Cómo conseguir que un ramo de flores siga perfecto por más tiempo

Una de las cosas que debemos tener en cuenta al comprar flores naturales es precisamente que hemos adquirido un producto natural en constante evolución y que no permanecerá intacto por mucho tiempo. Saber disfrutar de las flores en cada etapa, cuando se abren, cómo cambian, cómo caen los pétalos, de su evolución…es parte de su belleza.

Ahora bien, es verdad que hay una serie de recomendaciones que podemos seguir para que nuestro ramo permanezca fresco durante más tiempo. Cuando compramos flores y las llevamos a casa, uno de los errores más comunes que cometen las personas es olvidarse de cortar los tallos. Usa unas tijeras de jardín y recorta unos centímetros cada tallo en ángulo. Ello permite una mejor ingesta de agua, ya que así los tallos no se apoyan en el fondo del jarrón. Después del corte inicial, asegúrate de volver a recortar el ramo a los pocos días.

También debes quitar las hojas que quedan debajo de la línea de agua. No solo hará que el ramo se vea mejor, sino que también evitará el crecimiento de bacterias. Algunas flores, como las rosas, tienen pétalos de protección que son los dos o tres pétalos más externos de la flor. Quitarlos permitirá que la flor se abra por completo. Después de la poda inicial, debes revisar tus flores diariamente en busca de hojas y pétalos muertos o sueltos para evitar que se pudran.

El lugar importa

Otra consideración es poner las flores en el lado más fresco de la casa ayudará a que presenten un aspecto más saludable. También debes evitar áreas como ventanas abiertas, rejillas de ventilación de calefacción o refrigeración y ventiladores de techo, ya que pueden hacer que las flores se deshidraten rápidamente. Tampoco debes poner el ramo cerca de la fruta porque cuando madura libera pequeñas cantidades de gas etileno que pueden reducir la longevidad del arreglo floral.

Regar las plantas con agua de lluvia es muy recomendable, pero en el caso de las flores cortadas probablemente sea mejor tenerlas en el agua del grifo porque tiene menos bacterias. Esto ayudará a que las flores se vean bien por más tiempo. De hecho, el agua del jarrón debe ser fría y fresca y nueva cada día.

Otro punto para tener en cuenta es mantener las flores alejadas de la luz solar directa. De hecho, cuanta menos luz llegue al tallo mejor; de ahí que el jarrón donde se pongan las flores también influirá. Si tienes un jarrón de cerámica o uno que no sea transparente, ayudará a que dure más la flor, porque no entra luz en el agua.

Una última cosa es intentar comprar flores de temporada: las orquídeas, dalias y crisantemos en otoño; y las anémonas, margaritas, claveles y gerberas en invierno; los tulipanes, violetas, narcisos, azaleas y jazmín en primavera; las magnolias, gardenias, freesias y lilas en verano.