¿Cómo se reciclan las cápsulas de café? Nunca al amarillo

Si habitualmente haces el gesto de tirar las cápsulas utilizadas de café al contenedor amarillo porque crees que son envases, debemos decirte que se trata de un grave error. Entonces, te preguntarás ¿dónde se tiran? A continuación, te explicamos cómo se reciclan estas cápsulas.

La demanda de estos pequeños contenedores monodosis de café en polvo en su interior ha aumentado considerablemente en los últimos años en nuestro país.

En este sentido, hay datos que señalan que 7 de cada 10 españoles utilizamos cápsulas de café a diario y que al año en nuestro país nos bebemos unas 40.000 toneladas de café solo en este formato.

Del lado del reciclaje, hay estudios como los de la productora de envases biodegradables Halo que señala que cada minuto se tiran alrededor de 13.500 cápsulas de aluminio y plástico al cubo de residuos, lo que indica que, en un año, hay más de siete mil millones de cápsulas que tardarán al menos un siglo en degradarse.

Por ello, reciclarlos correctamente es fundamental para el medio ambiente.

¿Qué podemos hacer con estos residuos?

Las cápsulas de café no se tiran al contenedor amarillo. Son los propios fabricantes los que establecen puntos de recogida en sus tiendas, grandes superficies, mercados, hipermercados, puntos limpios y otros.

Por ello, lo recomendable es acumular todas las cápsulas utilizadas en una bolsita para llevarlas al punto de recogida de cada fabricante.

En el caso de que no encuentres un punto de recogida para este tipo de desechos puedes tirarlos al contenedor de restos, aunque lo aconsejable es buscar un punto limpio para cápsulas.

En el caso de que tus cápsulas estén fabricadas con materiales de plástico 100% y, siempre que se queden vacías tras su uso, puedes tirarlas al contenedor amarillo. En caso contrario, es necesario desecharlas en un punto de recogida.

Cápsulas reutilizables

Si apuestas por lo ecológico existen cápsulas de café reutilizables.

Para su uso tan solo debemos rellenarlas con unos 5 o 6 gramos de café y, a continuación, las pondremos en la cafetera como de costumbre. Tras su uso, se desechan los restos del café, se limpia la cápsula y la almacenamos para próximos usos.

Este tipo de cápsulas reutilizables están disponibles en cualquier supermercado e incluso es posible encontrarlas por internet. La mayoría son compatibles con las cafeteras más habituales.

De este modo, evitamos generar tantos desechos procedentes del café, así como a contribuir con el medio ambiente.