Amancio Ortega, el 'gallego' universal que ha logrado que hasta las reinas vistan de Zara

La redacción de 65YMÁS elige a las 65 personas mayores de 65 años más influyentes de España en 2024. Un total de 65 sénior, verdaderos influencers que no se limitan a un éxito pasajero en redes sociales, sino cuyo ámbito de influencia ha traspasado y sigue traspasando fronteras físicas y generacionales. Y es que para alcanzar el éxito hace falta tiempo, perseverancia y continuo crecimiento, valores todos ellos que vienen de la mano de la experiencia con la que cuentan de sobra los representantes de nuestra lista de mayores de 65 años más influyentes.

El exitoso empresario Amancio Ortega Gaona (1936), fundador del emblemático grupo Inditex (nave nodriza desde la que controla Zara, Massimo Dutti, Bershka, Pull & Bear, Zara Home, Stradivarius y Oysho), responsable de haber llevado la marca España a todos los puntos del planeta a través de su emporio textil, cumple 88 años en 2024 en plena forma: continúa siendo quien parte el bacalao en el imperio que creó de la nada y acapara la atención de inversores y medios de comunicación de todo el mundo.

Lleva décadas batiendo sus propios récord, como el de ser el empresario español con más éxito internacional, o coronarse como el primer español en lograr un patrimonio superior a 100.000 millones de dólares, con lo que se sitúa en el puesto 12 del ranking de Forbes. Su fortuna asciende a 100.700 millones de dólares, es decir, casi 91.000 millones de euros.

Hombre discreto donde los haya, nunca ha concedido una entrevista oficial y apenas ha sido fotografiado. A fuerza de discreción, ni siquiera estuvo presente en el acto de toque de campana cuando Inditex debutó en la Bolsa de Madrid, el 23 de mayo de 2001. Ese día sacó a cotización el 26% del capital, más de 141 millones de acciones que daban prueba del furor por el fenómeno Zara. 

Desde entonces y hasta la fecha, ha logrado tener casi 6.000 tiendas Zara repartidas por el planeta (dato de 2022) y ha conseguido que reinas y princesas, como Letizia de España, Kate Middleton de Inglaterra, Rania de Jordania o Máxima de Holanda, paseen los estilismos de Zara por eventos de todo el mundo. A estas royals se les unen a diario famosas e influencers internacionales como Khloe Kardashian, Tini Stoessel o María Becerra, que exhiben orgullosas prendas de low cost de Zara, Pull &​ Bear o Bershka.

Rehúye las cámaras, le gusta el fútbol y no se jubila

Pese al enorme éxito empresarial cosechado y a su encomiable liderazgo mundial, Ortega sigue siendo un ejemplo de hombre hecho a sí mismo, trabajador incansable incluso cuando se acerca a los 90, alguien que ni se plantea la jubilación. Le gusta llevar una vida sencilla, es apasionado del fútbol, no utiliza trajes, rehúye las cámaras y los medios de comunicación. Quienes le conocen aseguran que siempre se ha mantenido fiel a sus raíces, y por ello mismo conserva la sede central de Inditex en Arteixo.

Entre los misterios y curiosidades que le rodean, figuran sus orígenes. Y es que, aunque siempre se le ha asociado a Galicia, donde tuvieron lugar sus inicios empresariales y se halla la sede de su conglomerado textil, Ortega no es gallego de nacimiento, sino que nació en Busdongo de Arbas (León), el 28 de marzo de 1936. Además, según ha revelado el periodista Xabier R. Blanco, de los pocos que ha podido entrevistarse en privado con el magnate (tras publicar la biografía no autorizada De cero a Zara), el fundador de Inditex tiene sus orígenes familiares en un pueblo de Valladolid llamado Valoria la Buena. El padre, que era ferroviario, cambió de destino antes de que comenzase la Guerra Civil.

Un imperio familiar con los pies en A Coruña

Amancio Ortega empezó a trabajar a los 14 años, como repartidor en la camisería coruñesa Gala y ya en 1963 puso en marcha GOA, un pequeño taller de confección, germen del actual emporio. En el libro Así es Amancio Ortega, su autora, Covadonga O'Shea, realiza la que quizá sea la más completa aproximación a Ortega, del que dice que, a pesar de haberse convertido en referencia de las escuelas de negocios del mundo entero y de haber revolucionado el mundo de la moda, sigue pensando que "la autocomplacencia es lo peor si quieres conseguir hacer algo importante. El optimismo ciego es negativo y, para triunfar, hay que poner una organización boca abajo cada día".

Los planes y la proyección personal del empresario despuntaron con fuerza en 1975, cuando nació Zara, creada junto a su primera esposa, Rosalía Mera (fallecida en 2013), y dieron un salto de gigante en 1985, cuando agrupó todas las sociedades bajo la firma Inditex.

Con Rosalía Mera tuvo a su hija Sandra Ortega Mera y a su hijo Marcos Ortega Mera. Tas la muerte de la madre, la primogénita, Sandra, heredó su fortuna y acciones en Inditex, lo que la ha convertido en la mujer más rica de España, después de su padre, con una fortuna de 7.100 millones en 2023. En cuanto a su hijo Marcos, nació con parálisis cerebral, lo que le apartó del negocio y motivó a la familia a fundar Paideia Galiza, una asociación que tiene como objetivo la inclusión a la vida laboral y rehabilitación de las personas con distintas capacidades.

Casado en segundas nupcias con Flora Pérez Marcote (hoy presidenta de la Fundación Amancio Ortega), el fundador de Zara tuvo a su hija y sucesora en el negocio, Marta Ortega Pérez, que desde el 1 de abril de 2022 es presidenta no ejecutiva de Inditex. 

Aunque Amancio Ortega abandonó la presidencia de Inditex en 2011, y no capitanea el día a día, sigue siendo el miembro clave del consejo de administración de Inditex, puesto que preside la sociedad Pontegadea, a través de la cual mantiene una posición mayoritaria en el accionariado de Inditex, y es vocal de la Fundación que lleva su nombre.

Nuevos negocios: inmobiliario, hoteles y renovables 

Lejos de jubilarse, sigue extendiendo sus alas, diversificando sus actividades hacia el sector inmobiliario, las energías renovables y los hoteles boutique. De hecho, su firma inversora Pontegadea es la mayor inmobiliaria española, con una cartera de activos inmobiliarios integrada fundamentalmente por edificios de oficinas, no residenciales, situados en el centro de grandes ciudades en España, Reino Unido, Estados Unidos y Asia.

El tradicional buen olfato de Ortega para los negocios hace que cada uno de sus movimientos cobre interés, porque ya se conoce que, donde pone el ojo, casi siempre logra pingües beneficios. 

A través de Pontegadea Inversiores, ha entrado recientemente con una participación del 49% en proyectos eólicos y fotovoltaicos de Repsol, con el objetivo de desarrollar las energías verdes. También lleva años comprando oficinas, edificios no residenciales y residenciales en España, Estados Unidos, Asia o Reino Unido. Y se ha hecho con edificios de lujo en Nueva York, Chicago o Seattle. 

Tampoco escapan a su ojo inversor los centros logísticos: ha comprado el mayor centro logístico de Amazon en Irlanda, otra plataforma en Holanda (es el casero de Primark), y muy renombrada ha sido la adquisición del centro logístico de los supermercados Walmart en California. En enero de 2024 se ha sabido que ha adquirido otra nave logística cerca de Vancouver.

Una de sus últimas incursiones son los hoteles boutique: según publicó recientemente Diario de Mallorca, Ortega ha comprado dos hoteles de lujo en el casco antiguo de Palma de Mallorca.

Fundación Ortega, en pos de un mundo mejor

La filantropía es una de sus actividades prioritarias. Nacida en 2001, la Fundación Amancio Ortega canaliza la inquietud filantrópica de su fundador y su esfuerzo por crear una sociedad mejor. Todos los proyectos comparten el objetivo de crear oportunidades, y actúa en dos sectores clave: educación y bienestar social. Especialmente relevante es su labor en el campo de las residencias de mayores en Galicia, de las que una ya ha sido entregada a la Xunta, y otras seis están en marcha, todas ellas, financiadas por la Fundación.

Para 2023-27, la cifra de inversión comprometida por la Fundación Amancio Ortega incluye la donación de 30 millones de euros a la Fundación Porque Viven y los convenios de colaboración firmados con Cruz Roja (15 millones de euros), Cáritas (15 millones) y la Federación Española de Bancos de Alimentos (10 millones). 

Toda una vida de trabajo le han hecho merecedor de numerosos premios y distinciones, entre ellos, la Medalla Castelao, la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo (2001) y la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil (2009).