Carlos Blanco Cocho
Practicopedia
Cómo dar de baja de los servicios de telefonía a un fallecido
Las compañías de telefonía no pueden cobrar ningún tipo de penalización
Después del duelo por la pérdida de un familiar, hay una serie de gestiones que hay que llevar a cabo para evitar contratiempos. Hay que obtener el certificado de defunción, realizar la inscripción del fallecimiento en el Registro Civil o comenzar la tramitación del testamento.
Uno de los más importantes es revisar todos los contratos de la persona fallecida e ir gestionando todas las finalizaciones. Si es el titular de un acuerdo de telefonía, hay que darle de baja de esos servicios de manera particular.
Documentación necesaria
De hecho, el proceso para ello es algo distinto del resto de contratos. Dependiendo tanto del tipo de acuerdo como de la operadora los pasos a seguir serán unos u otros. Aquí te resumimos lo que hay que hacer en cada uno de los casos:
- Movistar: tal y como indica la compañía en su página web, existen dos opciones. Puedes tanto llamar a su número de atención al cliente o mandar un whatsapp al teléfono de esta página.
- Vodafone: en esta compañía advierten que el proceso puede llevar dos días hábiles. Se les puede contactar tanto por el servicio telefónico de atención al cliente como por correo postal.
- Orange: se les puede poner en conocimiento del suceso a través del número de atención al cliente o de correo postal.
En todos estos casos se requiere de, en primer lugar, el certificado de defunción. En Orange, además, exigen una copia del DNI por ambas caras del titular de la línea.
Sin penalización por permanencia
Si mueres, tu telefónica llama a tu familia para que paguen. Rompiste permanencia https://t.co/gF96U7HXHq #TuitSerio pic.twitter.com/GoImiT4A1a
— OCU (@consumidores) January 23, 2016
Tal y como recuerda la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), cuando un familiar fallece "las deudas se heredan, las penalizaciones no". Aplicado al caso que nos atañe, quiere decir que las compañías telefónicas no tienen ningún derecho ni legitimidad para exigir una indemnización a sus familiares.
De esta manera, "el contrato se cancela y ambas partes quedan liberadas", por lo que no se tiene que mantener la línea. En cambio, las deudas que tuviera sí se heredan y pasan a los familiares.