Favorece al seguimiento de las directrices alimentarias más saludables
Investigadores del Departamento de Ciencias de la Nutrición de Penn State (EEUU) han llevado a cabo un estudio que señala que comer un aguacate al día puede mejorar la calidad general de la alimentación. Han descubierto que la mala calidad de la dieta es un factor de riesgo para muchas patologías prevenibles, como la diabetes de tipo 2 o enfermedades renales y cardiopatías.
La investigación ha sido publicada en la revista 'Current Developments in Nutrition' y ha sido dirigida por Kristina Petersen, profesora asociada de Ciencias de la Nutrición, y Penny Kris-Etherton, catedrática jubilada de Ciencias de la Nutrición de la Universidad Evan Pugh.
Los investigadores examinaron cómo una intervención basada en un alimento, en concreto un aguacate al día, puede repercutir en la calidad general de la dieta.
"El aguacate es un alimento denso en nutrientes, que contiene mucha fibra y otros nutrientes importantes. Queríamos ver si el consumo regular de este alimento conduciría a un aumento de la calidad", ha indicado Petersen.
El nutricionista ha explicado que investigaciones observacionales previas sugerían que los consumidores de aguacate gozan de una mejor alimentación que los no consumidores. "Desarrollamos este estudio para determinar si existe una relación causal entre el consumo de aguacate y la calidad general de la dieta", ha añadido.
Petersen ha declarado que debido a que sólo el 2% de los adultos estadounidenses son consumidores habituales, querían confirmar si la inclusión de este alimento podría aumentar significativamente el valor de la nutrición de un individuo.
Un aguacate al día durante 26 de semanas
Los investigadores entrevistaron telefónicamente a los participantes antes de comenzar el estudio. Evaluaron sus dietas utilizando el Índice de Alimentación Saludable para determinar en qué medida cumplían las Guías Alimentarias para los Estadounidenses. El cumplimiento de las directrices se utilizó como medida de la calidad general.
Se contó con 1.008 participantes divididos en dos grupos. Mientras que uno de los grupos continuó con su ingesta habitual y limitó el consumo de aguacate durante las 26 semanas del estudio, el otro incorporó un aguacate al día.
"Descubrimos que los participantes que tomaban un aguacate al día aumentaban significativamente su adherencia a las pautas dietéticas. Esto sugiere que estrategias, como comer un aguacate al día, pueden ayudar a las personas a seguir las directrices dietéticas y mejorar la calidad de sus dietas", ha asegurado Petersen.
Aunque los investigadores dijeron que no les sorprendió ver que comer aguacates a diario mejoraba la calidad de la dieta, no habían previsto cómo los participantes eran capaces de lograrlo.
Los participantes utilizaban los aguacates como sustituto de algunos alimentos más ricos en cereales refinados y sodio.
Clasificaron los aguacates como verdura y sí que observaron un aumento del consumo de verdura atribuido a la ingesta de aguacate, pero también los participantes utilizaron los aguacates para sustituir algunas opciones menos saludables, según ha comunicado Petersen.
Pautas dietéticas para reducir el riesgo de enfermedades
Tener una dieta de mala calidad aumenta sustancialmente el riesgo de padecer afecciones como cardiopatías, diabetes de tipo 2, enfermedades renales y muchas otras enfermedades prevenibles.
"Si mejoramos el cumplimiento de las pautas dietéticas, podemos ayudar a reducir el riesgo de padecer estas enfermedades crónicas y prolongar la esperanza de vida", afirma el científico.
Se han llevado a cabo estudios similares sobre el impacto de las intervenciones basadas en alimentos, incluida la relación entre los pistachos y la calidad de la dieta.
Pero aun así, Petersen asegura que se necesita más investigación para determinar qué otras estrategias basadas en alimentos pueden utilizarse para mejorar la adherencia de las personas a las directrices dietéticas.
"En estudios como éste, podemos determinar formas de mejorar la calidad de la dieta basadas en los alimentos, pero también se necesitan estrategias conductuales para ayudar a las personas a seguir las pautas dietéticas y reducir el riesgo de enfermedades crónicas", ha señalado el experto.
