Lola Santos
Lola Santos es redactora especializada en temas de alimentación, viajes y ocio.
… saber más sobre el autorFoto: Bigstock
Viernes 23 de diciembre de 2022
ACTUALIZADO : Jueves 21 de diciembre de 2023 a las 16:28 H
4 minutos
Tan clásico como los langostinos y el turrón son las sobras de la comida de Navidad. Toda comida nos parece poca y preparamos viandas como si lo fueran a prohibir. Y claro, siempre sobra. Te contamos algunos sencillos trucos para que esa comida no termine en el cubo de la basura y puedas aprovecharla en otros platos. Toma nota.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que muchos los alimentos se podrán congelar. En ese caso, lo mejor es congelar los alimentos cuanto antes. Si no, lo ideal es aprovecharlo en otras elaboraciones.
Vamos a comenzar por los aperitivos o entrantes. Suele ser de lo que menos sobra puesto que es lo primero que se pone en la mesa y nos pilla con el estómago vacío. Si lo que ha sobrado es embutido, podemos guardarlo en la nevera en un recipiente que cierre bien para consumir en los días siguientes.
El marisco es muy propio de estas fechas y es posible que sobre. Podemos elaborar una sopa o crema de marisco con ello. También lo podemos aprovechar para incluirlas en una buena ensalada o en preparar una ensaladilla rusa con gambas o langostinos cocidos, que es una receta sencilla y muy fácil de preparar. También podemos ponerlo como acompañamiento a un pescado.
Son muchos los tipos de carne que podemos encontrar en las mesas navideñas: cordero, pavo, cochinillo, cabrito, etc. Y siempre sobra, porque llegamos a esta parte de la cena con poca hambre después de haber dado cuenta de entrantes, sopas o consomés, mariscos… Lo primero que podemos hacer son unas croquetas, la receta de aprovechamiento por excelencia. También podemos preparar una lasaña o unos canelones, otra opción muy apetecible.
Los crepes, las fajitas y burritos, las empanadillas o las tartas saladas son otras opciones para preparar recetas donde poder aprovechar los distintos tipos de carne que nos han sobrado de la comida.
También los podemos poner en ensaladas, como es el caso del pavo. O formar parte de un completo plato de pasta.
Si lo que nos ha sobrado es pescado, tenemos que tener en cuenta que no se conserva durante mucho tiempo, por lo que le tenemos que dar salida rápidamente. También podemos preparar unas croquetas o unas empanadillas muy ricas, añadiendo al pescado desmenuzado un sofrito muy rico, un poco de tomate y un huevo cocido, por ejemplo.