Platos populares de fácil masticación

Con la edad pueden aparecer problemas para masticar la comida y esto puede llevarnos a dejar de consumir ciertos alimentos que no nos resulten fáciles de comer. Pero hacerlo supondría una temeridad, ya que dejaríamos de ingerir algunos nutrientes que nuestro cuerpo también necesita cuando somos mayores. En estos casos, una solución sería cocinar esos alimentos que ya no podemos masticar de tal forma que podamos seguir beneficiando de sus propiedades.

Hay que tener en cuenta que la masticación facilita la absorción de los alimentos y, de este modo, mejora el equilibrio nutricional y nuestra digestión. Desde la Fundación Alícia, un centro con vocación social dedicado a la innovación tecnológica en cocina impulsado por la Fundación Cataluña – La Pedrera y la Generalitat de Cataluña, han elaborado unas pautas de cocina de fácil masticación en las que también proponen este listado de platos populares que nos pueden resultar de fácil masticación en nuestro menú diario:

Entrantes y primeros platos

Ensaladilla rusa, gazpacho, salmorejo, hummus, huevos rellenos, patés, quesos tiernos, cremas de verduras o setas, puré de patatas, caldos vegetales, caldos de pollo o pescado, sopas con pasta fina u otros ingredientes a trozos pequeños, pasta con salsa, canelones, guisados de legumbres, cremas de legumbres, arroz a la cubana, brandada de bacalao, trinxat de La Cerdanya (sin tocino).

Segundos platos

Merluza con salsa verde, tortilla a la francesa, huevo pasado por agua, huevo poché, pastel de pescado, pastel de carne, bacalao al ajoarriero, revueltos de huevo, pudin de escalibada, croquetas, buñuelos blandos.

Postres

Manzana al horno sin piel, fruta muy madura, crema catalana (sin quemar), natillas, flanes, yogur, cuajada, pastel de queso con base de bizcocho, helados, compotas, arroz con leche, gelatinas, sorbetes.

Recuerda que la digestión comienza en la boca: cuanto más mastiquemos los alimentos, más conseguiremos mezclarlos con la saliva y prepararlos para pasar, sin necesidad de grandes esfuerzos, al estómago para la digestión. En este sentido, contamos con seis glándulas salivales, atravesadas por minúsculos canales por los que la saliva llega a la boca. Por lo general, estas glándulas fabrican cada día un litro de saliva que contiene enzimas digestivas, y es durante la masticación esas enzimas inician el proceso de digestión.

Con esta gran variedad de platos sugeridos por la Fundación Alícia podremos continuar saboreando y disfrutando de la comida, sin duda uno de los placeres de la vida. De lo contrario, si intentamos comer como lo de siempre pero masticando poco los alimentos, también puede ocurrir que aumentemos de peso, porque no permitimos que las señales de saciedad lleguen al cerebro, por lo que ingerimos más cantidad de alimento del que realmente necesitamos. ¡Buen provecho!