Toni Esteve
Practicopedia
Cómo comprobar si un SMS que he recibido de mi banco es auténtico
Cuidado con los que nos dirigen directamente a la página de nuestra entidad
Los bancos, por norma general, no nos van a enviar mensajes SMS (servicio de mensajería para textos cortos que se envían entre teléfonos móviles) ni correos electrónicos que contengan enlaces para dirigirnos a sus páginas web o para solicitarnos ninguna información confidencial. Un ejemplo de mensaje SMS que sí solemos recibir de los bancos es aquel en el que nos envían una clave o contraseña para poder continuar realizando una operación (por ejemplo una compra por Internet). Pero en estos casos se trata de una respuesta a una acción iniciada por nosotros y no una iniciativa de la entidad financiera.
Ante cualquier duda, una norma de seguridad es acceder a la página web de nuestro banco escribiendo directamente su dirección en la barra de nuestro navegador, y nunca a través de un enlace que nos haya llegado a través de un SMS o cualquier mensaje de texto.
Otra buena práctica, antes de escribir cualquier dato personal o contraseña y asegurarnos de que lo vamos a hacer en la página legítima de nuestra entidad financiera o servicio en línea, y no en una copia falsa de la misma, es la siguiente: en la barra del navegador, arriba, a la izquierda de la dirección web de la página en la que estamos encontraréis el dibujo de un candado. Si pincháis en ese icono, podéis ver información del certificado de la empresa a la que estáis accediendo y verificar su autenticidad. El mensaje que nos aparece nos informa, además, de que la conexión es segura y de que “tu información (por ejemplo, las contraseñas o los números de tarjetas de crédito) es privada cuando se envía a este sitio web”.
Si en lugar del dibujo de un candado, al lado de la dirección web nos aparece un icono con la “i” de información dentro de un círculo, significa que ese sitio web no utiliza una conexión privada. Es decir, que es posible que otro usuario pueda ver o cambiar la información que envías o recibes a través de este sitio web”.
Pagos no seguros
Por último, si el dibujito que vemos en la barra del navegador es un triángulo rojo de peligro, nos están indicando que el sitio al que hemos accedido no es seguro o directamente es peligroso. En este caso, nuestro navegador nos está recomendando que, si es posible, no utilicemos esa página web o que al menos no introduzcamos en ella información personal ni sensible, puesto que “la conexión de este sitio web tiene algún problema grave de privacidad. Es posible que otro usuario pueda ver la información que envías o recibes a través de este sitio”. Obviamente, en este supuesto cualquier pago no sería seguro.
En algunos casos extremos, puede aparecer en nuestro dispositivo una advertencia de color rojo que ocupe toda la pantalla. En ese caso, es evidente que esa página no cuenta con un certificad de seguridad que demuestre su identidad a los navegadores como Chrome. Es muy probable que tu información privada corra peligro al navegar esa página.
Por cierto, del mismo modo que los bancos no nos van a enviar mensajes SMS solicitándonos información confidencial, tampoco lo van a hacer a través de una llamada telefónica. Las entidades bancarias no van a usar nunca estos canales para para pedirnos nuestras contraseñas y, por tanto, tampoco se debe dar información de este tipo por teléfono.