Olga Selma
Olga Selma es redactora especializada en temas de salud, alimentación y consumo.
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Miércoles 13 de abril de 2022
ACTUALIZADO : Miércoles 13 de abril de 2022 a las 11:00 H
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Especialmente en la vejez, muchas personas sufren de sequedad en los ojos; ello implica que la córnea y la conjuntiva de los ojos ya no están lubricadas con el suficiente líquido, lo que puede resultar doloroso.
Cuando están sanos, los ojos están protegidos por una película lagrimal de estructura compleja que contiene nutrientes y antígenos y actúan como barrera ante los gérmenes. Con el aumento de la edad, este sistema sensible a menudo se desequilibra. Puede haber dos razones para que los ojos se sequen: una es que la composición de la película lagrimal cambia y/o disminuye la cantidad de líquido de lagrimal, de modo que ya no hay suficiente líquido para mantener los ojos húmedos.
Al hacernos mayores, ambas causas suelen aparecer juntas: la producción de lágrimas disminuye y cambia la composición de la película lagrimal. Esto se debe en parte al hecho de que las personas mayores a menudo padecen ciertas enfermedades que favorecen el desarrollo de ojos secos como la diabetes mellitus o reumatismo. Además, las mujeres en la menopausia sufren más de ojos secos debido al cambio hormonal.
El problema, más allá de las molestias y el dolor que supone, es que si los ojos están permanentemente secos durante un período de tiempo prolongado, se puede causar un daño fino en la superficie de la córnea y producirse cicatrices que nublan la visión.
Los casos leves de ojos secos a menudo se pueden tratar con soluciones de lágrimas artificiales de venta libre. Estos se pueden usar con tanta frecuencia como sea necesario para complementar la producción natural de lágrimas. Son recomendables las soluciones de lágrimas artificiales sin conservantes porque contienen menos aditivos, que pueden irritar aún más los ojos. Pero las personas con ojos secos que no responden solo a las lágrimas artificiales deberán ir al médico y tomar medidas adicionales para tratar el problema.
Para tratar la inflamación contribuyente del párpado podemos usar compresas tibias o limpiadores de párpados que nos ayudarán a disminuir la inflamación alrededor de la superficie de los ojos.
Tal y como indica la Asociación de Optometristas Americana podemos intentar mejorar los síntomas del ojo seco con los siguientes consejos:
-Parpadear con regularidad cuando leamos o miremos pantallas, aunque lo ideal es reducir las horas de trabajo con el ordenador o el móvil, así como leer y mirar televisión con poca luz.
-Aumentar la humedad del aire, tanto en el trabajo como en casa, y evitar entornos más secos de lo normal.
-Usar gafas de sol al aire libre para reducir la exposición a los vientos secos y al sol.
-Tomar suplementos nutricionales que contengan ácidos grasos esenciales.
-Evitar deshidratarse bebiendo mucha agua (8 a 10 vasos) todos los días.
-Evitar la toma regular de ciertos medicamentos que pueden provocar sequedad en los ojos.