Carmen Quintanilla, una apasionada del mundo rural que visibiliza a las mujeres mayores

 

La redacción de 65YMÁS elige a las 65 personas mayores de 65 años más influyentes de España en 2024. Un total de 65 sénior, verdaderos influencers que no se limitan a un éxito pasajero en redes sociales, sino cuyo ámbito de influencia ha traspasado y sigue traspasando fronteras físicas y generacionales. Y es que para alcanzar el éxito hace falta tiempo, perseverancia y continuo crecimiento, valores todos ellos que vienen de la mano de la experiencia con la que cuentan de sobra los representantes de nuestra lista de mayores de 65 años más influyentes.

Carmen Quintanilla Barba (1954) es conocida por su pasión por el mundo rural, más concretamente en el desarrollo de la mujer, y su trabajo en la Asociación de familias y mujeres del Medio Rural (AFAMMER). Con todo, y a lo largo de su extensa y prolífica trayectoria profesional, ha conseguido llevar la voz de las mujeres mayores a lo más alto de las organizaciones internacionales. 

 

Toda una vida dedicada a visibilizar a las mujeres rurales

Licenciada en Relaciones Laborales, Quintanilla ha sido profesora mercantil, funcionaria del Cuerpo Superior de Organismos Autónomos (INEM) y jefa de la sección de cooperativas en la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. 

En 1982 fundó la Asociación de familias y mujeres del Medio Rural (@AFAMMERmujer) para visibilizar la situación de las mujeres que viven en las zonas rurales de España. Esta asociación, de la que es presidenta desde su creación, fue pionera por su objetivo de que las mujeres rurales dejasen de ser invisibles y tuviesen voz en los foros nacionales e internacionales en busca de la igualdad real de oportunidades. Algo que han hecho estando presentes en Gobiernos, Parlamentos Nacionales, el Parlamento Europeo, la IV Conferencia Mundial de la Mujer de Beijing en 1995 o los diversos Congresos Mundiales de Mujeres Rurales celebrados en Washington, Madrid y Sudáfrica. En 2009 se constituyó, además, en Confederación Nacional de Federación y Asociaciones de Familias y Mujeres del Medio Rural. Con todo, ha logrado convertirse en un referente del movimiento asociativo que integra a mujeres rurales, con más de 180.000 socias y presencia en casi todas las Comunidades Autónomas.

Como presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados, cargo que ostentó desde el año 2011 hasta el 2015, ha impulsado diferentes iniciativas para defender los derechos de las mujeres. Fue igualmente presidenta de la Comisión Mixta para el Estudio del Problema de las Drogas en el Congreso de los Diputados entre 2016 y 2019, vicepresidenta primera de la Comisión de Igualdad en el Congreso de los Diputados entre los años 2004-2011 y 2015-2016, y vicepresidenta de la Comisión de Igualdad y no Discriminación del Consejo de Europa entre el 2011 y el 2015. Desde el año 2000 y hasta el 2019, Quintanilla fue parlamentaria en las Cortes Generales españolas como Diputada y Senadora, así como miembro con status consultivo en el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC) y vicepresidenta de la Unión Europea de Mayores (ESU).

Ha sido, además, la primera española en convertirse en Parlamentaria Honoraria y Miembro Permanente del Consejo de Europa, donde en 2015 presentó un informe sobre igualdad e inserción de las personas con discapacidad, el cual fue aprobado.

 

 

Quintanilla, miembro también de la Plataforma de Mayores y Pensionista (PMP), que forma parte del Comité Asesor de 65YMÁS, destaca por su trabajo como consultora y especialista en políticas de Igualdad, desarrollo rural y sostenibilidad, así como legisladora, articulista y experta en políticas sociales. Igualmente, ha participado en cerca de 2.000 conferencias, jornadas y seminarios, nacionales e internacionales, así como numerosos foros internacionales sobre mujer y desarrollo económico del medio rural. 

De hecho, en 2011 fue ponente de la Ley de Economía Social y Ponente Ley de Titularidad Compartida en las Explotaciones Agrarias, aprobada en mayo de 2011, que fue clave para el reconocimiento de los derechos de las mujeres rurales. Y en 2013 promovió una subcomisión para estudiar la trata de personas, la cual también fue aprobada ese año. 

De su extensa trayectoria, destaca asimismo su participación como miembro del Departamento de Información Pública de Naciones Unidas en 1998 y por ser miembro de la Fundación Cumbre Mundial de la Mujer en 1999.

Con todo, no es de extrañar que su trabajo haya sido galardonado con diferentes premios, como el VII Premio del Observatorio Contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial, que recibió en 2011. Tres años más tarde fue galardonada con el Premio Cope Ciudad Real y en 2017 con el Premio especial del jurado en los premios Compromiso, Clece. Ese mismo año recibió la Medalla de Honor de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa. También fue galardonada con el Premio a la Solidaridad Civil del Consejo Económico y Social de la UE en 2021, el Premio del Día Internacional de la Mujer Rural por su trayectoria en 2022 y la Cruz al Mérito Civil de la Guardia Civil en 2023, entre otros.