Clara González
Practicopedia
Así puedes mantener los grifos de tu casa siempre limpios
Es importante no solo por higiene, sino también para que duren más tiempo
Mantener los grifos de la casa limpios es crucial no solo para asegurar una higiene adecuada, sino también para prolongar la vida útil de estos elementos esenciales del hogar. La acumulación de minerales, moho y bacterias en los grifos puede afectar la calidad del agua y representar un riesgo para la salud. Además, la limpieza regular previene obstrucciones y el desgaste prematuro, garantizando un flujo de agua eficiente y seguro.
Algunas formas efectivas para mantener los grifos en las mejores condiciones incluyen la limpieza diaria con agua y jabón, el uso del vinagre blanco para eliminar depósitos de cal, el bicarbonato de sodio para manchas difíciles y los limpiadores comerciales para metales. Aquí te explicamos cómo llevar a cabo cada uno de estos trucos de limpieza.
Limpieza diaria de los grifos con agua y jabón
Para este paso básico de limpieza necesitarás agua tibia, jabón líquido suave, un paño o una esponja.
En primer lugar, deberás mezclar el agua tibia con un poco de jabón líquido. Con el paño —preferentemente suave—, enjuaga bien el grifo a partir de esta mezcla. Finalmente, emplea un paño limpio para secarlo. Así evitarás que las manchas de agua permanezcan en la superficie.
Vinagre blanco para eliminar depósitos de cal
En este caso, necesitarás un paño o una toalla de papel, vinagre blanco, un cepillo de dientes viejo o una esponja y agua.
Primeramente, remoja el paño o toalla en el vinagre blanco y envuélvelo alrededor del grifo. Una vez hecho esto, déjalo actuar durante 30 minutos.
Pasado este tiempo, frota suavemente el grifo con el cepillo de dientes o con la esponja. Enjuaga con agua y seca con un paño.
Bicarbonato de sodio para manchas difíciles
Para este remedio también deberás contar, además del bicarbonato de sodio, con agua, un paño o un cepillo de dientes.
Haz una pasta con el bicarbonato de sodio y el agua. Aplica la pasta en las áreas manchadas del grifo y frota suavemente con un paño o un cepillo de dientes.
Una vez hecho esto, enjuaga bien y seca con un paño limpio.
Limpiadores comerciales para metales
En los supermercados o tiendas especializadas también tienen a la venta productos específicos para limpiar grifos de cromo, acero inoxidable o bronce.
A la hora de usarlos, es importante seguir las instrucciones del fabricante y asegurarse de enjuagar bien para eliminar cualquier residuo del limpiador.
Así y todo, más allá de la limpieza en profundidad de los grifos que se debe llevar a cabo frecuentemente, es importante mantener la higiene diaria de los elementos del hogar.
En el caso de los grifos de la cocina o del baño, después de cada uso se recomienda secarlos con un paño suave para evitar la acumulación de agua y las manchas de cal.