La pandemia hizo saltar en 2020 las costuras del sistema de residencias de mayores y puso de manifiesto las carencias de un modelo mayoritariamente masificado y con servicios poco individualizados.
A raíz de esta situación, tras la primera ola, que se llevó la vida de 20.000 usuarios, la Vicepresidencia de Derechos Sociales y Agenda 2030 impulsó una nueva partida presupuestaria para acabar con la lista de espera de la Dependencia y para modificar el sistema de cuidados, dotando de más recursos a la Ayuda a Domicilio, fomentando la teleasistencia, reduciendo el tamaño de los centros sociosanitarios, ampliando las ratios de personal, exigiendo más formación y premiando los servicios de calidad.
Y para lograr este ambicioso objetivo, las comunidades autónomas –que son las que gestionan los servicios sociales– fueron las encargadas de conseguir que estos fondos, parte de los cuales vienen de la Unión Europea, sirvan para mejorar las prestaciones que ofrece el sistema de Dependencia.
Sin embargo, por ahora, la mayoría de CCAA trabajan en el medio plazo, aunque algunas autonomías van más avanzadas que otras y han anunciado que cuentan con centros piloto oliving labs(Galicia, Madrid, Asturias y País Vasco),y otras, los tendrán pronto o han comenzado a otorgar subvenciones para la modernización de las residencias.
65Ymás ha recopilado en este artículo los proyectos más reseñables en los que trabajan las diferentes regiones del país –ordenadas alfabéticamente– o las líneas generales en las que se basarán sus planes, según lo que se ha dado a conocer hasta ahora.
Andalucía
Andalucía pretende gastar los fondos de la UE para que los centros sociosanitarios trabajen bajo el paradigma de la autonomía personal y fomentará asimismo los proyectos de convivencia intergeneracional.
Así lo reconocía en verano de 2021 la consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, que ponía como referencia el nuevo complejo de servicios sociales de El Cobre, en Algeciras (Cádiz) –inversión de 24 millones de euros– que dará cabida a diferentes recursos asistenciales de última generación y tendrá una capacidad para 250 personas mayores, personas con discapacidad y jóvenes.
Además, desde la Junta fomentarán que convivan mayores con estudiantes y crearán centros de cuidados intermedios para personalizar la atención.
En total, en verano de 2021 tenían ya 39 proyectos aprobados, dirigidos a "humanizar los servicios sociales".
Aragón
Aragón pretende, entre otros proyectos, transformar los centros en su interior y destinará 12 millones de euros para reformar varias residencias públicas y compartimentarlas en distintos módulos más pequeños, inspirados en el modelo nórdico de atención especializada.
Y el cambio no sólo se limitará a los centros gestionados por la autonomía, también darán subvenciones para la modernización y creación de centros de día y residencias con plazas concertadas, en total, unos 11 millones de euros.
Asturias
Asturias basará su nuevo modelo de residencias en los siguientes pilares: la salud, la Atención Centrada en la Persona, el "entorno que facilite", las relaciones sociales, la vida en comunidad y la seguridad.
Y eso conllevará que los centros cuenten con unidades más pequeñas y se aumenten las ratios y la formación.
Para lograrlo, trabaja con el modelo de centros pilotos que irán marcando el camino para que el sistema se vaya implementando progresivamente. Uno de ellos es la residencia de Arriondas.
En la elaboración del plan han participado asociaciones de mayores, sindicatos, empresas y la administración.
Islas Baleares
En Baleares, los fondos se destinarán para la construcción de más de 400 plazas residenciales y un centro de día.
Por otro lado, otra parte del dinero se dedicará para reformar centros antiguos, lo que añadirá otras 264 camas más.
Además, se dotará de más recursos a la teleasistencia, la ayuda a domicilio y a la mejora de la accesibilidad. En total, serán más de 60 millones de euros para estos fines.
Canarias
Una parte de los fondos europeos se destinarán en Canarias, a parte de para modificar el modelo de residencias, a alternativas a las residencias como las viviendas compartidas o los proyectos intergeneracionales.
Además, fomentarán, a través del plan 'Canarias te cuida', que los mayores puedan quedarse en sus domicilios mediante el uso de la domótica y la teleasistencia.
Cantabria
En Cantabria, las unidades de convivencia no serán de más de 30 personas, huyendo de los centros masificados.
Así, deberán ser espacios con privacidad, pero también con espacios comunes que tengan ambientes familiares.
Por ello, los edificios no podrán superar la capacidad de 120 personas.
Por otra parte, se implementará un sistema de calidad nuevo en la que se premiará la atención integral y se cambiará la forma en la que se calculan las ratios de personal.
Y para lograr esta reconversión, se destinarán 12 millones de euros.
Cabe destacar que recientemente se ha inaugurado un centro que fue presentado como precursor en este sentido en Liébana, con una capacidad para 57 personas, en un entorno natural. También contarán con la futura residencia de La Pereda en Santander dividida en unidades de convivencia y con un jardín terapéutico.
Castilla-La Mancha
7,9 millones es la cantidad que el Gobierno de Castilla-La Mancha destinará para la modernización de centros de atención a mayores y discapacidad.
Se dará a entidades y ayuntamientos para que puedan remodelarlos, adaptarlos y equiparlos para mejorar la calidad de vida de los dependientes y el trato personalizado.
También se subvencionará la compra de aparatos tecnológicos que vayan en pro de la autonomía: domótica, tablets, teléfonos, etc.
A partir del 15 de diciembre se pueden solicitar subvenciones para esta finalidad.
Castilla y León
Castilla y León creará nuevas residencias de mayores en Ávila, Salamanca y Zamora, adaptadas al nuevo modelo, y apostará por la digitalización y la teleasistencia, como el resto de regiones. Estos centros pretenden ampliar la cobertura de plazas públicas.
Asimismo, la Junta pretendía aprobar una ley de atención residencial de larga duración y un plan para la eliminación de las sujeciones.
Además, la Junta cuenta con un programa piloto para la digitalización de las residencias que comenzó en un centro de Benavente (Zamora).
Cataluña
En Cataluña trabajan con un plan hasta 2024 para modificar la atención residencial.
En este caso, el sector privado ha ido más rápido que la administración y se ha adelantado con la apertura de un centro inspirado en el modelo nórdico en Barcelona, en el barrio de Sant Adriá de Besòs, en la que se dividen las instalaciones en unidades de convivencia.
Comunidad Valenciana
La Generalitat de la Comunidad Valenciana pretende crear hasta 7.100 plazas residenciales para reducir la lista de espera de la dependencia y prepararse para el envejecimiento progresivo de la población.
Igualmente, uno de los elementos interesantes del modelo valenciano es que quieren implementar normas antimonopolio que se han establecido para que en los concursos públicos las entidades y empresas se presenten en igualdad de condiciones para gestionar el servicio.
Y uno de los puntos claves en este sentido es que el criterio precio tenga menos importancia que antes y se fomente más la calidad.
Por ahora, trabajan con el proyecto de la residencia piloto de Sant Mateu, que se divide en espacios para 11 personas, con zonas comunes, y tendrá capacidad para más de 60 usuarios, en total. Un centro, que además será de día y que pretende ser referente del nuevo modelo.
Extremadura
Extremadura pretende crear un sistema de calificación de las residencias similar al de los hoteles en el que se dividirán entre básicos, óptimos y excelentes (todo ello teniendo en cuenta la cantidad de servicios que ofrezcan).
Asimismo, la Junta invertirá en que los mayores no ingresen en centros sociosanitarios, mediante el fomento de instituciones que den cuidados de día, y tratando de que sólo usen las residencias personas con grado de dependencia superior al dos.
Finalmente, se reforzarán el personal y los recursos sanitarios.
Modelo de nueva residencia en Galicia. Fuente: Xunta.
Galicia
Galicia ha adelantado que sus nuevas residencias deberán estar diseñadas para un máximo de 150 usuarios y dividirse en módulos o unidades de convivencia de hasta 25 personas, que serán seleccionadas por sus preferencias antes que por sus grados de dependencia.
Además, deberán contar con habitaciones "inteligentes", un consejo asesor con representantes de familiares y una "vía rápida" de acceso a las urgencias sanitarias.
De esta manera, el nuevo modelo se basará en tres pilares: coordinación sociosanitaria, atención centrada en la persona y uso de tecnologías.
Y para ello, han comenzado con un living lab –con el objetivo de estudiar cuáles son las necesidades de los mayores– en la residencia pública de A Estrada, pionera en el uso de la domótica. El proyecto se ha llevado a cabo en colaboración con la empresa Televés.
Residencia de A Estrada. Fuente: Xunta.
La Rioja
La Rioja también destinará fondos para renovar su sistema de atención residencial.
Por una parte, incrementará el número de plazas públicas un 70%.
Además, las medidas adoptadas irán orientadas a garantizar la libertad de elección del usuario y la permanencia en el entorno social y familiar, cuando el dependiente no pueda permanecer en su domicilio.
En paralelo, desde el sector privado, la Fundación "la Caixa" ha ampliado y extendido su Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas en residencias de La Rioja: Los Manitos, La Rioja y Lardero.
Comunidad de Madrid
Por su parte, Madrid invertirá 854.286.503 euros para dotar al sistema de más de 8.000 plazas.
Además de ir centrando su atención a las personas y transitar hacia el nuevo modelo, también han anunciado que pretenden incrementar 20 euros el precio por cama y la ratio de personal a 0,47.
Además, se primará la calidad –prestaciones sociosanitarias, alimentación, actividades...– en la adjudicación de contratos de gestión a las empresas, frente al criterio económico.
Por último, se penalizarán más duramente los incumplimientos por parte de las compañías con las que concierte la administración o que gestionen centros públicos.
Madrid contará con varios proyectos pilotos igualmente en las residencias públicas de Manoteras, Fray Bernardino y la de Navalcarnero, que tratarán de adoptar el nuevo modelo con unidades de 50 usuarios.
Nuevo Modelo de Residencia de Galicia. Fuente: Xunta.
Murcia
Por ahora, la Región de Murcia ha dado a conocer que destinará un 8,6% más de fondos en 2022 que en 2021 para modernizar sus políticas sociales, dentro de las cuales se encuentran los servicios a mayores y dependientes.
En concreto, cuatro millones de euros irán destinados a crear 300 plazas suplementarias en residencias y centros de día.
Navarra
Las nuevas residencias de mayores de Navarra tendrán un máximo de 130 usuarios y deberán regirse por el modelo de atención centrada en la persona.
Así pues, los centros deberán ser más participativos y dividirse en núcleos de convivencia de no más de 16 personas con zonas comunes como cocina, salones e internet.
Asimismo, las habitaciones tendrán que tener como mínimo 14 metros cuadrados y el 80% deberán ser individuales.
Por último, se fomentarán otros modelos como el cohousing.
País Vasco
En la elaboración del nuevo modelo de residencias del País Vasco han participado diferentes expertos de distintos ámbitos.
Por lo que se va sabiendo, la atención a dependientes se centrará sobre todo en los domicilios y en residencias, donde se garantizará el bienestar de la persona y la toma en consideración de sus intereses.
Cada provincia tiene un proyecto diferente para sus residencias. Por ejemplo, Vizcaya pretende que el 35% de las residencias cuenten en el medio plazo con módulos de 25 personas con cuidadores que no roten y, para ello, será necesario acometer obras en estos centros, algunas de las cuales ya han comenzado.
Por otro lado, en Álava están trabajando con residencias piloto como Lakua o Etxebidea, en el que ensayan un tipo de atención enfocada no sólo en el residente sino que tiene en cuenta a la familia y al personal.
Finalmente, Guipúzcua también está transitando hacia un modelo más centrado en las personas y dará mucha importancia al cuidado del trabajador, fomentará una relación más estrecha con las familias y dará un mayor peso a las inspecciones. Además, realizaron una serie de estudios para conocer las demandas de usuarios, familias y empleados y las conclusiones fueron que el nuevo modelo tendría que pasar por: espacios adaptables, habitaciones individuales, cuidados personalizados, enfoque comunitario, sostenibilidad y servicios integrales.
Cabe destacar que Euskadi era pionera en atención centrada en la persona antes de la pandemia y contaba con fundaciones, como Matia, que ya trabajaban con anterioridad en cómo implementar el modelo.
Sobre el autor:
Pablo Recio
Pablo Recio es periodista especializado en salud y dependencia, es graduado en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid y comenzó su carrera profesional en el diario El Mundo cubriendo información cultural y económica.
Además, fue cofundador de la radio online Irradiando y cuenta con un máster en Gobernanza y Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Madrid y otro en Periodismo por el CEU San Pablo/Unidad Editorial.