Vigo, donde la magia atrapa a todos

La Navidad es una época mágica para disfrutar en familia y Vigo es un destino ideal ya que ofrece alternativas para todos los gustos y para todas las edades.

El impresionante alumbrado de la ciudad, que deslumbra por su grandeza y originalidad, ha alcanzado fama en toda España y un simple paseo ya hace que el viaje merezca la pena. Pero hay mucho más.

 

Vigo se transforma estos días en una verdadera ciudad de cuento con sus miles de luces LED que visten de color más de 300 calles, fachadas y edificios importantes, a lo que se suman los elementos más espectaculares. El principal, y junto al que nadie se resiste a inmortalizar el momento, es el enorme árbol de Navidad ubicado en la Porta do Sol, que ofrece varios espectáculos audiovisuales diarios. Tampoco hay que perderse al simpático muñeco de nieve en la calle Rosalía de Castro, la gran caja de regalo en plena Gran Vía, la bola gigante en el cruce de Urzáiz y Colón y la infinidad de arcos y adornos salpicados por toda la ciudad que logran envolver al visitante en un colorido sueño que atrapa incluso a los menos amigos de esta época del año. Una sensación difícil de describir; mejor vivirla. 

La iluminación, que se mantendrá hasta el 12 de enero, se disfruta con un agradable paseo pero, además, hay un autobús turístico que realiza un recorrido específico por los puntos principales de la decoración. Una opción perfecta para las personas con dificultades de movilidad o para aquellos que viajan con niños pequeños. El NadalBus recorre los puntos más significativos del alumbrado en una ruta de aproximadamente 1 hora de duración y existen varias rutas. Para evitar colas, este año las entradas pueden adquirirse por internet. 

Y aún hay más. La atracción más llamativa de este año es una noria gigante de 62 metros de altura, con capacidad para 250 personas y ubicada en la céntrica Alameda. Brinda a las familias una experiencia única con espectaculares vistas de la Ría de Vigo y de la ciudad iluminada. ¡Muy recomendable!

En este mismo entorno se encuentra otra de las grandes novedades de este año, el mercadillo de Navidad, con más de 58 casetas de madera iluminadas en las que se pueden encontrar desde puestos de gastronomía típicamente gallega como el pulpo ‘á feira’, el cocido gallego, quesos de la zona, dulces, etc. a artesanía, ropa y joyería. Y… ¡atención, en este mercado nieva de verdad! Cada hora durante unos minutos se activan cañones de nieve artificial que aseguran la diversión de los paseantes y les transportaran mágicamente a los clásicos mercadillos del norte de Europa. Además de este mercado, la ciudad cuenta con otros dos, uno ubicado en la zona peatonal de O Calvario y el otro justo detrás del museo de arte contemporánea, MARCO, en plena calle Príncipe. Una ocasión perfecta para hacerse con artículos únicos de inequívoco espíritu celta, labrados en cuero, cerámica o metales preciosos.

Si el tiempo no acompaña, la Navidad de Vigo tiene alternativas para seguir disfrutando. El Belén Monumental de Nadal es una de las visitas imprescindibles. Se trata de un nacimiento gigante formado por casi 200 figuras y realizado por la agrupación La Morana de Zamora. Está situado en la Casa de las Artes y además de la calidad artística de sus piezas, disfrutarán descubriendo los guiños a la ciudad de Vigo y los elementos naturales como el agua real en movimiento, más de 1.000 kilos de arena, grava y musgo. La entrada es libre.

 

Además, en la Casa Galega da Cultura está el poblado navideño, una recreación de un pueblo de montaña en miniatura y ambientación de Navidad donde la diversión es el denominador común. Familias esquiando o patinando sobre hielo son algunas de las imágenes que recrea este escenario con elementos en movimiento como un parque de atracciones, un tren o un telesilla.

Y tras la recreación, qué mejor idea que convertir estas actividades en realidad e irse a patinar a las pistas de hielo de Samil o de la zona del Náutico, subirse al circuito de karts o saltar en las camas elásticas. Todo eso puede hacerse en estas dos zonas donde, además, el mar es el protagonista y el escenario perfecto para un sugerente paseo.

Vigo ha logrado que su Navidad atraiga a visitantes de toda España y las expectativas se cumplen con creces. Desde el encendido navideño, el 23 de noviembre, se han contabilizado más de 700.000 visitantes llegados de diferentes puntos de España y de Galicia. Sin duda, la ciudad olívica es una apuesta segura para estas fiestas y el inicio de una larga amistad con la ciudad.