumentan las familias, puesto que no se han corregido previamente otras deficiencias estructurales –las listas de espera siguen existiendo, las horas de Ayuda a Domicilio que se prestan a la semana muchas veces son insuficientes, los programas de acompañamiento no llegan a todos los mayores que lo necesitan, etc.–. Unas carencias, que provocan que muchas personas, sobre todo mujeres, acaben perdiendo vacaciones o incluso dejando su trabajo para dedicarse al cuidado de sus padres o madres,recibiendo, además, una compensación económica escasa.
Por esta razón, Carmen Martín, miembro de la Marea de Residencias (@MareaResidencia), opina que la medida se queda corta y que debería acompañarse, en paralelo, de más ayudas y de un mejor sistema profesionalizado de atención al dependiente. Cabe recordar que la mayoría de familiares que forman parte de su asociación dedican muchas horas a la semana al cuidado, en ciertas ocasiones, por culpa de las deficiencias del sistema –control del servicio dado, acompañamiento al médico, etc.–. Por ello, llevan años reivindicando un sistema de Dependencia con más recursos y de calidad que, según han denunciado a este diario en repetidas ocasiones, no termina de llegar.
"Ahora, les preocupa la conciliación. Necesitan cuidados los 365 días del año, no cinco", apunta. "Lo que tiene que haber son unos servicios públicos que den a estas personas lo que necesiten, facilitando que los familiares puedan estar siempre cerca. Además, por otro lado, estos permisos los cogerán las hijas, que generalmente son las que se hacen cargo de los cuidados, porque, lamentablemente, no hay un reparto de tareas equitativo", critica.
Finalmente, para la Confederación Nacional de Jubilados y Pensionistas de España (@Conjupes_), "esta reforma es sólo un parche". "Los cuidadores necesitan más días. Creo que con esta Ley no será suficiente. Se necesita trabajar bastante más", apunta su presidenta, Adela Cabezas.
Corresponsabilizar a toda la sociedad
Eso sí, no todos se muestran disgustados con este permiso."La reforma nos parece un paso adelante importante. Va en la línea de concienciar a toda la sociedad de que las políticas de cuidados son cada vez más necesarias. Son un asunto que trascienden el ámbito familiar y deben ser asumidas por la sociedad en su conjunto –empresas, instituciones, familias...–", indica el presidente de la plataforma de familiares de usuarios de residencias Pladigmare (@pladigmare), Miguel Vázquez.
"Nos parece un avance, aún con sus insuficiencias. Se necesitará profundizar más en los cuidados de larga duración –estoy pensando en las residencias–, para abordar las necesidades de personal en los centros residenciales dada la insuficiente ratio establecida en el Acuerdo de Acreditación actual", añade.
"Es como si yo te invito a cenar, pero digo que pagues tú"
Por último, cabe recordar que la patronal no se ha mostrado del todo a favor del permiso, pero por motivos muy distintos a los expuestos por el resto de entrevistados. En una intervención en TVE, el presidente de la CEOE (@CEOE_ES), Antonio Garamendi, ha pedido una compensación para las empresas por estos días, aunque también ha asegurado estar a favor de la conciliación. "Es como si yo te invito a cenar, pero digo que pagues tú", ha comparado.
Sobre el autor:
Pablo Recio
Pablo Recio es periodista especializado en salud y dependencia, es graduado en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid y comenzó su carrera profesional en el diario El Mundo cubriendo información cultural y económica.
Además, fue cofundador de la radio online Irradiando y cuenta con un máster en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid y otro en Periodismo por el CEU San Pablo/Unidad Editorial.