Mariola Báez
Cómo
Cómo comer con palillos chinos y no morir en el intento
Esenciales en la gastronomía asiática, dominar su uso es solo una cuestión de práctica
China, Japón, Corea… Estos son algunos de los países en los que la comida se lleva del plato a la boca utilizando palillos. Son un utensilio muy simple, generalmente hecho de madera de bambú, y se dice que las recetas propias de la gastronomía oriental saben mejor si se recurre a ellos en lugar de los cubiertos a los que estamos acostumbrados. Si la próxima vez que vayas a un restaurante chino quieres comer con palillos, solo tienes que aprender a cogerlos correctamente y practicar un poco para que no se te escape ni un solo bocado. ¿Cómo puedes hacerlo?
Cómo se colocan los palillos para poder comer
Al principio resulta algo complicado, pero si eres capaz de sujetar los palillos de la manera adecuada, el resto saldrá casi sin esfuerzo. Una mala posición es el gran error que solemos cometer los comensales inexpertos. Afortunadamente, existen distintas maneras de colocar los palillos en tu mano, pero la más sencilla es la siguiente:
- El primer palillo se debe apoyar en la base del dedo índice, dejando que la zona más cercana a la punta descanse entre la yema de este mismo dedo y la del corazón. El segundo palillo se coloca por debajo, justo en el ángulo que forma la separación entre el pulgar y el índice, haciendo que se apoye en el dedo anular.
- Lo ideal es sujetar los palillos de manera que tus dedos queden, al menos, a un tercio de distancia de la punta. Aunque hay personas que prefieren ponerlos más o menos cerca porque les resulta más cómodo.
- A la hora de hacer las primeras pruebas, debes intentar mover únicamente el palillo que queda situado en la zona externa de la mano. El de abajo, en principio, no tiene que moverse y es importante recordar que será el dedo anular el que se encargue de mantener ambos palillos separados y en paralelo, ya que las puntas nunca deben cruzarse.
- Además de su uso correcto, conviene conocer las normas básicas que implica el protocolo en la mesa según las costumbres orientales. Por ejemplo, los palillos nunca se introducen directamente en la boca. Sirven para llevar la comida y depositarla en ella, pero sin rozar los labios. Y, por supuesto, es de mala educación morderlos o chuparlos. Lo adecuado es dejarlos siempre en el reposapasillos cuando no estén siendo utilizados.