Anna Blanco
Practicopedia
Así debes recalentar la comida para que quede como recién cocinada
Si lo hacemos correctamente conseguiremos que no pierda su sabor y textura
Lo habitual es que a menudo necesitemos recalentar alimentos ya sea porque vamos a comer sobras de otro día que habíamos congelado, no queramos despilfarrar comida o simplemente porque hemos cocinado tiempo antes de sentarnos a la mesa. Sea cual sea el motivo, es normal que calentemos la comida, pero hemos de hacerlo correctamente para que no pierda su sabor y podamos disfrutarla como si estuviera recién cocinada. Eso sí, antes de ver las formas idóneas para recalentar nuestros platos, debemos tener en cuenta una serie de consideraciones:
- Solo debemos recalentar sobras que hemos almacenado correctamente. Para ello, cuando cocinamos y queremos guardar para otro día, debemos dejar enfriar la comida completamente-bien tapada- antes de guardarla en la nevera o en el congelador.
- Recalentar un plato no es volver a cocinarlo por lo que, sea cual sea el método que utilicemos, debemos hacerlo a baja potencia para que la comida no quede seca o blanda.
- Se recomienda recalentar los alimentos una sola vez, con el fin de evitar la proliferación de bacterias y, por tanto, provocar problemas de salud. Lo mejor es dividir la comida en porciones si tenemos una gran cantidad y calentar solo la que vayamos a comer.
- Además, debemos tener en cuenta que cuantas más veces recalentemos un plato, más cualidades organolépticas (color, sabor, olor y textura) va a ir perdiendo.
Para calentar carnes o pescados sin guisos
Si vamos a recalentar carnes o pescados sin salsa debemos añadir un componente líquido o graso que nos ayude a recomponerla ya que recalentar reseca. Podemos utilizar salsa de tomate, un poco de caldo o, por supuesto, aceite. De esta manera, lo mejor para estos casos es añadir el componente líquido en la sartén y, cuando esté caliente, añadir los alimentos que queremos recalentar. Este sistema también es válido para platos salteados.
Para calentar guisos de carne o pescado
Los platos con salsa se pueden calentar con resultados muy buenos siempre que lo hagamos en una sartén o cazuela, tapada y a fuego lento para evitar que se cocinen de nuevo. Además, debemos ir removiendo la preparación para que se caliente de manera homogénea.
Para calentar platos gratinados, pasteles salados o pizzas
Para este tipo de platos, como una quiche o pizzas, la mejor opción para recalentar es utilizar el horno, pero siempre a una temperatura no mayor de 100 grados. Así conseguimos que la comida se caliente, pero no que se seque o continúe cocinándose.
Para calentar verduras y arroces
A la hora de recalentar los platos de verduras o aquellos alimentos que contienen almidón, como es el arroz o la pasta, es mejor si utilizamos una vaporera para que no se pasen o apelmacen. Y es que el vapor de agua consigue que el calor vaya penetrando en los alimentos y mantener su textura y sabor.
Y si utilizamos el microondas
Es el método más rápido para calentar comida, pero con resultados no siempre buenos ya que la comida se calienta de forma desigual. Así que, si optamos por usar microondas, debemos utilizar una potencia baja (300-350 vatios) durante unos 3 minutos por ración y siempre con la comida bien tapada. Además, es bueno repartir el tiempo en dos partes para remover la comida en medio del proceso.