El bicarbonato de sodio, perfecto para cuidar del jardín

El bicarbonato de sodio, además de su uso para aliviar problemas estomacales, es perfecto para el hogar ya que es un gran limpiador ecológico con infinidad de aplicaciones en cualquier estancia de la casa. Pero los usos del bicarbonato de sodio en la jardinería son menos conocidos y, por ejemplo, no es tan habitual utilizarlo como fertilizante de las plantas o para combatir las malas hierbas, por ejemplo. Compartimos algunas aplicaciones que podemos dar al bicarbonato de sodio para cuidar de nuestras plantas y de nuestro jardín:

Como fungicida

El bicarbonato de sodio ayuda a que las plantas se vuelvan menos ácidas lo que evita el crecimiento de los hongos. Solo tenemos que mezclar una cucharada pequeña de bicarbonato de sodio con unas pocas gotas de jabón líquido en 1 litro de agua y pulverizar la solución sobre las plantas infectadas.

Para fortalecer las plantas

Con la ayuda del bicarbonato se consigue que la fotosíntesis sea mayor por lo que se fortalece la planta y crecen más hojas (al disolverse el bicarbonato en agua produce más dióxido de carbono que es necesario para la fotosíntesis). Así que podemos pulverizar sobre las hojas una mezcla de bicarbonato, agua y vinagre para fortalecerlas,  pero es recomendable hacer una prueba primero solo en unas pocas hojas de la planta porque no a todas les sienta bien este remedio. Si pasadas 24 horas, las hojas están bien, ya se puede aplicar en toda la planta. 

Para eliminar el césped salvaje o malas hierbas

Para este fin debemos poner una gruesa capa de bicarbonato en la hierba que queramos eliminar y en un par de días, esta empezará a secarse. Además, también es útil para las malas hierbas que crecen entres las juntas de las baldosas. Solo tenemos que verter bicarbonato de sodio en las grietas donde aparecen las malas hierbas. El bicarbonato de sodio por sí solo debería matar cualquier mala hierba y evitar que vuelvan a brotar otras nuevas.

Contra los insectos no deseados

El bicarbonato también nos servirá para mantener lejos de nuestro jardín a las hormigas, babosas o cucarachas, siendo una forma segura de solo tener a los insectos beneficiosos cerca. Para conseguirlo, esparcimos un poco de bicarbonato en la tierra de nuestro jardín.

Y también

• Si tenemos un pequeño huerto, el bicarbonato puede servirnos para endulzar los tomates espolvoreando una pequeña cantidad en la tierra alrededor de las tomateras para reducir los niveles de acidez (pero sin llegar a tocar las plantas)
• Nos ayudará a mantener frescas las flores cortadas si añadimos una cucharadita al agua del jarrón. 
• Permite eliminar el mal olor del compost con solo espolvorearlo alrededor. 
• Y, por último, es de gran ayuda para limpiarnos las manos sucias tras una sesión de trabajo en el jardín.