Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorEn ocasiones, cuando queremos cuidar nuestra alimentación, descartamos ciertos alimentos de nuestra dieta y optamos por otros porque pensamos que son más saludables o que nos aportan menos calorías. Sin embargo, que un alimento sea natural o lleve la etiqueta de light, no significa que sea bueno para la salud o un alimento saludable. Aquí te dejamos una lista de alimentos que no son tan buenos como piensas.
Cuando decidimos tomar un zumo de frutas natural, estamos descartando una buena parte de los nutrientes que contienen e ingiriendo más azúcar de la recomendada. Por ejemplo, una naranja contiene varios gramos de fructosa. Si para prepararnos un vaso de zumo empleamos al menos tres piezas, estamos ingiriendo todo el azúcar que contienen peor estamos desechando la fibra, que nos ayuda a metabolizar esos azúcares, por ejemplo. Por eso es recomendable consumir la fruta entera y no en forma de zumo.
A veces, optamos por cambiar la mantequilla por la margarina, pensando que al ser de origen vegetal es mucha mejor opción. Pero las grasas trans se producen cuando el aceite líquido se transforma en una grasa sólida mediante la adición de hidrógenos, lo que no las hace nada buenas para la salud porque hacen aumentar el colesterol. Y estas grasas se encuentran en la margarina, la bollería industrial, las patatas fritas, etc. Así que es mejor tomar mantequilla en lugar de margarina, aunque es mejor no abusar de ella.
Normalmente, los alimentos light son sin grasa. Sin embargo, para que su sabor siga siendo atractivo a nuestro paladar, se le añaden más azúcares. Por tanto, si lo que buscas es bajar de peso consumiendo productos light, no lo vas a conseguir.
Ya sea por la cantidad de grasas, de harinas refinadas o de edulcorantes, no son todo lo saludables que pensamos. Tienen mejor fama que la bollería industrial, pero no se diferencian mucho. Hay que fijarse en la lista de ingredientes y mirar bien las cantidades de azúcares, edulcorantes, siropes y grasas.
Sin duda, los frutos secos son un gran alimento para incluir en nuestra dieta. Pero cuidado, porque muchas veces los encontramos procesados o fritos. Si los vamos a consumir, que no estén fritos; mejor consumirlos naturales o tostados.
En resumen, muchos de los alimentos en exceso pueden ser perjudiciales. Lo mejor es seguir una dieta sana y unos hábitos de vida saludables.