No hay dos sin tres: Los países que ya 'pinchan' la tercera dosis de la vacuna
A pesar de la moratoria solicitada por la Organización Mundial de la Salud
Ya es oficial, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, en inglés) ha autorizado que se inocule una tercera dosis de la vacuna de Pfizer o de Moderna a las personas inmunodeprimidas.
Aunque este grupo poblacional es relativamente pequeño –en él se encuentran aquellos pacientes que han sido receptores de trasplantes de órganos o a los que se diagnostica un nivel equivalente de inmunodepresión– con esta decisión las autoridades sanitarias norteamericanas parecen dar un portazo al ruego de una moratoria que había formulado la Organización Mundial de la Salud (OMS), que no apoya la tercera dosis de la vacuna porque, en su opinión, "no hay datos que lo justifiquen de momento".
La OMS pide un enfoque nuevo
"No hay datos científicos que lo justifiquen por el momento", declaró hace apenas tres semanas el el doctor Didier Houssin, presidente del Comité de Emergencia de la OMS para la COVID-19, desde Ginebra, donde se encontraba acompañado por el director general de la OMS, Tedros Ahdanom Ghebreyesus, y el ministro de Salud alemán, Jens Spahn.
De hecho, Tedros manifestó su "preocupación" por el hecho de que la pandemia "se esté caracterizando erróneamente como si estuviera llegando a su fin cuando no está ni mucho menos acabada".
Asimismo, el comité de expertos de la OMS ha pedido a todos los países que apoyen el llamamiento de la Organización para vacunar al menos al 10 % de la población de cada país para finales de septiembre de este año. "Si el mundo sigue por el mismo camino, seguirá dirigiéndose al mismo destino, que es un mundo inseguro, y otra pandemia devastadora es inevitable. Necesitamos un nuevo enfoque y una nueva forma de hacer las cosas", ha señalado Tedros.
Desoyendo estos argumentos, "después de una revisión exhaustiva de los datos disponibles, la FDA determinó que este grupo pequeño y vulnerable puede beneficiarse de una tercera dosis de las vacunas Pfizer-BioNTech o Moderna", ha declarado la comisionada interina de la FDA, Janet Woodcock que también se ha referido al "riesgo particular de contraer una enfermedad grave" que corren las personas inmundoprimidas.
Según los datos oficiales de aquel país, un 59,2% de los estadounidenses ha recibido por lo menos una dosis de la vacuna contra la covid-19 y un 50,2% la pauta completa, porcentajes que pueden calificarse de bajos en un país que cuenta desde hace meses con vacunas suficientes para toda su población pero lucha constantemente contra el escepticismo y el negacionismo antivacunas de varias minorías raciales y sectores conservadores de la población a pesar de que el país ha registrado 619.093 muertes y 36 millones de contagios según un estudio independiente llevado a cabo por la Universidad Johns Hopkins.
Ya son varios los países a favor
Pero Estados Unidos no es el único país que abre sus puertas a la tercera dosis de vacunación. Chile también lo ha hecho y China ha anunciado ya que se está planteando esta posibilidad que ya han aceptado Reino Unido e Israel, mientras que Alemania y Francia se acogen a la postura de la Comisión Europea sobre la tercera dosis, según la cual esta es una decisión que compete individualmente a cada país miembro y también han decidido añadir una dosis más para completar la pauta de vacunación.
De hecho, el gobierno alemán fue uno de los primeros ejecutivos comunitarios en declarar su intención de suministrar un tercera dosis y, en este sentido, se ha cerrado un acuerdo entre el gobierno federal y los regionales o länder por el cual muy posiblemente el próximo mes se abrirá el turno para administrar una vacuna más entre los grupos más vulnerables por su edad, por ser personas inmunodeprimidas o presentar cuadro clínico de riesgo.
Mientras tanto, el presidente francés, Emmanuel Macron, acaba de anunciar la administración de esta dosis de recuerdo y ha subrayado que "será necesaria, con toda seguridad" para después matizar que no "para todo el mundo de forma inmediata". Y es que también Francia ha decidido vacunar primero a los "más ancianos y más frágiles", según Macron.
En la misma línea, el Reino Unido ya ha anunciado que su intención es administrar esta dosis de recuerdo a 32 millones de sus ciudadanos y que comenzará a hacerlo a partir del próximo mes de septiembre con los mayores de 50 años y a las personas más vulnerables.
Por su parte, Israel ya está vacunando la dosis de refuerzo desde el pasado 1 de agosto a los mayores de 60 años. De hecho, las autoridades sanitarias de aquel país han anunciado que ya se ha inoculado la dosis adicional a 260.000 personas. Y tampoco se olvidan en Israel del resto de grupos de edad puesto que el propio primer ministro, Naftali Benet, ha pedido a la población que vuelva a vacunarse vacunarse porque “estamos en una nueva pandemia. La variante Delta es mucho más peligrosa, es una mutación del coronavirus original y se está multiplicando a un ritmo mucho más rápido. Esto supone un problema para los jóvenes, ya que, a largo plazo, algunos de ellos podrán desarrollar una 'Long Covid' cuyos efectos pueden aparecer entre dos y cuatro meses después del contagio”.
En el sur del continente americano, Chile se ha convertido en el primer país de Sudamérica en aplicar una tercera dosis de la vacuna contra la Covid-19. Una nueva inoculación con la que se busca frenar el avance en el país andino de la variante Delta que se extiende por todo el planeta. "Comenzamos la dosis de refuerzo a los adultos mayores de 86 años, y la verdad es que uno se llena de alegría y de emoción porque los adultos mayores nos dan un ejemplo vivo", ha declarado el presidente chileno, Sebastián Piñera.
España espera "evidencias científicas"
Mientras tanto, en España la ministra de Ciencia, Diana Morant, ha sido rotunda al declarar la postura del Gobierno que España sobre la posible administración de una tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus al declarar que no se administrará terceras dosis de la vacuna mientras la comunidad científica no tenga evidencias "claras" de que es necesario. "Tenemos que esperar a que esa evidencia exista para programar si es necesario esa pauta de tercera vacuna", ha recalcado la titular de Ciencia.
Morant ratificaba así lo ya anunciado por la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón, que la semana pasada apunto es preciso contar con una "mayor evidencia científica" antes de decidir “cuándo, pero sobre todo, el a quién” se le facilitará una dosis de refuerzo.
A pesar de lo anterior, la propia Diana Morant ha reconocido que "nos vamos a tener que vacunar muchas más veces", aunque eso sí, no con una tercera dosis para completar la pauta de vacunación, sino para "el año que viene, el siguiente... la Covid no nos va a abandonar, va a haber otras fases de vacunación a las que nos vamos a tener que someter, no solo en España".
