Por qué estos alimentos no son recomendables para los mayores ante un resfriado

No es ningún secreto que una alimentación saludable es importante a la hora de mantener óptimo el estado de salud de una persona. Una pauta nutricional equilibrada y completa que no solo ayudará a la hora de prevenir todo tipo de patologías, sino que a veces también favorece la recuperación del organismo cuando un paciente se encuentra enfermo.

Sin embargo, es importante recordar que ciertos alimentos es mejor no consumirlos en algunas ocasiones, ya que pueden producir el efecto contrario. Es el caso de estos que se indican a continuación y que no resultan del todo aconsejables cuando, por ejemplo, una persona mayor está resfriada.

¿Qué no se debe comer si se está resfriado?

En lugar de otros alimentos que resultan muy beneficiosos en esta situación, como es el caso de las frutas, las verduras o las legumbres, puede que a una persona mayor le apetezca comer algo que no resulta tan apropiado, ya que no motivará su recuperación. Por ejemplo, aquellos que le hagan deshidratarse, que su organismo se inflame o que no le permitan descansar lo necesario para pasar cuanto antes el proceso de resfriado. Para ser más concretos, ¿de qué productos hablamos?

• Bacon. En el caso que nos ocupa, no resulta muy recomendable ya que tiene demasiado contenido en sodio y esto hace que el cuerpo no reciba la suficiente cantidad de hidratación. Esta última resulta clave para olvidarse cuanto antes del resfriado.
• El pan blanco. Tiene un alto índice glucémico nada beneficioso para esta patología. ¿El motivo? El aumento de azúcar lleva a una inflamación del organismo, perjudicial en estos casos. Lo mejor, entonces, es optar por comer pan integral.
• Helados. No por el hecho de que estén fríos, sino que su combinación de grasa y azúcar no es buena en este sentido. Además, dicho binomio recarga el ya de por sí, sobrepasado, sistema inmunológico. 
• La harina blanca refinada y la mantequilla en un paquete de galletas tampoco ayudarán, si es en exceso, ante un resfriado ya que aumentan la inflamación del cuerpo.
• Y es mejor olvidarse de darse un capricho en dicha convalecencia con un trozo de pizza. Este tipo de comidas solo traerán estrés oxidativo a un cuerpo que está intentando recuperarse. 

Además, lo más probable es que durante estos días el malestar en la garganta sea uno de los síntomas que más quebraderos de cabeza traiga. En este caso, también es bueno dejar de lado durante este tiempo algunos alimentos que pueden irritarla aún más. Es el caso de la comida muy picante, productos demasiado ácidos o que estén tan duros que incrementen el dolor de la garganta. 

También se debe tener especial cuidado con bebidas muy calientes o muy frías, así como con zumos con demasiado azúcar. Y, aunque no son alimentos, nada de tabaco y alcohol. En el primer caso, solo se conseguirá irritar todavía más la garganta y empeorar la mucosa, mientras que el efecto de los medicamentos que se puedan estar tomando puede verse disminuido si se combinan con bebidas alcohólicas.

Alimentos que sí son saludables y recomendables

Por su parte, no hay alimentos milagrosos que acaben en unas pocas horas con el resfriado de una persona mayor. Pero sí que es cierto que pueden aminorar los síntomas y hacer que la recuperación llegue antes, como recuerdan desde Sanitas (@sanitas). 

Aunque cuando uno está malo no tiene muchas ganas de comer, hay que hacer un pequeño esfuerzo para mantener durante estos días una dieta sana y equilibrada. Una rutina donde los líquidos son especialmente importantes para mantener la hidratación que el cuerpo necesita. Además, resultan esenciales para evitar que las mucosas se resequen y haya un mayor número de secreciones. Entonces, para contrarrestar dichos síntomas lo mejor es beber mucha agua, prepararse zumos naturales (mejor sin nada de azúcar), infusiones de hierbas, a las que se les puede añadir algo de miel o limón; y tomar sopas de verduras, incluso solo el caldo será de gran ayuda.

En este último caso, por ejemplo, una buena idea puede ser una sopa caliente de cebolla para terminar el día, ya que así uno puede beneficiarse de unas propiedades antisépticas que son muy reconfortantes cuando se tiene un resfriado. 

Por su parte, para recuperar las defensas y reforzar el sistema inmunitario que ahora está más débil, en la lista de la compra no pueden faltar alimentos como el huevo, los cereales integrales, las legumbres, los frutos secos, los mariscos, los pescados y la carne, sobre todo la blanca.

Por último, no hay que olvidarse de incluir alimentos probióticos, como es el caso del yogur o la col fermentada, que ayudan por sus bacterias ácido lácticas que regulan el equilibrio de la flora intestinal. Además, pueden contribuir a aminorar la intensidad de los síntomas de un resfriado.