
Cuidado con las cartas naranjas que llegan a tu buzón: cómo evitar caer en la estafa
La suplantación de identidad es uno de los principales modos de estafa

La tecnología evoluciona día a día. Y con ella, los delitos cibernéticos también. Los ciberdelincuentes aprovechan cada actualización para aprovecharse de la vulnerabilidad de sus víctimas y sus dispositivos para poder robarnos datos e información privada y así acceder a nuestras cuentas bancarias y quedarse con nuestro dinero.
Las diferentes técnicas de phishing (fraudes a través de correos electrónicos y páginas web falsas), vishing (llamadas fraudulentas) y smishing (mensajes de texto falsos), se han vuelto parte del día a día. Sin embargo, además de estos métodos modernos existen otros que representan un riesgo para la población: las estafas tradicionales.
La Guardia Civil ha advertido sobre un fraude que recuerda a las antiguas formas de timar. Se trata de cartas que llegan directamente a nuestro buzón de casa, muchas de ellas en sobres de color naranja, lo que ha levantado las alertas. Este tipo de estafa se basa en la suplantación de identidad, una de las prácticas más comunes en nuestra sociedad.
¿En qué consiste esta estafa?
Uno de los elementos claves que utilizan los estafadores es el uso de tácticas de presión emocional. Estos personajes buscan crear en las víctimas un escenario de urgencia y que aparezca una reacción con miedo o apresuramiento, lo que facilita a que comentan errores y brinden información personal. A través de estas cartas, los delincuentes logran quedarse con contraseñas bancarias, direcciones y más datos privados.

Las misivas parecen provenir de alguna institución oficial, entidad bancaria o una marca conocida. En el interior del sobre naranja suelen llegar mensajes que aparentan ser serios y urgentes, utilizando términos legales como “plazo final”, “embargo”, “vencimiento”, o “multa”, que pueden causar temor en las víctimas.
En el caso concreto de estas cartas naranjas, se pide al destinatario que realice un pago inmediato para evitar problemas legales o la interrupción de algún servicio. Cabe destacar que estos mensajes suelen ser totalmente falsos, por lo que es importante siempre verificar con la compañía oficial cualquier tipo de comunicación de este tipo.
¿Qué hacer si recibes una de estas cartas?
Lo principal es no dejarse llevar por el pánico o el temor. Si recibes una carta en tu buzón y tienes dudas de ella, trata de detectar alguna incoherencia en el contenido del mensaje. Lee detenidamente la carta y luego contacta con la entidad correspondiente para confirmar que son los que la han enviado.
En caso llegues a detectar que se trata de una carta falsa que busca robar información sensible, debes informar a las autoridades y reportar el caso ante los organismos competentes.