En pleno arranque del periodo estival, quien no está ya de vacaciones, cuenta los días para disfrutar de un descanso de su rutina diaria… ya sea en la playa, en la montaña, fuera de España o en la casa del pueblo.
A punto de contratar un maravilloso viaje a Vietnam para su esposa y él, Andrés Cabarcos descubría que su edad era sinónimo de restricciones en su seguro de viaje. Algunas coberturas, como las indemnizaciones en caso de accidente, les dejaban sin protección por tener más de 70 años.
Es la desagradable sorpresa con la que se ha encontrado este lector de 65YMÁS que ha querido compartir con este diario a través de una carta a la directora. Ahora, hemos hablado con él para conocer más de cerca su caso. Además, hemos analizado multitud de seguros de viaje y hemos hablado con fuentes del sector para saber si estamos ante un nuevo caso de discriminación por edad.
“Mi mujer y yo tenemos, los dos, más de 70 años, concretamente 73, pero somos muy viajeros. Tenemos una autocaravana, acabamos de volver de un viaje de un mes por Alemania. Mientras estemos bien, no vamos a parar quietos. Me siento infatigable”, nos cuenta Andrés Cabarcos. “Nos vamos a Vietnam en octubre. La verdad es que estar jubilados es una maravilla. No entiendo quien cree que se aburrirá o no tendrá nada que hacer, a mí me faltan horas en el día”.
“Reconozco que soy bastante minucioso y reviso todos los papeles de arriba abajo y leo bien la letra pequeña. Antes de contratar el viaje, me llevé toda la documentación de la agencia para revisarla, y enseguida vi esta cláusula en el seguro”, nos cuenta. Se refiera a una garantía concreta, la indemnización con causa de muerte o invalidez, causados por accidente durante el viaje. “No quedan amparadas las personas mayores de 70 años”, dice la letra pequeña de su póliza.
Andrés considera que se trata de otro caso más de discriminación hacia las personas mayores. “Entiendo que la edad sea un factor de riesgo en determinados casos, pero no en este, es una indemnización por accidente. Si se estrella un avión, no creo que tenga más riesgo de morir que el pasajero que tengo al lado por mi edad”.
“Las indemnizaciones por muerte o invalidez tras un accidente son coberturas que generalmente tienen un límite de edad, lo vemos en los seguros de vida. ¿Es discriminatorio? Pues según se mire, porque sí que tienen su lógica aseguradora. El accidente no es más probable con la edad, pero que sus consecuencias sean más graves o deriven en una invalidez, sí tienen una relación directa con la edad” explica a 65YMÁS Ángel del Amo (@angeldelamo) agente de seguros y vicepresidente del Colegio de Mediadores de Seguros de Madrid (@colmedmadrid).
“Tiene lógica aseguradora, aunque entiendo el enfado del asegurado, cuando yo tenga su edad, tampoco me gustará, pero sí que tiene lógica aseguradora”, explica del Amo. “La edad es un factor que aumenta las probabilidades que las consecuencias tras un accidente sean más graves y puedan devenir en una invalidez”.
Desde el sector insisten en la idea de que no es el riesgo de sufrir un accidente lo que aumenta con la edad, sino que las consecuencias sean más graves. De hecho, según la ‘Radiografía de los accidentes de tráfico en los desplazamientos vacacionales en España’ de Fundación Línea Directa, este tipo de accidente suele afectar más a los hombres, con un incremento de frecuencia en las franjas de edad más jóvenes, especialmente de 18 a 29 años.
Andrés Cabarcos miró varios seguros de viaje, pero reconoce que finalmente contrató el seguro con esa exclusión de edad, porque no entró otro. “El primero de los seguros establecía la exclusión a los 70 años, miramos otro seguro y, en ese caso, la exclusión era a los 65. Y ya no quise mirar más, porque de seguir, igual llegaba a exclusiones a partir de los 50”, bromea Andrés.
“Esas exclusiones existen para que un seguro de viaje resulte económico. Se puede optar por pólizas que no lo incluyen, existen, aunque su precio probablemente, sea superior” nos cuenta, por su parte Ángel del Amo.
65YMÁS ha rastrado el ramo de seguros de viaje. En efecto, un buen número de pólizas tienen esta exclusión por edad en la cobertura de indemnización en caso de accidente con resultado de muerte o invalidez. Pero también hemos encontrado seguros que no incluyen esta limitación por edad. En general, coinciden con las pólizas de aseguradoras especializadas en este ramo. “Eliminar esta exclusión por edad eleva el precio de la prima del seguro”, explica el vicepresidente del Colegio de Mediadores de Seguros de Madrid. “Las compañías especialistas tienen una mayor gama de este tipo de seguros”.
“Esta cláusula debe ser algo nuevo, porque en las dos agencias de viajes en las que he estado, cuando se lo comenté su respuesta es que era imposible, que eso nunca había existido, pero luego comprobaron delante de mí que sí, que la cláusula existía. Se quedaron con los ojos como platos”, nos cuenta Andrés Cabarcos. “O bien las agencias de viajes venden seguros de viaje sin conocer la letra pequeña, y los clientes tampoco las leen y nadie se ha dado cuenta, o es que, realmente, es algo nuevo”.
Desde el sector asegurador nos confirman que estas exclusiones no son nuevas, y lamentan que en las agencias de viajes no conozcan bien los seguros que venden, ni las alternativas. Un mediador de seguros de Bilbao lamenta “que esta persona no acudiera a una correduría de seguros, donde habría encontrado lo que buscaba. Las agencias de viajes trabajan con una o dos pólizas muy generales, que ni siquiera conocen bien”.
“Quizá es porque tengo más riesgo de caerme si voy andando, no lo sé, puede ser, pero entonces que me den la opción de tener esa cobertura, aunque sea a otro precio más elevado. Lo tomaré o lo dejaré, pero tengo la opción de elegir si quiero viajar bien cubierto”, reclamaba Andrés Cabarcos, antes de conocer que sí tenía esa opción.
“La asistencia sanitaria no tiene exclusiones ni límites de edad. Si ocurre un percance el asegurado está cubierto por su seguro de viajes. Aquí no hay diferencias por edad” nos detalla Ángel del Amo. Su recomendación como experto y profesional del sector asegurador es poner el acento y mirar muy bien este punto.
“Elegir un seguro u otro depende mucho del perfil de cada cliente. Pero, en general, cuando se va a viajar, sobre todo si es fuera de Europa, lo más importante es el gasto de asistencia sanitaria que incluya la póliza de seguros. Porque un percance de salud lo podemos sufrir cualquier y hay países donde las facturas sanitarias pueden ser elevadísimas”, detalla. “Lo que recomiendo es mirar muy bien que el capital de asistencia sanitaria sea suficiente para viajar con tranquilidad. Eso es lo principal y más importante. El resto de cosas que incluyen los seguros de viajes, como la indemnización en caso de pérdida del equipaje, o por anulación, envío de medicamentos al extranjero, o incluso esa indemnización de la que hablamos, en caso de invalidez, es secundario”, concluye.
El destino de Andrés, Vietnam, no es baladí. Según la patronal del sector asegurador, Unespa, (@UNESPA) el coste de los percances sanitarios varía en función del destino donde se producen. Y Asia es, junto con América, uno de los destinos más caros. En general, seis de cada diez siniestros en los seguros de viaje están relacionados con la enfermedad y la hospitalización. Por detrás, como segunda causa, están los accidentes.
Estos percances durante los viajes tienen un coste medio para las compañías de 434 euros, según lo que ocurra, y sobre todo, dónde, esos costes muestran grandes variaciones. “Hay ocasiones en las que una enfermedad o una hospitalización pueden resultar particularmente onerosas para los afectados. El año pasado, el seguro de asistencia en viaje llegó a atender percances de 74.000 euros en Israel, de 56.000 euros en Canadá o de 48.000 euros en Estados Unidos. Resolver un problema de salud puede salir caro, incluso si sucede en los países más cercanos”, explican desde la patronal.
Los siniestros de repatriación son muy extraordinarios. Pero cuando se produce una repatriación por enfermedad o por otras causas, su coste puede llegar a ser muy elevado. “el caso más extremo, que se dio en Islandia, este importe llegó a 150.000 euros”, explica Unespa.
Con estas cifras, la exclusión de edad en las indemnizaciones que presentan muchos seguros de viaje cobra especial relevancia. En mayo, se produjo en ataque en Afganistán. En este trágico atentado, reivindicado por el Estado Islámico, murieron seis personas que visitaban un mercado en la ciudad de Bamiyán, tres de ellas, turistas españoles. Además, fue herida de gravedad Araceli Tamayo, una turista de Bilbao, con 82 años. Araceli fue operada de urgencia en un hospital de Kabul y trasladada posteriormente en un avión medicalizado al Hospital de Basurto. Tamayo, que forma parte de la junta directiva de la Asociación de Personas Jubiladas y Pensionistas de BBK, es una gran viajera, en una excelente forma física, que suele narrar en la web de la asociación y en diferentes medios de comunicación, todos sus viajes.
El seguro de viaje de esta turista, de la compañía especializada en el ramo, IATI, ha corrido con los gastos de esa repatriación. La compañía fletó el avión medicalizado en una operación que rondó los 200.000 euros. Esta es una de las compañías especializadas en el ramo que ofrece pólizas sin el límite de edad de 65 o 70 años para las indemnización por accidente, tal y como ha comprobado 65YMÁS.
En su balance de actividad consular relativo al año pasado, el Ministerio de Asuntos Exteriores registró más de 160.000 llamadas de emergencia. La estadística de Exteriores no ofrece datos acerca de las causas de todas esas llamadas, que pueden ser por percances durante el viaje que han requerido de la asistencia sanitaria en el país de destino, pero también por emergencias por conflictos bélicos, ataques terroristas como en el caso de Araceli Tamayo; detenciones policiales, asuntos de drogas, o incluso secuestros.
El seguro que cubre incidencias durante nuestras vacaciones, tales como anulaciones, enfermedades, accidentes u hospitalizaciones, no para de crecer. Cada vez son más los españoles que contratan en vacaciones un seguro de viajes, especialmente cuando el destino se sitúa fuera de España. De hecho, la mitad de los ciudadanos que viaja fuera de España lo hace con una póliza de este tipo. Solo entre enero y abril de este año las suscripciones crecieron un 25% respecto al mismo periodo del año pasado, según revela un estudio de ARAG e IATI Seguros.
“La pandemia ha sido un gran empuje a la hora de concienciar al viajero de la necesidad de viajar con seguro”, explica Alfonso Calzado, CEO de IATI Seguros. “Esa concienciación se ha traducido en un mayor conocimiento de los seguros de viaje y en una mayor exigencia por parte del viajero”, añade Raúl Pérez, director de negocio de Asistencia en Viaje de ARAG.
Casi un 94% de españoles tendrá vacaciones este verano. Según el último informe de ObservaTur, ocho de cada diez están seguros que viajarán y para un 14% es probable. Casi la mitad de todos ellos ya tienen sus reservas hechas. Un 65% optará por un destino nacional, principalmente la costa mediterránea, Andalucía y, en tercer lugar, el Cantábrico. Para los que se decantan por un emplazamiento internacional, visitar las capitales euroeas y rutas culturales por el viejo continente son las opciones preferidas.
El turismo senior gana posiciones de cara al verano de 2024. Los mayores, tienen poder adquisitivo, buena salud, intereses culturales y más tiempo para el ocio que sus generaciones precedentes, de modo que estamos ante un colectivo que ha convertido los viajes turísticos en una de sus principales prioridades.
Según el IV Barómetro del Consumidor Senior, realizado por el Centro de Investigación Ageingnomics de Fundación MAPFRE, el 45% de los españoles mayores de 55 años reconoce que viajar está entre sus principales objetivos.
Los sénior gastan más que el resto de franjas de edad. Si el presupuesto medio por persona está en 677 euros, según ObservaTur, el gasto crece al mismo ritmo que aumenta la edad. Además, las personas más mayores (65-74 años) son visiblemente las que mayor uso han hecho de una agencia para reservar/contratar. Además, son menos previsores. Conforme avanza la edad de los viajeros, la anticipación en la reserva y contratación, disminuye.
“Los baby boomers españoles (59 a 77 años) son los que más viajan al extranjero en comparación y es que alrededor del 55% de ellos planea un viaje internacional este año. El 34% prefiere grandes cadenas y resorts como alojamiento y un 13 por ciento se plantea realizar un retiro de yoga o meditación” asegura, por su parte, el estudio de ARAG e IATI Seguros.
