Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorTenemos la Navidad encima y, aunque este año, debido las restricciones de la covid-19 van a ser diferentes, las comidas y las cenas no van a faltar. Otra cosa que no va a faltar es el dilema de todos los años: ¿qué preparamos para comer o cenar? Siempre intentamos que todos los comensales disfruten con lo que servimos en la mesa, pero también buscamos platos que no nos lleven demasiado tiempo para poder disfrutar del tiempo en familia.
Aquí te dejamos algunas ideas para preparar como entrante en tus comidas y cenas esta Navidad. Especialmente las sopas, consomés y cremas nos ofrecen una buena solución como entrante, porque los podemos elaborar con antelación. Estas son nuestras propuestas.
El caldo de Navidad está realizado habitualmente con verduras, huesos de jamón y carne de ternera y de gallina. Una vez realizado, se puede utilizar de varias formas, bien para hacer las sopas de galets de Cataluña u otras sopas de Navidad, o para reducir haciendo un consomé navideño.
Lo primero, ponemos a cocer las verduras (patata, puerro y zanahoria) junto a los huesos de jamón y espinazo, falda de ternera y morcillo y un cuarto de gallina. Lo ideal es que esté cociendo a fuego suave durante un par de horas. Al principio de la cocción, la carne soltará impurezas, que iremos retirando. Una vez cocido, lo colaremos bien y lo enfriaremos para quitar la capa de grasa superior. Y aquí es donde podemos optar por emplear este caldo para hacer una sopa o bien reducirlo para conseguir un consomé.
Otro de los clásicos de las comidas de Navidad es la sopa de pescado. Se puede preparar de muchas maneras y con distintos ingredientes. Esta sopa se elabora a base de diversos tipos de pescado, verduras y también se le suelen añadir mariscos.
La clave para triunfar con una buena sopa de pescado es elaborar un buen fondo o caldo, haciendo uso de mariscos, restos de pescados, verduras, etc. para que nuestra sopa quede muy sabrosa y le dé cuerpo. Podemos emplear las cabezas de gambas y langostinos (los cuerpos los emplearemos para añadir a la sopa enteros), huesos de rape, espinas de merluza… Por otro lado, haremos un sofrito con ajo, puerro y tomate, al que añadiremos al caldo y lo dejaremos cocer. Después trituraremos todo y le añadiremos las gambas y langostinos salteados y las almejas.
Otro de los clásicos de las mesas de Navidad es la vichyssoise, una crema a base de puerro y patata. Se trata de una sopa muy sencilla de hacer, donde se pocha la cebolla y el puerro antes de añadir la patata. Se deja cocer todo hasta que la patata esté blanda. Se tritura todo bien, se le añade la leche y la nata y se vuelve a triturar para conseguir una crema muy fina.
Un plato que suele aparecer en nuestras mesas en esta época del año es la crema de marisco. Al igual que sucede con la sopa de pescado, podemos emplear distintos productos para conseguir una crema sabrosa y muy rica. Podemos comenzar pochando ajo y cebolla en una cazuela, con un poco de tomate y un chorrito de brandy, al que añadiremos langostinos, gambas y gambones, enteros, sin pelar y con la cabeza. Una vez cocidos, vamos a triturarlo todo con una batidora potente. Si empleamos otros mariscos más duros o con concha más dura, deberemos retirar esta antes de triturar. Una vez batido todo, tendremos que pasarlo por un chino para que nos quede una crema muy fina. Ponemos en una cazuela y añadimos la nata, removiendo muy bien.