Un estudio revela posibles riesgos inflamatorios provocados por las dietas de zumos

El consumo de frutas y verduras es esencial en una dieta equilibrada, principalmente por su bajo índice glucémico y sus múltiples beneficios para la salud. Estos incluyen la mejora de la sensibilidad a la insulina y la promoción de la salud intestinal. En los últimos años, han ganado popularidad los programas de "limpieza" o "detox" basados en extractos de frutas y verduras. Según datos, hasta un 26% de los consumidores han adoptado estas dietas, atraídos por beneficios percibidos como la desintoxicación, pérdida de peso y mejor digestión.

Sin embargo, el proceso de extracción de zumos puede alterar las propiedades saludables de las frutas y verduras, especialmente en lo que respecta al contenido de fibra. Investigadores de la Universidad Northwestern han investigado si las dietas basadas exclusivamente en zumos son realmente saludables. Su estudio, publicado en Nutrients, revela que una dieta de zumos, incluso durante solo tres días, puede provocar cambios en las bacterias intestinales y bucales asociados con la inflamación y el deterioro cognitivo.

Resultados del estudio

El estudio analizó tres grupos de adultos sanos: uno que consumió solo zumos, otro que combinó zumos con alimentos integrales, y un tercero que comió únicamente alimentos vegetales integrales. Se recolectaron muestras de saliva, hisopados bucales y heces antes, durante y después de las dietas para evaluar los cambios bacterianos mediante técnicas de secuenciación genética.

Los resultados mostraron que el grupo que solo consumió zumos experimentó un aumento significativo de bacterias vinculadas con la inflamación y la permeabilidad intestinal. Por otro lado, el grupo que consumió alimentos vegetales integrales mostró cambios microbianos más favorables. Aquellos que combinaron zumos con alimentos integrales presentaron algunos cambios bacterianos, pero menos severos que el grupo de solo zumos.

Estos hallazgos sugieren que el consumo de zumos sin fibra puede alterar el microbioma, lo que podría tener consecuencias para la salud a largo plazo. La doctora Melinda Ring, directora del Centro Osher de Salud Integral de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern, afirma que "la mayoría de las personas piensan que hacer zumos es una forma saludable de limpiarse, pero este estudio nos pone al día con la realidad. Consumir grandes cantidades de zumo con poca fibra puede provocar desequilibrios en el microbioma que podrían tener consecuencias negativas, como inflamación y reducción de la salud intestinal".

El papel de la fibra en el microbioma

Los zumos eliminan gran parte de la fibra presente en las frutas y verduras enteras, la cual es crucial para alimentar a las bacterias beneficiosas que producen compuestos antiinflamatorios como el butirato. Sin fibra, las bacterias que prosperan con el azúcar pueden multiplicarse. El alto contenido de azúcar en los zumos alimenta aún más a estas bacterias dañinas, alterando el microbioma intestinal y oral.

El estudio también sugiere que una ingesta reducida de fibra puede afectar el metabolismo, la inmunidad e incluso la salud mental. A diferencia de la microbiota intestinal, que se mantuvo relativamente estable, el microbioma oral mostró cambios drásticos durante la dieta basada únicamente en zumos. Se observó una reducción en las bacterias beneficiosas "Firmicutes" y un aumento en las "Proteobacteria", un grupo bacteriano asociado con la inflamación.

La doctora Ring enfatiza: "esto pone de relieve la rapidez con la que las decisiones alimentarias pueden influir en las poblaciones bacterianas relacionadas con la salud. El microbioma oral parece ser un barómetro rápido del impacto de la dieta". Así, recomienda priorizar la fibra en las pautas dietéticas y la producción de alimentos. "La composición nutricional de las dietas a base de zumos –específicamente sus niveles de azúcar y carbohidratos– juega un papel clave en la conformación de la dinámica microbiana tanto en el intestino como en la cavidad oral y debe considerarse cuidadosamente", concluye, sugiriendo que "si te encanta hacer zumos, considera la posibilidad de licuar en lugar de hacerlo para mantener la fibra intacta, o combina los zumos con alimentos integrales para equilibrar el impacto en tu microbioma".