Alimentos ricos en antocianinas para prevenir el deterioro cognitivo

Para aquellos que todavía no las conozcan, las antocianinas son un grupo de pigmentos hidrosolubles de color rojo, azul o morado que habitan en el reino vegetal. Se clasifican dentro de los flavonoides y su función dentro de dichos alimentos es atraer a los depredadores para que consuman los frutos, dispersen sus semillas y ayuden así a reproducir la especie. Una encomiable tarea que comparte protagonismo con las propiedades nutricionales que también benefician a nuestro organismo.

Por ejemplo, las antocianinas son muy buenas para la visión, pues protegen los capilares de la retina, ayudan a paliar la vista cansada y previenen dolencias como las cataratas o el glaucoma. Asimismo, como antioxidantes que son, ayudan a reforzar el sistema cardiovascular y mantienen a raya el colesterol, la hipertensión e incluso las hemorragias nasales.

No obstante, si hay una función que consigue combatir el envejecimiento, es su impacto positivo sobre las funciones cognitivas, es decir, esos procesos mentales que te permiten llevar a cabo cualquier tarea, como la memoria, la atención, el lenguaje o la orientación, entre otras. Bajo esta premisa, ¿qué alimentos puedes incluir en tu dieta para ralentizar el deterioro cognitivo relacionado con la edad?

5 ingredientes a favor de las funciones cognitivas

Tal y como hemos visto anteriormente, todas aquellas frutas y verduras de color rojo, rosa, morado o azul incluyen antocianinas en su composición. Un listado de lo más extenso que, afortunadamente, cuenta con algunos portentos nutricionales. ¿Cuáles son?

• Granada. Esta fruta no solo aporta una gran cantidad de agua, vitaminas y minerales, también posee antocianinas y polifenoles con una acción antioxidante muy potente. Esta es la encargada de combatir el envejecimiento y, por tanto, de proteger las funciones del cerebro.

• Uva. Algunos de los beneficios comprobados de las uvas negras son el bloqueo de las inflamaciones, la mejora del flujo de la sangre al cerebro y la prevención de enfermedades degenerativas, como el Parkinson o el Alzheimer.

• Berenjena. Aunque una de sus principales funciones sea reducir el nivel de colesterol LDL en la sangre, la berenjena también protege las células cerebrales de factores externos como el paso del tiempo.

• Remolacha. Beber zumo de remolacha con asiduidad, así como el alimento en su versión original, mejora el rendimiento del cerebro, sobre todo antes de hacer ejercicio. Además, potencia el funcionamiento cognitivo, las emociones y otras funciones cerebrales.

• Arándanos. Esta fruta es buena para el cuerpo y la mente, pues está comprobado que reduce el riesgo de demencia, alivia los efectos del Alzheimer, aumenta las células cerebrales, mejora la concentración y la memoria y evita la inflamación del cerebro.