Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorEl mal aliento, halitosis, puede tener muchas causas. Pueden ser consecuencia de un problema en la boca, como una mala higiene, por consumo de tabaco, también algunos medicamentos que contribuyen a la sequedad de la boca. También puede estar causada por heridas quirúrgicas tras una cirugía bucal, por infecciones en el tracto respiratorio, las áreas crípticas de las amígdalas, la enfermedad del reflujo, etc. Y, por supuesto, por nuestra dieta, que también influye. Consumir alimentos como el café, ajo o la cebolla, así como bebidas alcohólicas pueden contribuir a un aliento desagradable.
El uso de enjuagues y dentífricos es la opción recomendada cuando se trata de un problema bucal. Y una dieta variada y saludable, rica en vitaminas nos ayudará a mantener una buena salud bucodental. Además de unos hábitos de vida saludable, hay algunos alimentos que nos pueden ayudar a mitigar la halitosis.
Por un lado, podemos acabar con las bacterias que causan el mal aliento con alimentos que contienen compuestos naturales con actividad antimicrobiana. Estas sustancias inhiben el crecimiento de los microorganismos y algunos son la canela, el tomillo, el comino, la cúrcuma o los arándanos.
La sequedad de la boca puede provocar también mal aliento, por lo que los alimentos que favorecen la producción de saliva nos pueden ayudar. Es el caso de los cítricos, la cayena y la mantequilla. Masticar chicle, mejor sin azúcar, es otra opción para producir más saliva y que nos ayude a evitar la sequedad de la boca. Aunque, si hablamos de hidratación, nada mejor que beber agua de forma regular.
El poder desodorizante de la clorofila nos puede ayudar a luchar contra la halitosis. La podemos encontrar en alimentos de potente color verde, como la menta y la hierbabuena, en verduras como los espárragos verdes, las espinacas y la lechuga, en frutas como el aguacate y en el perejil. Por ejemplo, un remedio casero consiste en realizar un enjuague bucal con una infusión de perejil y clavo.
También podemos hacer otras infusiones para beber que nos pueden ayudar a combatir la halitosis, como la hierbabuena o el té de ortiga.
En general, las frutas, las verduras y los yogures nos pueden ayudar a mitigar el mal aliento.
Muchos alimentos contribuyen a generar más fácilmente esas bacterias que luego se descomponen en sulfurados y generan mal aliento. Si tienes un problema de halitosis, es mejor evitar alimentos como el ajo, la cebolla y los quesos muy fuertes, y cualquier otro alimento que produzca sequedad en la boca. También los alimentos ricos en azufre, como la col, la coliflor, el repollo o el brócoli. El alcohol y el tabaco también pueden provocar halitosis.