Qué debe tener el botiquín de primeros auxilios de nuestra casa

Según datos de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria más del 90% de las lesiones accidentales en los hogares son traumatismos casi siempre leves (contusiones, heridas o esguinces) o siete de cada diez quemaduras ocurren en el hogar. Disponer en casa, por tanto, de un botiquín bien provisto para atender estas lesiones leves o para hacer una primera cura antes de acudir al médico es fundamental. 

Además, no es pocas ocasiones, ha sucedido aquello de ir a echar mano al botiquín y que juste nos falte aquello que necesitamos. Así pues, hagamos los deberes y revisemos todo lo que no puede faltar en nuestro botiquín para que cualquier imprevisto nos coja preparados:

• Jabón líquido neutro para lavar bien las heridas. 
• Desinfectantes. El alcohol de farmacia es un buen desinfectante, pero como escuece será mejor que lo utilicemos sobre piel sana como preventivo o para desinfectar las tijeras o las pinzas (más adelante trataremos estos elementos del botiquín). Así, para heridas es preferible disponer de una solución antiséptica, que desinfecta muy bien y no escuece.
• Guantes estériles como medida preventiva para no entrar en contacto directo con la herida en caso de sangre. Habrá que tener en cuenta que no sean de látex para evitar posibles casos de alergia. 
• Gasas estériles que se pueden usar para limpiar una herida así como para cubrirla después de limpiarla.
• Algodón, un rollo de esparadrapo, vendas y una caja de tiritas para heridas pequeñas.
• Tijeras y pinzas. Las tijeras mejor si son de punta redondeada y, al igual que las pinzas, no deben usarse para nada más. Las pinzas de depilar nos serán muy útiles para extraer astillas o algo pequeño que se haya clavado en la piel. Ambas se deben desinfectar cada vez que se usen (antes y después). Por otra parte, tener una lupa en el botiquín puede sernos de utilidad para las heridas pequeñas. 
• Termómetro que siempre habrá que limpiar con alcohol antes y después de usarlo.
• Suero fisiológico para limpiezas nasales y oculares.
• De cara al verano es recomendable tener en el botiquín cremas o toallitas para calmar las molestias de las picaduras de insectos.
• Ácido acetil salicílico, paracetamol o ibuprofeno para la fiebre y dolor
• Antiácidos para aliviar malestar del estómago
• Crema antibiótica para poner en heridas pequeñas después de curarlas y crema para quemaduras leves.
• Y, ante la situación actual de pandemia debido al Covid-19, es conveniente sumar al botiquín básico mascarillas quirúrgicas o FFP2 y solución hidroalcohólica para manos.

Una vez que ya tengamos todos los elementos de la lista, faltará que revisemos, al menos un par de veces al año, el contenido del botiquín para retirar aquellos productos o medicamentos caducados, deteriorados o que no se usen y deshacernos de ellos correctamente. Además, no hay que olvidar llevarnos el botiquín, o una versión adaptada, en nuestros viajes o de vacaciones.

Por otra parte, es fundamental guardar el botiquín fuera del alcance de los niños. Esto hay que tenerlo siempre en cuenta, aunque en nuestro hogar ya no vivan niños pequeños para evitar cualquier posible accidente si tenemos alguna visita de pequeños.

Y, por último, mejor corregir algo que la mayoría hacemos mal como es guardar el botiquín en el baño. Ni este ni la cocina son lugares adecuados porque en ellos se producen cambios bruscos de humedad y de temperatura. El botiquín debe estar en un sitio fresco, seco, limpio y preservado de la luz.