Verónica Mollejo
Comunidad Valenciana
Aprende a preparar horchata casera para poder disfrutarla durante todo el año
Verónica Mollejo
Foto: Bigstockphoto
Miércoles 11 de septiembre de 2019
ACTUALIZADO : Miércoles 19 de enero de 2022 a las 10:09 H
3 minutos
La horchata de chufa, una bebida refrescante, es originaria de la localidad valenciana de Alboraya
La horchata es, desde hace muchos años, una de las bebidas predilectas del verano y fiel representante de la gastronomía valenciana. Originaria de la localidad de Alboraya, la horchata de chufa, unos pequeños tubérculos que proceden de las raíces de la juncia avellanada, es rica en minerales y vitaminas, entre los que destacan el potasio, el fósforo y las vitaminas C y E. Además, contiene poco sodio, ideal para las personas con la presión arterial alta, y no presenta rastro alguno de gluten, lactosa y caseína.
Esta combinación de nutrientes convierte la horchata en una bebida que facilita la digestión, posee propiedades antidiarreicas, favorece la cicatrización de las heridas, previene la insuficiencia renal, evita la aparición de anemia y ayuda a equilibrar los niveles de colesterol y triglicéridos, entre otras cualidades.
Sin embargo, para aprovechar todos estos beneficios, lo mejor es preparar tu propia remesa de horchata. De esta forma, evitas la presencia de sustancias artificiales y nocivas para la salud e incluyes únicamente ingredientes 100% naturales, responsables de ese amplio abanico de virtudes. Bajo esta premisa, ¿qué receta debes seguir para hacer horchata casera?
Aprende a hacer horchata, paso a paso
Ingredientes:
- 250 gr de chufas de Valencia
- 80 gr de azúcar glas
- 1 litro de agua fría
Comienza poniendo las chufas en un bol con agua, deben quedar totalmente cubiertas, y déjalas en remojo un día entero en el interior del frigorífico. Acuérdate de cambiar el agua del recipiente, al menos, un par de veces. Cuando haya pasado este tiempo, vierte las chufas en un escurridor, enguágalas con un chorro de agua y déjalas que pierdan la humedad. A continuación, tritúralas con ayuda de una batidora eléctrica y acompañadas de la mitad del agua, pues así adquirirán una consistencia más densa.
Una vez tengas la pasta, cuélala con una malla, una gasa o incluso un filtro de los que utilizas para hacer café. Lo importante es colar el líquido sin que caiga ningún grumo. Para sacarle el máximo rendimiento, aprieta bien la mezcla. Después, vuelve a triturarla con el resto del agua y repite este último paso para obtener más horchata. En esta ocasión, puedes incluir hielos si tienes pensado consumirla al momento, pero solo si el electrodoméstico empleado es compatible.
Finalmente, añade al líquido resultante azúcar glas al gusto e introdúcelo directamente en la nevera para que puedas degustarlo bien fresquito. Eso sí, debes tener en cuenta que la horchata casera suele durar en perfecto estado alrededor de dos días, por lo que no hagas mucha cantidad y si es así, puedes congelarla para tomarla más adelante.