Ocho formas de mantener el cuerpo caliente en invierno

Las personas mayores suelen tener más frío, ya que su cuerpo contiene menos grasa y están más expuestos a las bajas temperaturas. Los especialistas en geriatría recomiendan que la temperatura en el domicilio no sea nunca inferior a 21 grados, entre otras cosas porque el frío empeora los problemas relacionados con el sistema circulatorio y el sistema respiratorio. Aquí te contamos ocho formas que tienen las personas mayores para mantener calientes en esta época del año.

Calentador de manos eléctrico

Una alternativa a los guantes que puede ayudarte a mantener tus manos calientes son los calentadores de manos eléctricos. Son dispositivos ergonómicos para que puedas agarrarlos perfectamente con las manos y el calor se distribuya uniformemente con solo apretar un botón. Puedes llevarlos a todas partes dentro de tu bolsillo, ya que se cargan fácilmente a través de un cable USB y luego proporcionan horas de calor. También puede utilizarse para recargar otros dispositivos compatibles.

Ropa de cama

Disponer de ropa de cama adecuada es vital para mantenerse abrigado durante las noches frías. Un buen edredón nórdico ayuda a mantener el calor en la cama. Las mantas eléctricas son una opción que proporciona configuraciones de temperatura ajustables para estar en condiciones óptimas para dormir. Otra alternativa son las mantas de lana, que puede lograr un efecto similar cuando se usa en combinación con otras capas de ropa de cama, como los edredones de plumas.

Humidificadores

El aire húmedo suele percibirse más cálido que el seco, de modo que usar un humidificador en casa puede mejorar tu sensación de confort. De hecho, algunos modelos de humidificadores también tienen un ajuste de temperatura cálida. Además, este tipo de dispositivos tiene otros beneficios para la salud, como aliviar la piel seca o ayudar con los síntomas de sequedad en los senos nasales.

Alimentación

Por supuesto, las infusiones, los caldos o las cremas ayudan a regular la temperatura corporal y a que nuestro cuerpo entre en calor. Pero también guisos, potajes, cocidos están entre los platos ideales para que los mayores puedan sobrellevar el frío. En potajes y guisos puedes añadir todo tipo de ingredientes y convertirlos de este modo en un plato único que contenga todos los nutrientes necesarios. En el caso de los guisos, lo más recomendable para los mayores es usar carnes magras y así reducir el exceso de grasas. Las puedes freír previamente un poco en la sartén para mantener su jugo. Si vas a añadir chorizo, morcilla, tocino o costillas es mejor que los frías de forma íntegra previamente para que su grasa no se incorpore al guiso. Puedes complementar el plato con arroz o patatas, si lo quieres más contundente, o con verduras, hortalizas o setas, si lo quieres más ligero.

Previsión del tiempo

En ocasiones el clima puede ser imprevisible, por lo que si debemos salir de casa conviene no solo estar atento a la previsión meteorológica, sino también verificar el clima todas las mañanas para saber qué podemos esperar del día.

Vestimenta

Abrigarse con diferentes capas de ropa es la forma más inteligente para protegerse del clima más frío, más que el hecho de llevar una sola pieza, por gruesa que sea y por muy caliente que nos mantenga. Y en el caso de la gente mayor, encima puede proporcionar un acolchado adicional en caso de una caída.

Calentadores portátiles

El comedor puede no ser la pieza más caliente de la casa. Las habitaciones más pequeñas concentran mejor el calor y son más fáciles de resguardar de las corrientes de aire. Cubrir el suelo con alfombras aísla en general del frio y mantiene mejor el calor, y una habitación pequeña requiere menos superficie de suelo para calentar. Con todo, si debemos pasar muchas horas del día en una habitación es fácil que acabemos teniendo sensación de frío, por lo que un calefactor económico portátil puede proporcionarnos el calor instantáneo que necesitamos en esa pequeña habitación.

Mantenerse activo

Por supuesto, el movimiento nos ayuda a mantenernos calientes. Realizar las tareas de casa o pequeños ejercicios físicos, que además te ayudarán a ponerte en forma, es sin duda una de las formas más fáciles y menos costosas para que las personas mayores se mantengan calientes durante el invierno. Algunos ejercicios pueden ser muy simples y se pueden realizar incluso estando sentados.