Rosa Roch
Rosa Roch es redactora especializada en temas de salud, alimentación y gastronomía.
… saber más sobre el autorCuidar la salud de nuestra piel es cuidar de la salud general del cuerpo pues hace de barrera a la entada de microorganismos protegiéndonos de posibles infecciones. Para que esta “barrera” funcione la piel ha de mantenerse bien hidrata, lo que le dará elasticidad y evitará que se formen grietas o descamaciones, las cuales podrían ser puerta de entrada de las bacterias.
Cuando pensamos en hidratar la piel solemos tener en mente la cara, manos, tronco y piernas, pero acostumbramos a olvidar la hidratación de los pies hasta que en ellos aparecen los primeros problemas. No somos conscientes de la importancia de mantener una buena hidratación de los pies, igual o más importante que la del resto del cuerpo, pues es una zona que, al estar constantemente aguantando el peso del cuerpo y el roce del calzado, necesita de una atención especial que permita caminar correctamente y evitar lesiones por rozaduras.
Por norma general los pies han de hidratarse por la noche. Hacerlo por la mañana y a continuación ponerse los calcetines y los zapatos acabaría mezclando la crema hidratante con la sudoración, creando un ambiente húmedo contraproducente para la buena salud del pie. Para realizar una correcta y profunda hidratación estos son los pasos a seguir:
No todas las cremas son iguales. De la misma manera que no utilizas una crema de cara para hidratar las manos, la crema para los pies ha de ser específica para esta zona del cuerpo. Hay que tener en cuenta que la piel de los talones es 50 veces más gruesa que la de las mejillas, por poner un ejemplo, por lo que necesitará una crema con unas características especiales de hidratación para que sea efectiva.
En este sentido, en el mercado existe una buena variedad de cremas con diferentes niveles de hidratación, un aporte específico de nutrientes, adecuadas para cada tipo de piel, actividad y alteraciones (hongos, pie de atleta, sudoración excesiva…).
Además de hidratar los pies con una crema específica también es importante hidratarlos por dentro. Para ello, es necesario beber agua regularmente, mantener una dieta equilibrada, rica en fruta y verdura y, por supuesto, promover su buena salud, prestándole tanta atención como se les presta al resto del cuerpo.