Paula Buedo
Alimentación
¿Cuántos huevos se deben comer a la semana?
Paula Buedo
Sábado 14 de enero de 2023
ACTUALIZADO : Sábado 14 de enero de 2023 a las 11:03 H
5 minutos
Beneficios y problemas asociados a este alimento
El huevo es uno de los productos más habituales de nuestra dieta. Revueltos, cocidos, fritos o en tortilla, constituye uno de los alimentos que más utilizamos en el recetario español e internacional, lo que hace que sea un imprescindible en la cesta de la compra. Tal es así que cuenta con su propio día mundial, el 24 de octubre.
Sin embargo, no está exento de ser el centro de mitos y leyendas sobre su consumo. Por este motivo, no es extraño que nos preguntemos cuántas unidades de huevo podemos tomar a la semana para llevar una alimentación saludable y equilibrada.
No obstante, no hay una respuesta firme y unívoca a esta pregunta: depende. Hay muchos factores a tener en cuenta a la hora de fijar cantidades óptimas de consumo de cualquier alimento y el huevo no es una excepción. Por tanto, la duda sigue abierta y no es sencilla la solución. ¿Uno al día es demasiado? ¿Afecta al colesterol? ¿Aumenta el riesgo de padecer diabetes?
Durante muchos años, sus propiedades y beneficios nutricionales fueron cuestionados. Se ha creído que el huevo era un alimento que, si se consumía regularmente, podía disparar los niveles de colesterol y aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, recientes estudios desmienten este mito y lo reivindican como un gran alimento.
La cantidad de huevos que se pueden ingerir semanalmente depende, entre otras cosas, de la actividad física de cada persona y de la composición de la dieta en general. Debemos atender a la proporción de nutrientes más que al producto en sí.
Los ovoproductos son fuente de proteínas. Por eso, su consumo debe enfocarse a garantizar la incorporación de este macronutriente tan necesario para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Así, las personas deportistas probablemente puedan añadir más unidades a su menú semanal, pues requieren una ingesta proteica superior. Un estudio publicado en la revista Nutrición Hospitalaria ha comprobado que, para personas físicamente activas, el huevo es un producto seguro y especialmente recomendable.
De manera similar, aquellas personas que no incorporen otros alimentos ricos en proteínas, como la carne, o la incorporen en menor medida, podrán aumentar el número de huevos que comen cada semana con vistas a suplir esa carencia nutritiva.
En general, parece que el consumo de un huevo diario no es peligroso para la salud cardiovascular, como ha demostrado una investigación de la Escuela de Salud Pública de Harvard, sino todo lo contrario. Algunos expertos han observado que la ingesta de huevos contribuye a bajar el colesterol plasmático, así como el nivel de insulina en sangre, con lo que se reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y diabetes de tipo 2.
No obstante, la cantidad recomendada puede reducirse por consejo médico según las características y circunstancias personales de cada uno. Además, algunas de las precauciones que se deben tener en cuenta en la incorporación de huevos a nuestros platos son, por ejemplo, la posibilidad de manifestar una alergia a la albúmina, una proteína que se encuentra en los ovoproductos.
Propiedades nutricionales del huevo
Los huevos son una forma rica y eficiente de incorporar proteínas y vitaminas a la dieta. Un huevo grande contiene unos 6 gramos de proteína, concentrados en su mayoría en la clara, y tan solo unas 78 calorías por cada unidad, aunque esto depende del tipo de preparación que se escoja. También son una buena fuente de otros nutrientes, como la vitamina D.
El principal mineral que aporta el huevo a nuestra dieta es el hierro. Este se encuentra mayormente en la yema y depende, en gran medida, del tipo de alimentación que hayan tenido las gallinas ponedoras. Otros minerales presentes en el huevo son, por ejemplo, el fósforo, el magnesio y el potasio.
Es un alimento bastante saciante que aporta energía de forma rápida y sencilla, pero necesita ser combinado con otros productos para completar el cuadro de nutrientes necesarios para una dieta equilibrada. Esto significa que el límite al consumo de huevos lo pone el contexto alimentario de cada persona y no una regla fija y válida universalmente. Se pueden consumir con cierta libertad siempre que no desplacen ni eliminen a otros alimentos igualmente necesarios para nuestro organismo.