Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorEl guacamole lo relacionamos inmediatamente con la cocina mexicana, es uno de sus clásicos, y se prepara a base de aguacate, tomate y cebolleta. Hoy en día podemos encontrar variantes del clásico guacamole y de cómo se emplea en distintas recetas. Vamos a ver de qué forma lo podemos incorporar a nuestra dieta.
El guacamole se elabora con aguacates, tomate, cebolleta, zumo de lima y cilantro picado. Lo ideal es prepararlo justo antes de degustarlo, porque el aguacate se oxida muy rápido y, si es posible, hacerlo en un mortero de piedra o, en su defecto, aplastado con un tenedor. Evitar usar la batidora.
Si eres de los vagos y prefieres comprarlo, en muchos supermercados puedes encontrar opciones ya preparadas de guacamole y algunas están realmente ricas.
Una vez que tenemos nuestro guacamole, podemos tomarlo acompañado de unos totopos, que es lo tradicional en México. Los totopos son tortillas de maíz fritas para mojar en el guacamole. Aquí en España usamos los nachos de bolsa, que también es buena opción.
Otra opción para acompañar el guacamole es hacer pico de gallo a partir de tomate, jalapeño, cebolleta, pimiento verde y cilantro, todo picado y aliñado con un chorro de aceite de oliva y sal.
El guacamole supone un buen acompañamiento para unas fajitas o tortitas rellenas, con pollo marinado y distintos tipos de pimientos salteados, por ejemplo. También puede ser el acompañamiento ideal de una hamburguesa de carne, sustituyendo a los clásicos kétchup y mostaza y resultando un aderezo más saludable. O para acompañar una hamburguesa vegana a base de quinoa.
El guacamole puede ser el complemento ideal para algunos pescados. Por ejemplo, podemos preparar unas tostas donde untar el guacamole y encima poner unas sardinas marinadas. También lo podemos acompañar de tacos de salmón marinado en unas cucharitas como aperitivo, poniendo un poco de guacamole en el fondo, el taco de salmón marinado y un poco de eneldo fresco.
¿Y unos huevos rellenos con guacamole? Una receta fresca y saludable y que podemos acompañar con unos langostinos cocidos o con atún.
Si la receta del guacamole clásico ya la tienes superada o te apetece probar cosas nuevas, puedes cambiar o añadir algunos ingredientes. Puedes probar a añadir otras frutas, cortadas en cuadraditos en lugar de tomate, como mango o sandía, que le darán un toque distinto. Si te decides por el mando, puedes cambiar también la cebolleta de la receta tradicional por cebolla morada.
En otra versión, puedes cambiar el tomate por palitos de cangrejo picados, que le dará un color y una textura diferente.