Teresa Rey
Alimentación
Cómo medir el tamaño de las porciones de los alimentos con las manos
Para calcular una porción podemos usar como referencia nuestras propias manos u objetos cotidianos
La mayoría de las informaciones nutricionales se centran en los alimentos que debemos comer, pero hay otra cuestión importante para mantener una alimentación equilibrada. Se trata de saber qué cantidades de lo que ingerimos son las recomendadas para llegar a esa estabilidad a la hora de alimentarnos. Ocurre que con frecuencia tendemos a sobrecargar el plato y a pesar de que contenga productos sanos puede que la ingesta sea demasiado elevada en su conjunto. Además, la tendencia últimamente es a preparar cada vez platos más contundentes.
Nuestras manos
Al mismo tiempo debemos tener en cuenta nuestra edad, ya que las necesidades para personas mayores no son las mismas que las de un niño o adolescente, así como nuestro nivel de actividad y el tamaño corporal que tengamos.
Para saber a qué cantidad de producto equivale realmente una porción podemos usar como referencia nuestras propias manos o incluso otros objetos.
Frutas y verduras
De este modo, cuando se habla de una porción de fruta o verdura generalmente se corresponde con el peso de 80 gramos. Y lo ideal es tener cinco porciones variadas de estos productos durante el día. Así por ejemplo, de frutas pequeñas tipo kiwi, una porción equivales a dos piezas, mientras que las grandes como una manzana, bastaría con una pieza. En el caso de melones y sandías con una rodaja es suficiente, y las frutas del boque o bayas se corresponden con un puñado.
En cuanto a las hojas que añadimos a las ensaladas son necesarios dos puños, y en tubérculos o zanahorias lo que abarque solo uno.
Proteínas y otros artículos
Para las proteínas, partiendo como referencia siempre la mano, una porción es en caso de la carne o el pescado lo que quepa en la palma o la medida de una baraja de cartas. En cuanto a los huevos, serían dos medianos, y en las legumbres habría que hablar de un puñado de las mismas.
En los lácteos estamos hablando de un vaso de 200 ml y un yogur de 125 ml. Mientras que con el queso hay que tomar como medida lo que ocupe el dedo índice o seis dados.
La pasta supone un puñado al igual que los cereales o las nueces y los frutos secos, y en el caso del pan una única porción es lo mismo que tomar una rebanada. En lo relativo al aceite es el dedo pulgar el que nos ha de servir de unidad de medida.
Para los más golosos, es bueno saber que media taza de helado es lo mismo que una pelota de tenis, y que esto es lo que supone una porción.
Con este método ya sabremos qué cantidades de cada alimento deberá tener nuestro menú diario en función de las porciones que necesitemos de cada uno.