Toni Esteve
Alimentación
Por qué los mayores deben evitar comer fruta cortada y almacenada a temperatura ambiente
La fruta es muy sana, pero hay bacterias patógenas que pueden contaminarlas y multiplicarse en ellas
Las frutas y verduras son imprescindibles para llevar una dieta saludable, debido a que su adecuado consumo diario ayuda a la prevención de diferentes enfermedades. La Organización Mundial de la Salud (@WHO) recomienda que al día se ingieran al menos 400 g de frutas y verduras para prevenir diversas enfermedades y carencias de micronutrientes. Las enfermedades crónicas más frecuentes entre los que consumen poca fruta y verdura son las cardiopatías, el cáncer, la diabetes y la obesidad.
Entre los cambios digestivos que sufren las personas de edad avanzada, la Fundación Española de la Nutrición (FEN) destaca los defectos en la masticación y la capacidad digestiva (disminución de la salivación, la absorción de nutrientes, el peristaltismo y la sensación de sed y dificultad para tragar) y los frecuentes problemas de estreñimiento. Precisamente el consumo de fibra está especialmente indicado en la edad avanzada para solucionar los problemas de estreñimiento, para ello es esencial aumentar su ingesta a través de las frutas. También el aporte de estas en vitaminas ayuda a la hora de reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
Sin embargo, desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid (@ComunidadMadrid) recuerdan que, por sanas que sean, “hay bacterias patógenas, como Salmonella, Listeria y Escherichia coli, que pueden contaminarlas y multiplicarse en ellas”. En este sentido, hay dos recomendaciones claras de la Consejería:
-Los mayores y las personas más vulnerables (también niños pequeños y mujeres embarazadas) deben evitar comer fruta cortada almacenada a temperatura ambiente durante más de dos horas.
-La fruta cortada debe mantenerse en la nevera hasta que se consuma, tanto en el hogar como en las tiendas de alimentación y en los restaurantes.
-En la nevera, la fruta “toda la fruta que esté cortada previamente” debe separarse del resto de alimentos cocinados y crudos. Debe almacenarse en la zona menos fría de la nevera.
-Si ya la compras cortada: no mezcles en tu bolsa de la compra la fruta cortada (por ejemplo la mitad de una sandía o un melón) o pelada con carnes, pescados, mariscos o productos de limpieza. Utiliza para ello distintas bolsas.
Siguiendo estos consejos puedes evitar las intoxicaciones por bacterias. En este sentido, la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad advierte de que las bacterias se multiplican rápidamente si la fruta cortada se mantiene a temperatura ambiente. Y pone como ejemplo que la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) constató en el año 2014 que la bacteria Salmonella puede crecer rápidamente en el melón cortado conservado a temperatura ambiente, sin deterioro aparente de su aspecto.