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Socializar con frecuencia alarga la vida de las personas mayores
Una encuesta china muestra que la vida social activa parece ser importante para la supervivencia
Un estudio realizado publicado en el 'Journal of Epidemiology & Community Health' ha revelado que socializar con frecuencia puede alargar la vida de las personas mayores. La investigación se realizó a más de 28.000 personas con una media de edad de 89 años que participaron en una encuesta de longevidad saludable en China.
En 2017, 962 millones de personas en el mundo tenía más de 60 años, un número que se espera que se duplique para 2050. Por ello se está atendiendo más al envejecimiento "activo" o "satisfactorio", del que parece ser crucial la socialización activa, según los investigadores.
Observando desde 1998 hasta 2019
Esta encuesta comenzó a realizarse en 1998, bajo el nombre de Encuesta Longitudinal China sobre Longevidad Saludable (CLHLS), para observar si la frecuencia de las relaciones sociales podía estar relacionada con la supervivencia general entre un grupo de personas residentes en China. Pero la frecuencia comenzó a recopilarse solo a partir de 2002. El estudio se centra en cinco oleadas separadas de recopilación de datos hasta 2018-2019.
Se preguntaba a los participantes con qué frecuencia participaban en actividades sociales; también sobre factores pontecialmente influyentes, como la educación, el sexo, el estilo de vida, la mala salud, el estado civil, los ingresos o la ingesta de fruta y verdura. Y se realizó un seguimiento de la supervivencia durante una media de cinco años o hasta la muerte.
Durante los primeros cinco años, 25.406 personas dijeron no participar en ninguna actividad social; 1.379 lo hacían a veces; 603, al menos una vez al mes; 553, mínimo una vez a la semana; y 532, casi a diario. Durante todo el periodo fallecieron 21.161 (74%) -15.728 de ellos durante los primeros cinco años-.
Socializar casi todos los días se asoció a una supervivencia mayor
Generalmente, la actividad social frecuente se asoció con una supervivencia significativamente mayor. Hasta cinco años después del inicio del seguimiento, las tasas de mortalidad fueron en torno a 18,4 por cada 100 personas durante un año entre los que no socializaban; 8,8 entre los que lo hacían ocasionalmente; 8,3 entre los que lo hacían mensualmente; 7,5 entre los que socializaban semanalmente; y 7,3 entre los que lo hacían casi todos los días.
Continuaron con el seguimiento y, durante los cinco años siguientes, el patrón se repitió aunque con menos cantidad de muertes. Se puso de manifiesto un efecto umbral, ya que solo socializar casi todos los días se asoció a una supervivencia mayor, pues el tiempo transcurrido hasta la muerte disminuyó en un 204%.
El perfil de los que socializaban más
El perfil de aquellos que realizaban una mayor actividad social era el sexo masculino, ser más jóvenes, con un mayor nivel educativo, casados, que vivían en un pueblo/ciudad y/o con familiares y con buena salud real/autocalificada.
Los investigadores aseguran que, al estratificar los datos por edades, la socialización estaba más estrechamente relacionada con el incremento de la supervivencia, lo que sugiere que se deberían fomentar estrategias para promover el mantenimiento de una vida social activa.
No se saben las causas ni el porqué
Al ser un estudio observacional no pueden establecerse las causas. Además, los investigadores reconocen que no pudieron incluir posibles cambios en los comportamientos sociales o de salud a lo largo del tiempo.
Tampoco se tiene claro el porqué socializar a una edad avanzada podría prolongar la vida. Aunque se barajan algunas posibilidades como la de potenciar comportamientos saludables (más ejercicio físico y mejor dieta). Socializar también podría mitigar el impacto de los factores de estrés crónico.
"En nuestro estudio, aunque la asociación entre la frecuencia de la actividad social y la supervivencia global se atenuó tras ajustar por factores sociodemográficos, estatus socioeconómico, conductas saludables y varias morbilidades, seguía siendo estadísticamente significativa, lo que indicaba que la participación en actividades sociales per se era un predictor independiente de la supervivencia global en personas mayores", concluyen.