Mariola Báez
Alimentación
Los beneficios de la cocina al vapor, una manera saludable de aprovechar cada alimento
Con esta técnica de cocción, puedes preparar platos bajos en grasa y de alto valor nutricional
Aprovechar el vapor que desprende el agua en ebullición para cocinar alimentos de todo tipo es una técnica que se utiliza en la actualidad, pero que tiene su origen hace miles de años, en la cocina de los países asiáticos, en los que ya se empleaban cestos de cáñamo y bambú para preparar, con ayuda de ayuda hirviendo, distintas recetas tradicionales.
Hoy en día tienes vaporeras eléctricas, recipientes de silicona aptos para microondas, ollas que incluyen rejillas para el cocinado al vapor y, además, siempre puedes recurrir al método más básico, un colador que te sirva para separar los alimentos del agua hirviendo.
La cocina al vapor, con fama de “sosa”, no es exclusiva de una dieta en la que se pretenda adelgazar, sino que se trata de la técnica ideal para conservar los nutrientes de los alimentos, especialmente en el caso de las verduras y hortalizas, tal como recoge el Ministerio de Sanidad en sus recomendaciones de Estilo de Vida Saludable.
Qué ventajas presenta la cocina al vapor
Expertos nutricionistas incluyen la cocina al vapor entre los métodos de cocción respetuosos con los alimentos. Señalan que esta técnica culinaria consigue que la materia soluble incluida en un alimento, concretamente sus vitaminas, se mantenga inalterable durante el proceso de cocinado y no acabe disuelta en el agua, como ocurriría al hacer un hervido.
Además, la cocina al vapor no requiere de la más mínima cantidad de aceite o mantequilla para elaborar los distintos platos, por lo que también es aconsejable para reducir la ingesta de grasas, especialmente recomendable si se sigue una dieta para bajar el nivel de colesterol en sangre.
Ventajas añadidas son también que se trata de una opción de cocinado, rápido y limpio con la que puedes preparar no solo verduras, sino prácticamente cualquier alimento de manera saludable. Las carnes, con bajo contenido en grasas, quedan tiernas y jugosas y los pescados al vapor en papillote (envueltos en papel de aluminio) resultan deliciosos y conservan intactos todos sus nutrientes: vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales.
A nivel gastronómico, la cocina al vapor ha dejado de verse como una cocina básica y carente de posibilidades. Con ella, los alimentos no solo conservan nutrientes, también se mantiene su color y sabor original. Unas verduras, por ejemplo, preparadas de esta manera, resultan más vistosas en el plato que si las hubiésemos hervido. Además, hay multitud de opciones para aderezarlas y que queden a tu gusto. Añadir al agua especias como tomillo, laurel, clavo, comino… o incorporar unas gotas de limón o naranja, son dos buenos trucos para hacer recetas al vapor tan saludables como sabrosas.