Juan María León
Cesta de la compra
La cesta de la compra ‘eco’ cuesta el doble: 280 euros frente a los 140 de una normal
ASUFIN analiza más de un centenar de productos de las principales cadenas de distribución
Realizar una cesta de la compra eco, es decir, llenarla de productos que estén acreditados como sostenibles, cuesta el doble que una cesta de la compra normal. La Asociación de Usuarios Financieros (ASUFIN) ha realizado un estudio en el que compara más de un centenar de productos de las cinco principales cadenas de distribución.
Los resultados de este informe muestran que el coste de la cesta eco es de 280€ frente a los 140€ a los que desciende la cesta de la compra normal. Las diferencias en algunos productos son muy destacables, como, por ejemplo, las galletas de avena (las bio cuestan 5,47€ frente a los 1,32€ que cuestan las convencionales).
Desde esta asociación también han destacado la diferencia de precios entre otros productos. El caso del pan de molde (3,99 euros el bio, frente a 1,02 euros el convencional), aunque han señalado que, en otros productos, como el aceite de oliva (11,75 euros el ecológico y 8,99 euros el convencional) o los filetes de ternera (18,83 euros el eco y 14,79 euros el normal), la brecha es menor.
Por categorías, el estudio concluye que las mayores diferencias se dan en las legumbres, con precios eco hasta un 217% más caro que los convencionales, y en los cereales, los productos del desayuno, las pastas y las carnes. Por otro lado, la menor disparidad se detecta en las conservas de pescado, que alcanzan un 42%, en la leche y en el aceite de oliva.
Asimismo, desde ASUFIN han explicado que, aunque la gama de productos que ofrece cada supermercado es dispar, el mayor sobreprecio en eco se da en Carrefour, seguida de Alcampo, Aldi, El Corte Inglés y finalmente Lidl.
Para orientar al consumidor por el proceloso mundo de la sostenibilidad, el estudio incorpora algunas claves que dificultan que tengamos una gama adecuada y competitiva de producto bio en los lineales de los supermercados, como son la inflación, la reduflación o inflación invisible, la percepción errónea de no apostar por productos que consideramos de lujo, la falta de tiempo y la preocupación por la salud, que nos hace caer en reclamos erróneos.
En concreto, y con relación a la percepción, ASUFIN afirma que es importante destacar la asunción de reclamos engañosos y prácticas de greenwashing generalizadas, que puede desincentivar el deseo de un consumo más sostenible. "Lo cierto es que la proliferación de sellos, certificaciones, etc., así como el riesgo de publicidad engañosa, requieren de un esfuerzo adicional para poder dirigir bien nuestras elecciones hacia una cesta más sostenible", considera..