Síntomas y señales de deficiencia de vitamina B12

La vitamina B12, también conocida como cobalamina, es una importante vitamina soluble en agua. Desempeña un papel esencial en la producción de sus glóbulos rojos y ADN, así como en el buen funcionamiento del sistema nervioso. La B12 se encuentra naturalmente en alimentos de origen animal, como carnes, pescados, aves, huevos y lácteos. Sin embargo, también se puede encontrar en productos enriquecidos con B12, como algunas variedades de pan y leche de origen vegetal.

Desafortunadamente, la deficiencia de B12 es común, especialmente en los adultos mayores. Corres el riesgo de deficiencia si no obtienes suficiente en tu dieta o no puedes absorber lo suficiente de los alimentos que comes. Los síntomas de una deficiencia de vitamina B12 pueden tardar años en aparecer, y su diagnóstico puede ser complejo. Una deficiencia de B12 a veces puede confundirse con una deficiencia de folato.

Los niveles bajos de B12 hacen que los niveles de folato disminuyan. Sin embargo, si tiene una deficiencia de B12, corregir los niveles bajos de folato puede simplemente enmascarar la deficiencia y no solucionar el problema subyacente. Según un Manual de Nutrición y Dietética de la Universidad Complutense de Madrid (@unicomplutense), estas son algunas de las señales y los síntomas en el cuerpo de la falta de vitamina B12.

Piel pálida o con ictericia

Las personas con deficiencia de B12 a menudo están pálidas o tienen un ligero tinte amarillo en la piel y el blanco de los ojos, una condición conocida como ictericia. Esto sucede cuando la falta de B12 causa problemas con la producción de glóbulos rojos de tu cuerpo. La vitamina B12 desempeña un papel esencial en la producción del ADN necesario para producir glóbulos rojos. Sin ella, las instrucciones para construir las celdas están incompletas y las celdas no pueden dividirse.

Esto causa un tipo de anemia llamada anemia megaloblástica, en la cual los glóbulos rojos producidos en la médula ósea son grandes y frágiles. Estos glóbulos rojos son demasiado grandes para pasar de la médula ósea a la circulación. Por lo tanto, no hay tantos glóbulos rojos circulando alrededor de tu cuerpo y la piel puede aparecer de color pálido.

La fragilidad de estas células también significa que muchas de ellas se descomponen, causando un exceso de bilirrubina. Esta es una sustancia ligeramente roja o de color marrón, que es producida por el hígado cuando descompone las células sanguíneas viejas. Grandes cantidades de bilirrubina son lo que le da a su piel y ojos un tinte amarillo.

Debilidad y fatiga

La debilidad y la fatiga son síntomas comunes de deficiencia de vitamina B12. Ocurren porque el cuerpo no tiene suficiente vitamina B12 para producir glóbulos rojos, que transportan oxígeno por todo el cuerpo. Como resultado, no puede transportar eficientemente oxígeno a las células del cuerpo, lo que te hace sentir cansado y débil.

En las personas mayores, este tipo de anemia a menudo es causada por una condición autoinmune conocida como anemia perniciosa. Las personas con anemia perniciosa no producen suficiente proteína importante llamada factor intrínseco. El factor intrínseco es esencial para prevenir una deficiencia de B12, ya que se une con la vitamina en el intestino para que pueda absorberla.

Sensación de hormigueo

Uno de los efectos secundarios más graves de una deficiencia de B12 a largo plazo es el daño nervioso. Esto puede ocurrir con el tiempo, ya que la vitamina B12 es un contribuyente importante a la vía metabólica que produce la sustancia grasa mielina. La mielina rodea los nervios como una forma de protección y aislamiento.

Sin B12, la mielina se produce de manera diferente y el sistema nervioso no puede funcionar correctamente. Una señal común de que esto sucede es la parestesia, o la sensación de alfileres y agujas, que es similar a una sensación de hormigueo en las manos y los pies. Curiosamente, los síntomas neurológicos asociados con la deficiencia de vitamina B12 generalmente ocurren junto con la anemia.

Dicho esto, estas sensaciones son un síntoma común que puede tener muchas causas, por lo que este síntoma por sí solo no suele ser un signo de deficiencia de vitamina B12.

Cambios a la movilidad

Si no lo tratas, el daño a tu sistema nervioso causado por una deficiencia de B12 podría causar cambios en la forma en que caminas y te mueves. Incluso puede afectar tu equilibrio y coordinación, haciéndote más propenso a caerte. Este síntoma a menudo se observa en la deficiencia de B12 no diagnosticada en la tercera edad, ya que las personas mayores de 60 años son más propensas a una deficiencia de B12. Sin embargo, prevenir o tratar las deficiencias en este grupo puede mejorar la movilidad. Además, este síntoma puede estar presente en personas jóvenes que tienen una deficiencia severa no tratada.

Glositis y úlceras bucales

La glositis es un término utilizado para describir una lengua inflamada. Si la sufres, tu lengua cambia de color y forma, haciéndola dolorosa, roja e hinchada. La inflamación también puede hacer que la lengua se note suave, ya que todas las pequeñas protuberancias en su lengua que contienen sus papilas gustativas se estiran y desaparecen.

Además de ser dolorosa, la glositis puede cambiar la forma en que comes y hablas. Además, algunas personas con deficiencia de vitamina B12 pueden experimentar otros síntomas orales, como úlceras en la boca, sensación de alfileres y agujas en la lengua o sensación de ardor y picazón en la boca.

Respiración y mareos

Si tienes anemia debido a una deficiencia de vitamina B12, puedes notar falta de aliento y sentirte un poco mareado, especialmente cuando te esfuerzas. Esto se debe a que tu cuerpo carece de los glóbulos rojos que necesitas para llevar suficiente oxígeno a las células de tu cuerpo. Sin embargo, estos síntomas pueden tener muchas causas, por lo que si los notas, debes hablar con tu médico para investigar la causa.

Visión perturbada

Un síntoma de deficiencia de vitamina B12 es la visión borrosa o alterada. Esto puede ocurrir cuando una deficiencia de B12 no tratada resulta en daño del sistema nervioso al nervio óptico que conduce a los ojos. El daño puede interrumpir la señal nerviosa que viaja desde el ojo hasta el cerebro, perjudicando la visión. Esta condición se conoce como neuropatía óptica. Aunque es alarmante, a menudo es reversible al complementar con B12.