Las mejores coles para incluir en la alimentación de los mayores

Dentro del amplio abanico de verduras que puedes encontrar en el mercado, existe una familia que engloba varias variedades, todas ellas beneficiosas para la salud de los mayores. Su nombre científico es brasicáceas, pero todo el mundo las conoce como coles o verduras crucíferas. Son típicas del invierno y destacan especialmente por sus propiedades antioxidantes y anticancerígenas.

En el pasado, apenas conocíamos dos o tres tipos, pero ahora, con el auge que ha experimentado la cocina internacional, hay a nuestra disposición multitud de especies con apariencias, sabores y cualidades muy distintas. Seguro que alguna vez has probado el brócoli, el repollo o las coles de Bruselas, pero ¿conoces el romanesco, el Kai-lan o el Pak Choi? Abre tu paladar a nuevas experiencias y conoce por fin las mejores coles para incluir en tu alimentación.

Coles occidentales y orientales: todas igual de saludables

Si tenemos en cuenta el origen de dicho producto, las coles se pueden clasificar en occidentales y orientales. Sin embargo, esta distinción apenas afecta a su impacto en el organismo y nos proporciona nuevos ingredientes para enriquecer nuestras comidas. ¿Qué variedades debes tener en cuenta?

• Coliflor. Una de las verduras más conocidas en nuestro país y fiel integrante de la dieta de muchos mayores. Y no es para menos, pues se trata de una fuente muy interesante de vitaminas C y K, potasio y calcio. Así, el consumo de coliflor se recomienda cuando quieres mejorar la memoria, combatir los radicales libres o evitar la oxidación del organismo.
• Brócoli. Aunque no tiene tantos seguidores como la coliflor, el brócoli es un alimento que todos deberíamos incluir en nuestra dieta. ¿El motivo? Los glucosinolatos que contiene y que nos protegen del estrés oxidativo y algunos tipos de cáncer. Eso sí, para aprovechar estos beneficios se debe tomar al vapor o a la plancha.
• Romanesco. Una de las variedades más desconocidas y muy atractiva por su curiosa apariencia. Se trata del híbrido entre la coliflor y el brócoli y, por lo tanto, aúna gran parte de sus propiedades. De hecho, es el tipo de col que más vitamina C posee, aunque también hay que resaltar su aporte de fósforo y ácido fólico.
• Pak Choi. Miembro de la familia de las coles chinas y todo un descubrimiento en el ámbito culinario. El pak choi es un tipo de col, más similar a la acelga, que ocupa un puesto privilegiado en la cocina asiática debido a la cantidad de fibra y antioxidantes que contiene y  su capacidad para mejorar la digestión. Además, desprende un sabor dulce muy suculento.
• Kai-lan. Conocida también como brécol chino, esta variedad oriental es ideal para hacer al vapor, salteada o como parte de una ensalada. En cuanto a sus cualidades, es considerada un superalimento por fortalecer los huesos, prevenir los accidentes cerebrovasculares o regular la ansiedad. Todo ello debido a la gran cantidad de vitaminas que incluye en su composición.