Rosa Roch
Rosa Roch es redactora especializada en temas de salud, alimentación y gastronomía.
… saber más sobre el autorEspaña es uno de los países con mayor superficie dedicada al cultivo y producción de uva respecto al resto del mundo. Entre las variedades que se cultivan está la mencía, el godello o la garnacha. Y es en este abanico de variedades donde podemos destacar las grandes propiedades y beneficios que ofrece esta fruta a nuestro organismo.
Y es que la uva es una fruta que viste nuestras mesas desde hace siglos, no solo como alimento, sino también en forma de bebidas y muy importante para la economía, también como producto a exportar. De hecho, fue a raíz del descubrimiento de América que el vino producido con uva española alcanzó renombre, facilitando la apertura al comercio exterior. Desde los fenicios hasta los romanos, la uva ha estado presente en diferentes ámbitos cotidianos, fiestas y celebraciones, momentos de ocio y relax y, hecha vino, la convirtieron en divinidad, Dionisio en la mitología griega y, más tarde, Baco, en la mitología romana, nombre este último que procede bacanal (Bacchanalia, en latín), que hace referencia a fiestas secretas en las que solo participaban mujeres y rendían culto al dios del vino. Tanto Baco como Dionisio aparecen siempre representados en imágenes y esculturas junto a una parra, una copa de vino o unos racimos de uva.
Pero volviendo al presente, algo tendrá esta fruta para seguir estando presente en nuestra gastronomía ya sea fresca, seca, en mosto, en zumo o, como no, en buenos caldos.
Si bien ha sido considerada como una fruta a evitar por su alto contenido en fructosa, azúcar presente en las frutas, la realidad es que está compuesta por un bajo porcentaje de azúcares, solo alrededor del 13% es fructosa; en cambio, dependiendo del tipo de uva y de su punto de maduración, tiene gran cantidad de propiedades que la convierten en una fruta ideal para incluir en una dieta sana y equilibrada:
En definitiva, la uva es una fruta que ha de estar en nuestra dieta de manera habitual y no solo ser plato de las 12 campanadas de fin de año. Son un excelente complemento nutricional y así lo indican componentes como las sales minerales, el hierro, el magnesio, la vitamina B1 y la fibra, entre otros, que contiene la uva. Además, es muy interesante para aquellas personas que necesitan un aporte extra de energía.