Los yogures de Carrefour cambian la fecha de caducidad por la de 'consumo preferente'

Es un hecho que desperdiciamos en nuestros hogares una gran cantidad de alimentos. Según datos de la Organización de Consumidores y Usuarios, es una casi una tercera parte de todo lo que compramos. Y muchas veces terminan en la basura productos que se pueden consumir perfectamente pero que, al tener una fecha de caducidad, puede parecer que tienen una vida útil menor.

Así pasa con los yogures, que en lugar de tener una fecha de caducidad podrían tener una fecha de consumo preferente, lo que significa que pasada esa fecha son perfectamente comestibles, aunque vayan perdiendo gradualmente sus propiedades como textura o color, por ejemplo

Legalmente los fabricantes y marcas podían haber sustituido dicha fecha de caducidad por la de consumo preferente desde hace casi 9 años, fecha en la que el Gobierno anunció y publicó la desaparición de la obligación de la fecha de caducidad en estos productos.

Sin embargo, ese cambio no se ha producido todo lo ágil que los consumidores hubieran deseado. Primero fue la marca Danone, que en mayo anunció que dejaría de indicar la fecha de caducidad en la mayoría de sus productos a lo largo de este año.

Ahora le toca el turno a los yogures de marca propia de la cadena Carrefour, según ha anunciado su director ejecutivo en España, Alexandre de Palmas.

Gran parte de los yogures y postres lácteos de la marca Carrefour son producidos por la empresa L.N.P.L.R. Guadalajara S.L., perteneciente a los grupos internacionales Lactalis (Puleva, Lauki, Chufi, Presidente, etc.) y Nestlé, y tiene su fábrica en la localidad alcarreña de Marchamalo. También algunas variedades son fabricados por otras empresas como la cántabra Andros la Serna.