Juan María León
Practicopedia
¿A qué temperatura debes mantener tu frigorífico?
Se debe tener en cuenta que puede variar por la temperatura ambiente y el uso
Mantener una temperatura adecuada en tu frigorífico es algo esencial para que tus comidas no se echen a perder. Sin embargo, pocas personas saben cuál es la temperatura ideal si tu frigorífico no es automático.
Conserva tus alimentos y ahorra energía
La nevera es un electrodoméstico que está funcionando durante las 24 horas del día y todos los días, por lo que consume una energía de entre 120 y 240 kWh, dependiendo de la potencia y eficacia del equipo. Aunque este gasto no es excesivo, la inestabilidad y aumento del precio de la energía hacen que se intente ahorrar al máximo y no desperdiciar ni un kWh.
El objetivo principal de los frigoríficos es mantener los alimentos en un buen estado, por lo que el ahorro de energía no debe afectarle en nada. Esto no significa que haya que seleccionar la temperatura más fría que se pueda, ya que se pueden echar a perder algunos alimentos, mientras se despilfarra energía. Además, cada grado más bajo puede suponer un gasto en electricidad de entre 7 y 10% en la factura de la luz.
¿Por qué es importante ajustar la temperatura?
Mantener una temperatura correcta en el interior del frigorífico es fundamental para varias tareas:
- Garantizar una perfecta conservación de los alimentos.
- Reducir el consumo de energía.
- Alargar la vida del electrodoméstico.
En la mayoría de los modelos, sobre todo en los antiguos, la temperatura se ajusta de manera automática, pero también puede darse que en ocasiones sea más alta o bajo de lo que debería o que la temperatura externa pueda influir en la del interior del frigorífico.
¿Qué influye en la temperatura ideal?
- La temperatura exterior: en verano, los cambios climáticos, como las olas de calor, pueden influir en la nevera. A medida que sube la temperatura fuera, la temperatura interior del frigorífico también cambiará.
- El uso: los hábitos de cada persona, que además cambian a lo largo del año, también influyen. En verano, se suele abrir más la nevera en busca de agua fresca. Si se mantiene abierta o introduces alimentos calientes, la temperatura interna aumentará y empeora la conservación de los alimentos frescos, lo que puede favorecer que se desarrollen bacterias, mohos y microorganismos nocivos. Para evitarlo, mantén tu nevera bien ordenado.
Clases climáticas de los frigoríficos
Los fabricantes también saben que las temperaturas exteriores pueden variar mucho según la época del año y la zona en la que vivas. Por eso fabrican frigoríficos de distintas clases climáticas, según el rango de temperaturas en el que funcionan mejor. Hay 4 clases climáticas, SN, N, ST, T y estas son las temperaturas que les corresponden:
- SN (Sub-Normal): Preparado para funcionar con un intervalo de temperatura exterior de 10ºC a 32ºC.
- N (Normal): Preparado para funcionar con un intervalo de temperatura exterior de 16ºC a 32ºC.
- ST (Sub-Tropical): Preparado para funcionar con un intervalo de temperatura exterior de 16ºC a 38ºC.
- T (Tropical): Preparado para funcionar con un intervalo de temperatura exterior de 16ºC a 43ºC.
En España, la mayoría de los frigoríficos son de clase N (Normal) o ST (Sub Tropical). Se debe tener en cuenta que varía según la temperatura que tengas en la cocina, no en la calle. Por ello, no suelen funcionar bien por debajo de los 16 ºC.
¿Cuál es la temperatura interna ideal?
- Para conservar mejor los alimentos con sus propiedades y frescura durante más tiempo, la temperatura ideal en el frigorífico no debe superar los 5°C.
- Los cajones específicos para pescados y carnes deben estar a una temperatura no superior a 2°C.
- La temperatura del congelador, por el contrario, tiene que oscilar entre un mínimo de -24° y un máximo de -18°.
Estas son las recomendaciones generales, no obstante, conviene que leas el manual de tu equipo y sigas las recomendaciones del fabricante.
Las recomendaciones de los fabricantes
Las empresas fabricantes de los frigoríficos más vendidos de España recomiendan que las temperaturas:
- Balay: Recomiendan que la temperatura del frigorífico sea de 4ºC, aunque si la temperatura ambiente supera los 32ºC, se puede reducir un poco. Sin embargo, si la temperatura es menor a los 16ºC, se debe aumentar un poco más. Por otra parte, se recomienda que la temperatura del congelador sea de -18ºC.
- Beko: Para la nevera también se debe mantener los 4ºC, pero se puede reducir hasta 2ºC siempre que no esté suficientemente frío debido a la temperatura ambiental o a la apertura y cierre de la puerta. El congelador debe mantenerse en -18ºC, aunque si la temperatura ambiente es de 30ºC se puede reducir un poco más.
- Bosch: La temperatura recomendada para la nevera es de 4ºC y la del congelador de -18ºC.
- Candy: En condiciones normales (primavera y otoño) la temperatura del frigorífico debe ser de 5ºC y del congelador -18ºC. Por otra parte, en verano se aconseja fijar la temperatura en 5 o 6ºC la nevera y, en verano, en 4 o 5ºC.
- LG: La temperatura para el frigorífico debe ser de 3ºC y del congelador de -18ºC.
- Samsung: La temperatura para el frigorífico debe ser de 3ºC y del congelador de -19ºC.
¿Cómo regular la temperatura de la nevera?
La nevera se regula a través de un selector, en la mayoría de los casos. Estos selectores pueden ser electrónicos o manuales:
- Selector electrónico: Según el aparato, puede tener un solo selector, que controle la nevera y el congelador, o uno para cada uno de manera independiente. Los números suelen variar de 1 a 7ºC en el frigorífico y de -14 a -25ºC el congelador.
- Selectores manuales: Se da en los modelos más antiguos y es una rueda que muestra los números del 1 al 5 (aunque puede llegar hasta 6), pero estos no son los grados, corresponden a la intensidad del frío: cuanto más alto sea el número, más enfría el electrodoméstico.
Dependiendo de la temperatura exterior, según la época del año, habrá que seleccionar un nivel u otro:
- En verano la nevera necesitará generar más frío, sobre todo en los climas más cálidos y durante olas de calor, por lo que habrá que poner el termostato más alto.
- En invierno, no hará falta que esté tan fuerte.
- No obstante, conviene tener en cuenta que estos datos variarán según la ubicación en la que nos encontremos, no es lo mismo un verano en Murcia que en Cantabria, y lo mismo ocurre en invierno. Hay que tener en cuenta también si hay alguna fuente de calor cercana a tu frigorífico, algo que debes procurar evitar.
¿Qué hacer cuando te vas de vacaciones?
En el caso de que vayas a abandonar el domicilio por un viaje, algunos modelos cuentan con la función de “Vacaciones”. Con esta modalidad, el frigorífico se mantiene en funcionamiento, pero a baja temperatura y con una temperatura constante. Una temperatura adecuada para conservar los alimentos y medicamentos.
Si tu frigorífico no la tiene, en caso de ausencias prolongadas, se aconseja vaciar el frigorífico y apagarlo. De esta manera ahorrarás en la factura de la luz y evitarás además el riesgo de sorpresas en caso de averías o apagones.