Manuela Martín
Practicopedia
¿Cómo sería la vida sin poder imaginar o recordar? Hay personas que no tienen imágenes mentales
A este trastorno se le llama afantasía y lo padecen entre un 2 y un 5% de la población
¿Alguna vez te has planteado cómo sería la vida si no pudieses imaginar nada? Pues por extraño que parezca hay personas que sufren este fenómeno conocido como afantasía.
¿Cómo sería no poder recordar cómo era ese familiar al que tanto querías y que falleció? ¿Te imaginas andando por la playa? Preguntas como estas son las que se realizaron durante un estudio dirigido por el Profesor Adam Zeman de la Universidad de Exeter en el que descubrieron que algunas personas no pueden visualizar ni crear imágenes mentales.
Si nos piden cerrar los ojos e imaginar una situación como por ejemplo disfrutar de un atardecer con una copa de vino, lo más probable es que, tal y como ocurre a la mayoría de las personas, hayas vivido una situación así o no, seas capaz de imaginártela y evocar esa situación en tu cerebro. Sin embargo, las personas con afantasía son incapaces y tienen dificultades para recordar, imagina y soñar.
Se trata de un fenómeno poco estudiado aún pero que ha despertado gran interés entre los neurólogos para entender cómo funciona nuestro cerebro.
Hay datos que apuntan que en el mundo este problema puede llegar a afectar a entre un 2 y un 5 por ciento de la población.
Dormir sin soñar
Las personas con afantasía sueñan menos. Es decir, la afantasía es un trastorno que no solo ocurre cuando hacemos a nuestro cerebro imaginar de manera voluntaria, sino que durante la fase de sueño involuntaria nuestra mente crea sueños, pero de una manera poco vívida y poco frecuente.
Es decir, cualquier función cognitiva que requiera de un componente visual, ya sea voluntario o involuntario se verá afectado por la afantasía en aquellas personas que la sufren.
Diferentes tipos de afantasía
Un estudio publicado en la revista Scientific Reports en la que participaron unas 250 personas con afantasía concluyó que hay personas con diferentes grados de este trastorno, pues entre los participantes había quien no era capaz de imaginar sonidos, el tacto, el movimiento, el gusto, el olor o las emociones.
Respuestas por conocimiento
Aquellas personas que sufren afantasía, ante ciertas preguntas responden de memoria. Es decir, si les preguntamos ¿qué es más blanca la nieve o las nubes? No son capaces de imaginarlo en su mente para comparar ambos conceptos y dar una respuesta. Simplemente responden porque lo sabe o no.
Este trastorno puede ser difícil en el día a día de algunas personas llegando a tener problemas emocionales de ansiedad, frustración o soledad. Sin embargo, para la gran mayoría es algo que no les afecta.